Ein neues Zuhause

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Naruto no se imaginó que una anciana se daría cuenta de su estado, realmente con las ropas enormes no se notaba su vientre, aquella mujer fue quien le dejo que fuese en su carruaje, para que no caminara, así que ayudaba a la señora, que al parecer viajaría hasta donde él se detendría, antes de abordar otro vehículo que lo llevaría a su primer destino, la anciana le daba consejos, para que no le afectaran  aquellos ascos y nauseas que solían llegarle, dejaba que fuese al baño cada que tenía que hacerlo, compartían alimentos y entre ambas cocinaban, y cuando al Uzumaki de repente lo embargaba la nostalgia y terminaba llorando, ella lo consolaba, el rubio ya se había encariñado con aquella mujer y al parecer la señora igual, quien solo tenía una hija y era a la que había ido a ver en aquella aldea en donde había conocido a la chica que le hacía compañía, la anciana había llegado tres días antes a ver su hija para al final ser corrida en tan solo un día, no, ya no volvería a ir a buscarla, su edad y el hecho de que estaba enferma era imposible que la viera de nuevo, sabía que partiría pronto de ese mundo; aquella jovencita, siempre que le daba un ataque de ansiedad la ayudaba, sabia a donde iría, pero quizás si le decía que le acompañara no estaría sola en sus últimos días; cuando el vientre de la muchacha, se empezó a notar mucho más, supo que si era una opción más viable, ya que le sería peligroso irse sola, así que después de dos meses de viaje y a unos días de llegar a donde vivía, hablo con aquella joven.

-Uzu, me preocupa que sigas viajando sola, no sé de qué huyes, para que uses esa peluca blanca -dijo viendo sorpresa en la oji azul. -Solo gente muy observadora se dará cuenta, pequeña -comento tosiendo y expulsando sangre, preocupando a Naruto quien le ayudo, cada día la señora se veía más débil. -Gracias, Uzu, te ofrezco, quedarte conmigo, sin que tengas que usar esa peluca, que me hagas compañía hasta que me vaya -comento viendo llorar a la chica. -No llores, eso no te hace bien -dijo extendiendo sus brazos para consolarla. -No me queda mucho, lo siento, me hubiese gustado ver a tus bebés, estoy segura que será más de uno, por eso te ofrezco que te quedes conmigo y que después de que me vaya te quedes hasta que des a luz, yo fui a ver a mi única hija, llevaba mi testamento, pero ni siquiera me recibió en su casa, así que no te quedaras a la deriva -comento viendo incredulidad en la jovencita.

-¿A qué se refiere señora Izuki? -pregunto derramando más lágrimas, viendo que la señora sacaba un documento.

-No le puse el nombre de mi hija, es mi testamento, pon tu nombre real, fírmalo con tu nombre real, las dos hojas, uno te lo quedaras tu y el otro se lo daré a mi notario, el no revelara tu nombre real -comento entregándole las hojas.

-¿Cómo esta tan segura que no es mi nombre real Uzu? -pregunto sorprendido.

-Querida si usas una peluca blanca, entonces tu nombre debe ser otro, en la aldea puedes quitarte la peluca, estamos lejos de donde te conocí, el pueblo tiene una partera, ella podrá ayudarte, yo le enseñe lo que se, llegando te revisare, hace años fui medico ninja, jejeje, sí sé que no tengo esa pinta, al igual que tu cambie mi nombre por protección y desaparecí, así que firma Uzu -comento sonriendo.

-No creo que sea correcto, esto es de su hija -respondió limpiando sus lágrimas, sintiendo como le pateaban sus bebes.

-Ella me odia, porque nunca le dije quién era su padre, por eso se alejó, no quiere saber nada de mí, no podía decirle que fue concebida de una violación -comento cerrando sus ojos, al sentir que lloraría, era la primera vez que hablaba de ello, sintió como la abrazaba la jovencita y lloraba por ella. -Tranquila, eso fue hace años, así que no te preocupes, firma por favor hazlo por mi -comento sonriéndole amablemente, Naruto lo hizo, aquella señora necesitaba consuelo y seria su turno de dárselo ahora, así que cuando llegaron a la aldea, caminaron hacia fuera del bosque, la casa era grande, no estaba tan lejos de un lago y había animales, un huerto, al parecer la señora cultivaba sus vegetales, la llevo a donde seria su habitación, estaba limpia.

-Este era de mi hija, deja tus cosas, iremos a mi antiguo consultorio, ahí te podre revisar mejor -comento caminando con ayuda de su bastón, por fin llegaron al lugar, este igual estaba limpio. -Desnúdate y súbete ahí -comento viendo como la chica lo hacía, tenía una blusa debajo que mostraba manchas en sus pezones. -Ya empezaste a expulsar calostro niña, ¿apenas empezó? -pregunto viendo como subía con cuidado, su vientre estaba grande.

