SUÉLTALO A VER QUÉ PASA.

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It's not your fault I ruin everything

And it's not your fault I can't be what you need

Baby, angels like you can't fly down here whit me.

-Miley Cyrus, Angels like you.

Rafael decidió darme un par de días en casa, hablamos día y medio al que le siguió a mi crisis, recuerdo que después del almuerzo me sentí más tranquila, pensé que necesitaba enfocarme en mis decisiones, me vi tentada a ir a la dirección que dejo mi padre en la carta, no estaba segura de sí sería la opción correcta, él desea que ellos me enseñen cosas que ya sé, cosas que he aprendido sola, tal vez me ayuden más que Rafael, le pedí ayuda, pero...

―Necesito que me ayudes a controlar mejor mis emociones.

―Las emociones no pueden controlarse.

― ¿Disculpa, Acaso no es este tu trabajo?

Replique confundida.

―Mi trabajo es ayudarte a entender tus emociones, que tengas conciencia de todo lo que has reprimido desde lo que presenciaste y dejes de evitar, sentir.

―Yo no reprimo mis sentimientos ―defendí.

―Me dijiste que amabas un "gato" pero decidiste salir con el "escalofrió".

―Ellos no son el problema aquí.

―Son parte de ello ahora.

― ¡Solo dime como no perder el control otra vez!

―Estas levantando muros, cada vez son más gruesos y altos y están aplastándote. Si no los derribas, la ayuda no sirve.

Me reí y salí de la habitación, estaba harta de toda esa basura de los muros, estaba harta de tener que ver como todos lidiaban con mis problemas, con mis arranques, harta y dolida, no podía aceptar que mi padre me hiciera eso, no podía aceptar que Draco me tratara de esa forma. Tome un tren a Salento, necesitaba hablar con personas que me entendieran, personas que me escucharan, personas a las que no tendría que esconderles nada.

Mi sorpresa fue tremenda cuando la puerta se abrió y de ella salió; una hermosa mujer de cabello verde lima, esta vez le traía suelto y extremadamente liso. Sus ojos grandes y de color miel me observan con atención, pronto una sonrisa de bienvenida se dibujó en sus labios, me esperaban, lo noto, la pregunta es ¿Por qué?

― ¿Por qué tan pensativa?

― ¿Mak?

―Hola ―saluda sentándose a mi lado, en la misma ventana donde tuve una pequeña conversación con Asier alguna vez.

―Lo siento ―me disculpo, suponiendo que viene a hablar conmigo sobre As.

― ¿Por qué?

―Termine con As.

―Él no lo ve de esa forma ―respondió con una sonrisa quitándole importancia, iba a decir algo, pero no me lo permitió―, sabe que no estabas lista para ser su novia, solo lo dijo para que entendieran que él estaría allí para ti. Y que no pueden hablar mal de ti en su presencia.

―Pero... parecía decepcionado cuando...

― ¿Qué le dijiste exactamente?

Recordé el momento y mire hacia la ventana, regresaba de hablar con los Bangalter y él estaba allí en la puerta, no soy una mala hija llame a mamá y le dije dónde estaría, ella los conocía, cuando le dije que papá me lo había pedido en una carta que encontré se emocionó, son buenas personas me dijo, y entendían a tu padre como yo nunca pude. Asier, sin embargo, estaba preocupado, creyó que no era el momento de dejarme hacer un viaje sola, aunque fuese al sur del país.

―Le pedí perdón, le dije que en verdad tenía sentimientos por él, pero que necesitaba arreglar mis emociones antes de dar un paso tan importante como ser la novia de alguien.

― ¿Y qué te dijo él?

―Me abrazo, con fuerza y... dijo... dijo que no quería estar conmigo como una necesidad, como un escape a nuestros corazones destrozados, dijo que quería estar conmigo porque ―recuerdo que lo interrumpí y abrazándolo con más fuerza musité que tenía miedo y entonces, él dijo―, me ama.

Mak suelta un sonoro suspiro y mira sus manos, puedo ver su reflejo en el cristal sin necesidad de esforzarme, ayuda un poco que no esté muy limpio hoy.

― ¿Y tú? ―me pregunta― ¿Qué sientes?

No respondo de inmediato, no sé bien que responder, Rafael me pregunto lo mismo, quería saber porque era "novia" de As y no de Eidan. Había dicho con mucha seguridad que lo amaba, recordaba esa sesión y recordaba lo segura que me sentía al respecto, lo que me causaba miedo... soy consciente de no tener un futuro con Eidan, pero eso no quita que no pueda... sentir... amor. Solo lo sientes, y lo sabes, lo sabes porque tu mundo cambia en su presencia, porque sientes algo nuevo y saturado, es...

―Vaya bosquecito... te has puesto muy roja de repente, hasta parece que necesitas un baño de agua fría.

Lo empuje y casi se cae, lo que lo hizo reír.

Onnekas —continuo—, se quemará muy pronto en el fuego de las Saltzman.

― ¡Cállate! No es eso.

No pude evitar reír con él, se acomodó nuevamente a mi lado, mientras la risa se fue apagando, él no sabía que no pensaba realmente en Asier, se enojara si se entera. entonces suspiré y lo recordé.

― ¿Sientes algo por mí? ―me miro confundido―, es decir, sé que te agrado, me refiero a que... me dijeron que te gusto.

―Eso quisieras bosquecito, pero no, mi corazón esta con alguien más. Solo me gustaría que ella en verdad lo quisiera.

― ¿La conozco?

Él se levantó y sacudió su pantalón, luego me tomo por ambas mejillas y las pellizco acercando mucho su rostro a mí.

―Ni en tus sueños más lindos le imaginarias.

Entonces se fue, y me dejo allí pensando, ¿tan bonita es? Me quede observando en silencio el bosque, aquel pedacito que la ventana me permite ver, vi pasar a mis amigas, Mak les alcanzo, note como Layla se tensó, Anne pregunto por mí y él me señalo, las salude, y ellas a mí, no quise ir con ellos, no tenia deseos de ir al bosque, necesitaba algo diferente, no amigos o magia o bromas, necesitaba a mi Mamá.

Así que eso hice, fui a verla, a pasar un tiempo con ella. Estaba muy ocupada con trabajo, pero no le importo, permitió que le hiciera compañía, hablo conmigo de los Big Bang dijo que papá les llamaba así, le dije que me agradaron y que sí, me ayudaron un poco a entender a papá, no le hable de la página, no quería que ella pasara por otro dolor, opto por ignorar que no menciono a mamá allí, no deseo perder el control nuevamente, quiero a mi mami feliz y me gustaría tranquilizarla con respecto a mí, así que me disculpo, le pido perdón por ser tan explosiva y por causar tantos problemas, le digo que sé que lo he dicho muchas veces pero que de verdad intento mejorar y ser más normal, más feliz, más tranquila. Ella es muy dulce conmigo y apartando las lágrimas de su rostro, me da un beso en la frente y me abraza, diciéndome que no me preocupé, y que soy yo quien debe perdonarla, si no hubiese estado tan ocupada ese día y me hubiese prestado más atención yo no habría ido al bosque sola y no habría pasado por esto. No la culpo y se lo hice saber, lo culpo a él, pero ella no necesita saber que culpo a alguien, lo superaremos juntas, ahora lo sabemos y ella será feliz, me asegurare de ello.

Lo prometo. 

Draco, el bosque bromista.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora