Hoy es un día importante. Muy importante. Ya han llegado todos los miembros del consejo del líder que estaban repartidos por distintas partes de Evorn. Ahora estamos en una reunión, pero esta vez es una reunión privada. Ninguno de los miembros normales participan, sólo los cargos algos y aquellos que fuimos invitados en calidad de oyentes.
Bueno, yo no fui invitada realmente, pero le insistí tanto a Will cuando me lo dijo hace unos días que finalmente cedió y aceptó que fuera, pues sabe lo importante que es para mí.
Nos han hecho firmar un contrato de confidencialidad muy extenso y nos han amenazado bastante, con lo cual sé que lo que se comentará es muy importante. Seguramente hablen de lo de Cráteris.
Apenas puedo mirar a Jonathan cuando nos encontramos delante de él firmando, pues el recuerdo de sus palabras sigue muy presente en mí. Por desgracia, los otros dos asquerosos también se encuentran aquí y vaya que fingen bien, porque no nos miran más de un par de veces.
Me sorprendo cuando veo entrar a Whitney y más aún cuando David le hace una seña para que se siente junto a él. ¿La ha invitado?
No me lo esperaba, pues estos últimos días se han suavizado las cosas entre nosotros y parecía que todo iba a volver a estar bien. En parte ha sido gracias a que él no se ha juntado mucho con ella, y la verdad es que yo pensaba que estaba comenzando a utilizar la cabeza. Pero ya veo que no, sólo fue un espejismo.
En estos momentos me alegro bastante de haber decidido sentarme junto a Will y Melissa, porque sino tendría que estar al lado de Whitney y David, y eso se vería bastante humillante.
Unos minutos después entran los últimos participantes de la reunión, Barbara, Luka, Frank, otro hombre y otra mujer a los cuales no conozco. Sin embargo, los cinco se acercan a sentarse junto a nosotros.
Cuando ya está todo el mundo aposentado y en silencio, es cuando Jonathan inicia.
-Buenos días a todos- Saluda. -Qué gusto estar todos juntos de nuevo, como en los viejos tiempos.
Se escuchan algunos asentimientos, pero otros se mantienen completamente en silencio, especialmente Will y los que están sentados junto a nosotros.
-Bien, sé que nuestra situación no es la mejor. Pero por favor, ver tantas caras largas me deprime.
Melissa y yo rodamos los ojos casi al mismo tiempo, no podemos evitar dejar claro lo pésimo que nos cae este hombre. Y bueno, después de escuchar cómo hablaba de nosotras... Tiene suerte de que no le escupa, como mínimo.
Los más cercanos a él se ríen ante su comentario, pero toda esta zona continúa impasible.
-Vayamos a lo que nos concierne- Parece que decide ir al grano al ver nuestra reticencia. -¿Qué apoyos tenemos?
-En Velstand, el ochenta por ciento de la nobleza, incluyendo a los que eran miembros del consejo del Rey Julen- Anuncia Nathaniel. -Preveemos que el pueblo también podría unirse llegado el momento en forma de guerrilla. Habría que infiltrarse para expandir el rumor unos días antes, pero...
-¿Ochenta?¿Estás seguro?- Pregunta un hombre desconocido de unos cincuenta y cinco años. -No estás teniendo en cuenta las amenazas de la guardia roja y Thomas.
-Todos ellos perdieron ingresos, privilegios y poder con la invasión, algunos más que otros. No los subestimes, no subestimes lo que harían por recuperarlos- Replica Nathaniel, muy seguro. -Y también podríamos contar con el ejército.
-¿El ejército?¿Un ejército que no se reúne desde hace diez años?- Contraataca Frank. -Perdóname, pero no creo que podamos contar con ellos.
-Ya nos estamos encargando- Declara Jonathan, sorprendiéndonos.
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El despertar de los caídos (#1)
FantasíaEn un mundo donde la opresión del Rey Thomas ha devastado a su gente, una joven, Haley, vive en las sombras como una plebeya común. Pero detrás de su fachada ordinaria yace un secreto extraordinario: ella es la princesa perdida del reino de Velstand...