-Empecé, quince días después de confirmar que estaba embarazado -comento acariciando su vientre, sabía que sus pechos estaban más grandes, había días que le dolían levemente y salía aquello, que ahora sabia como se llamaba.

-Producirás mucha leche, eso es bueno si son dos, no tendrás que darles formula, 6 meses son los recomendable para que solo los alimentes con tu leche materna -dijo empezando a pasar las manos.

-De acuerdo -comento Naruto, al parecer tendría que ser mujer por más tiempo, se relajó, aquella mujer le daba tranquilidad.

-Tus bebes están muy bien, y su crecimiento es de acuerdo al tiempo de gestión que tienes, al ser dos, puede adelantarse tu parto, por eso te pedí que te quedaras conmigo, solo tendrás que estar muy pendiente y tratar de cuidarte, para que no se adelante, lo mejor es que llegues a las 40 semanas, no a las 28 semanas, ahorita estas en la semana 24, son mellizos, vienen en sacos diferentes, tendrás que cuidarte hasta llegar a las 32 semanas, el último trimestre es muy riesgoso, tanto para los bebes como para ti, siempre es peligroso los primeros 3 meses y los últimos 3, hay quienes sufren abortos y pueden perder la vida, así que al mínimo sangrado que veas, tendrás que ir con cuidado con la partera, que iremos a ver después de comer Uzu, no te estreses -comento viendo la cara de la rubia. -Un embarazo es complicado de inicio a fin, así que siempre hay que estar bien, porque los sentimientos fuertes pueden afectarte, ya empezaste con el apetito sexual verdad -agrego viendo a la chica sonrojada. -Es normal, a veces suele ser en todo el embarazo, así que no te avergüences, tener sexo, no le hará daño a los bebes, muy por el contrario a veces ayuda mejor al parto, así que si más adelante encuentras ah alguien y te juntas, si quedas en cinta puedes hacerlo -dijo viendo a la oji azul roja. -Bueno ahora vístete, quítate esa peluca y de ahí nos vamos a ver a la partera, ella vive en la aldea.

-Si -respondió Naruto, haciendo todo lo dicho por la anciana, soltó su cabello rubio, que era demasiado largo, de aquel modo se miraba mucho más grande.

-Te miras hermosa así con tu cabello rubio Uzu -le dijo Izuki, avergonzando a Naruto, comieron hasta que fue la hora de partir, Naruto ayudaba a la anciana a caminar, después de aquel recorrido, muy lento, llegaron con la partera, quien escucho atento lo que le contara su mentora.

-No te preocupes Izuki, yo la cuidare, necesitas descansar, sabes que no puedes hacer sobre esfuerzo -dijo aquella mujer de unos 50 años.

-Tonterías, estoy bien, solo necesito ir a ver a mi notario y de ahí me iré con Uzu -comento seria, a su pupila, lo que menos quería era preocupar a la chica rubia. -Bueno, nos vemos Mayu -comento caminando seguida de Uzu.

-Quizás debamos volver señora Izuki -dijo preocupada.

-Tranquila, no tardaremos, estoy bien -agrego sonriéndole, así fue como conoció a otras persona, un hombre, amable, quien no pregunto nada, al ver el nombre y escuchar otro de aquella chica, luego se despidió de él, ya solo comprarían alimentos y se regresarían, cuando tuvieron todo listo, se encaminaron de regreso, Naruto, nunca noto, que paso a lado de alguien que lo reconoció, consternado por el enorme vientre que había visto, ni sintió que aquella persona lo siguió, cuando llegaron a la casa, la señora Izuki, dijo que necesitaba descansar, así que el oji azul, la ayudo, estaba preocupado por la mujer, que nunca noto que los seguían, de repente empezó a toser demasiado fuerte.

-Señora Izuki, debimos regresar antes -dijo Naruto, ansioso.

-Uzu, respira, yo morirépronto, si llego a los 2 meses será un milagro, necesitaba presentarte contodos, cada día me pondré más débil y ahorita lo que más me preocupa es que tequedes sola, eso me motivo a hacer lo que hice ahorita, sobre esforzarme, asíque tranquilízate, las emociones fuertes no te harán bien, recuérdalo, así que pásameel frasco que está ahí y un vaso de agua, podré dormir un rato, puedes cocinarcon confianza pequeña -comento recibiendo la medicina, apenas serían las 5 dela tarde, así que Naruto la dejo descansar mientras cocinaba.

¿Asexual o demisexual? La historia de como Jiraiya hizo cambiar a NarutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora