El despertar de los caídos (#1)

Capítulo 40

-¡¿Qué?!¿Por qué?

-Es lo mejor.

-¿Lo mejor?¿Desde cuándo?

-Lo he estado pensando y...

-¿Es por Whitney?- Me interrumpe. -Porque si es por eso puedo solucionarlo.

-No. O sea... Puede que un poco en parte, pero también es por más.

-Pues dime por qué. Soy todo oídos- Su tono me deja claro que está muy cabreado conmigo.

-Simplemente ya no siento lo mismo.

-¿Así de fácil?¿De un día para otro decides que ya no sientes lo mismo y me dejas tirado?

-No ha sido de un día para otro, pero no sabía cómo decírtelo...

-Me has engañado, entonces.

-¡No!

Bueno, sí, lo he engañado, para qué vamos a mentir. Realmente merezco recibir sus reproches y su enfado.

-Claro que lo has hecho. Según tú no sientes lo mismo desde hace tiempo y me hiciste creer que todo seguía igual.

-Bien, lo hice mal en ese sentido, pero no pienso aceptar toda la culpa. Tú trajiste a tu ex aquí. ¡A tu ex! Y luego la enviaste a ella para hablar de nuestros problemas.

-Que sea mi ex no significa que aún sienta algo por ella, sólo somos amigos. Pero no has sido capaz de entender eso, claramente.

-Ni yo ni muchas otras personas lo entenderían. ¿Qué te parecería si yo trajese a mi ex novio y te lo presentase?¿Y que encima notases que aún somos cercanos?¿Cómo te sentirías?

Niega con la cabeza, pero sé perfectamente que le he dejado sin poder responder, porque a él eso le molestaría mucho. Por favor, si se puso celoso porque un chico me mirase y lo amenazó.

-Trataría de comprenderte.

-Ni tú mismo te crees eso. Y si te lo crees... Te conoces muy poco a ti mismo, David.

-Al menos hubiese intentado no estar a la defensiva desde el inicio y darle una oportunidad.

-No quería darle ninguna oportunidad.

-Ya lo noté.

-Mira, esto es increíble. Estás siendo un hipócrita. ¡Te daba celos que me hubiese puesto roja con Alexander o que alguien insinuase cosas de nosotros en broma!

-Eso no era ninguna broma.

-Lo era, ninguno de ellos lo decía en serio. Sólo lo hacían para divertirse y para molestarme. Bueno, molestarnos.

-Dijiste que era increíblemente atractivo, ¿tengo que recordártelo? Yo jamás te he dicho algo así de Whitney.

-¡Pero Whitney es tu ex! Alexander no es nada mío.

-Pues por como hablabas de él parecía que querías que lo fuese.

-¿Por reconocer cosas obvias?

-Probablemente no sean obvias, pero tú las ves así porque te gusta y me has engañado desde el principio.

Abro los ojos como platos sin poder creer lo que estoy escuchando. Es impresionante cómo ha dado la vuelta a la conversación para que todo sea mi culpa. ¿En serio me está acusando de que me gustaba cuando yo misma decía que lo odiaba?

-Estás... estás loco.

-Claro, loco. Ahora se le llama estar loco a darte cuenta de las cosas.

-¡Lo había visto dos veces!¿Cómo iba a gustarme alguien que había visto dos veces?