El silencio comenzaba a inundar la mansión y eso preocupaba a William, hacia varios días que Cael estaba raro con él, tomando distancias muy notorias y dándole más espacio personal del que le gustaría. Más de una vez quiso preguntar porque actuaba de esa forma pero estaba casi seguro que había sido por su actitud de aquel día donde se fue un rato.
No estaba seguro si algo había pasado en ese tiempo o si por su cuenta Cael había decidido alejarse, pero la distancia que se estaba formando en cierta forma le dolía, le había agarrado cariño al chico y verlo así era jugar con sus sentimientos.
Impaciente por toda esa actitud William lo acorralo en la cocina, desde atrás de él mientras lavaba los platos - Necesitamos hablar. - dijo en un tono firme pero delicado, lo estaba volviendo loco esa falta de amabilidad y sus charlas diarias de cualquier tema que se les pudiera venir a la cabeza.
Cael tembló ante el ataque aferrándose al plato en sus manos como si su vida dependiera de ello - ¿Debe ser ahora? Estoy lavando. - dicto siguiendo con su labor sin querer mirar al ser detrás suyo.
William apretó sus manos impaciente y sujetándolo de la cadera lo giro y acorralo nuevamente dejando sus manos a los costados de él sin dejarle escapatoria - Si, ahora. - respondió firme con una mirada ansiosa, no le gustaba comportarse así pero Cael lo dejaba hecho un manojo de nervios.
Cael trago en seco al tenerlo frente a frente, la espuma de platos le empezaba a caer por los brazos hasta terminar en el suelo mientras trataba de mantener la mirada al frente, le era algo fácil ignorar la mirada de Will, este lo superaba por bastante en altura, o al menos eso pensaba hasta que este le levanto la mirada para verlo fijamente, notando la preocupación y tristeza en aquellos ojos carmesí que lo penetraban hasta el fondo de su alma.
- Que esta sucediendo entre nosotros, te noto distante y más apagado, ya no bromeas conmigo ni con los guardias. - dijo William en un tono preocupado levantando una de sus manos para acariciarle una mejilla a Cael, provocando que su mejilla ardiera al sentir el contacto de su piel y su pecho diera un bote de arriba a abajo completamente desenfrenado.
- No es nada en especial, solo.. - Cael soltó un suspiro resignado, con esto tenía más que claro que en este corto tiempo había desarrollado una fuerte atracción hacia Will y lo estaba volviendo loco tenerlo tan cerca y a su disposición - Solo estoy tomando la distancia que debería haber tenido desde un principio. - dicto en un tono bajo separando con cuidado la mano de Will y apartando la mirada de aquellos ojos que lo dominaban.
William confundido afirmo su mano al costado sin dejarle escapar aún - No te entiendo, explícate. - dijo demandante apegándose un poco más sin apartarle la mirada, estaba algo enojado e inquieto pero no era el momento de mostrar debilidad.
Cael trago saliva y se aferro al delantal de cocina mirando a cualquier parte que no fuera Will - He notado que cada vez estas peor, cuando estas cerca mío no puedo evitar darme cuenta que sufres, no se si te recuerdo a tu ex esposo o es otro tipo de dolor, pero prefiero mantener mi distancia. - dicto sincero mirandolo de reojo - Solo quiero lo mejor para los dos y lo mejor es esto, no quiero verte sufrir. - admitió en un tono apagado, tenía claro que nunca podría competir por todos los momentos y tiempos que William paso con Mateo, eso le destruía en parte pero lo aceptaba por no tener más alternativas.
William se quedo mirando a Cael estático por unos momentos, dejo caer su cabeza en el cuello de este soltando un suspiro conmovido, estaba sorprendido que dentro de esa mentecilla hubiera un espacio para pensar en él y en sus preocupaciones, estaba feliz de ser cuidado por Cael y no tenía muchas formas de expresarlo sin ser mal entendido. Podía escuchar el corazón de Cael bombear como loco sangre a todos lados y por su postura podía sentir donde estaba bombeando más, al sentir una leve presión en su pierna.
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Mi dulce girasol (Omegaverse)[HIATUS]
Teen FictionAaron, un asesino reconocido como el segundo mejor dentro del bajo mundo, recibe constantemente misiones para eliminar personas de múltiples lugares. Por un pequeño "error" su próximo objetivo resulta ser el dulce chico con nariz de perro a cargo...