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   Cada día puede parecer una batalla emocional, al lidiar con pensamientos negativos y preocupaciones constantes.

Cuando alguien tiene el corazón roto, puede experimentar una profunda tristeza, dolor y pérdida. Los días pueden estar llenos de recuerdos dolorosos y una sensación de vacío. Puede sentirse abrumado por emociones como la ira o la confusión.

Pueden haber momentos de calma y esperanza, pero también momentos de intensa melancolía y ansiedad. Lo importante es reconocer que estás en un poso y comenzar a buscar la manera de salir de ahí.



  Habían pasado aproximadamente seis días. Jimin recibió un archivo en dónde se le ofrecía una suma considerable de dinero por salir a desmentir su relación con Jungkook. Lo cual no aceptó. Volvió al trabajo explicándole a su jefe la locura que había surgido después de dicho rumor y el mayor ya estaba al tanto.

Por los momentos, prefería no hablarle ni a Taemin ni a Yoongi, aunque este último no hubiese hecho realmente algo malo.

Necesitaba un momento para pensar.

  Una noche de tantas, decidió responder algunos mensajes de los pretendientes que tenía y había uno que siempre le dejaba corazones en las fotos e historias desde hace meses.

Se llamaba Hoseok.

- "Hola, muchas gracias por tus bonitos mensajes"

Respondió sintiéndose completamente raro al hablar con otro hombre que no fuese...

El chico en sí, no era su tipo físicamente, lucía más delgado y no tenía tatuajes pero su aura se veía reconfortante y eso era lo que necesitaba: algo de luz en su vida.

- "Waa, no puedo creer que al fin me respondes. Me siento muy feliz"

Jimin sonrió - "¿Cómo estás, Hoseok? ¿De dónde eres?"

- "Estoy muy bien, ¿y tú? Vivo en Seúl. Tu perfil me salió en sugeridos hace tiempo. Supongo que es por la ubicación"

- "Oh, sí. Es verdad, también soy de Seúl"

La verdad es que quería invitarlo a salir pero no sabía cómo.

- "¿Tienes planes para este fin de semana?"

— Gracias — exhaló aliviado.

- "¿Por qué?"

- "Es la inauguración de mi restaurante. Si no tienes nada qué hacer, me gustaría que asistieras. Perdón si soy muy lanzado..."

- "¿Abrirás tu propio restaurante? Eso es increíble. Muchas felicidades... Y sí, está bien. Envía la dirección."

- "¡Genial! Muchas gracias, Jimin."

- "Es un placer, Hoseok"

No habían intenciones por parte del rubio de tener un amorío. Necesitaba salir de las garras de la fama de Jungkook y aprovecharía para hacer un amigo nuevo.

                                ~

El sábado por la noche se arregló lo mejor que pudo y condujo hasta el restaurante.

Algunos periodistas seguían merodeando su edificio, buscando primicias y eso ya lo tenía harto.

Hoseok lo esperó en la entrada y al verse, se regalaron un primer abrazo — Eres mucho más lindo en persona — el pelinegro lo halagó.

— Tú también — sonrió.

El lugar era hermoso y tenía unas vibras urbanas bastante marcadas. Colorido y alegre; diferente a la mayoría de restaurantes de esa zona de Itaewon.

— ¿Y qué opinas?

— Creo que todo tiene tu estilo, me gusta mucho.

— Puedes pedir lo que quieras e irá por la casa.

— No te preocupes, yo puedo pagar...

— Eres mi invitado especial — le pasó el brazo por los hombros, guiandolo hacia una mesa.

Jimin vió ese acto como un quiebre al bloque de hielo que posiblemente había entre ellos y lo agradeció. Él era muy carismático.

— Bueno, muéstrame el menú.

Los entradas constaban de sabores familiares pero intrigantes, como la Bruschetta de Kimchi y los Tacos de Bulgogi, que combinaban ingredientes coreanos tradicionales con platos occidentales populares.

Los platos principales ofrecían una mezcla de lo mejor de ambos mundos. El Bibimbap de Manhattan era una reinterpretación del plato de arroz coreano clásico con un toque neoyorquino, mientras que la Hamburguesa de Galbi fusionaba la hamburguesa americana con la marinada de costillas coreana.

Los postres eran una fusión, con el Cheesecake de Patbingsu combinando el postre clásico de Nueva York con el helado de hielo raspado coreano, y el Hotteok de Manzana y Canela que ofrecía una versión dulce de los panqueques coreanos.

Las bebidas incluían tanto cócteles con soju, como refrescantes tés de cebada, brindando opciones para todos los gustos.

El menú del restaurante era un viaje culinario que unía dos culturas a través de la comida, ofreciendo una experiencia gastronómica única y deliciosa.

— Es impresionante, ¿viviste en New York?

— Muchos años, sí. Estudié gastronomía allá.

— Eres muy interesante... — puso la carta en la mesa y señaló.

— Hamburguesa de Ghabi. Buena elección — se levantó — avisaré en la cocina para que no me dejen en vergüenza.

Jimin carcajeó, era cómodo estar con él. Sin embargo, su sonrisa se desvaneció progresivamente. ¿Era justo usarlo como conejillo de indias?

Definitivamente no. Tenía que hablar con él de forma sincera.

Hoseok volvió a la mesa, y al menos veinte minutos después, la comida de ambos estaba servida. El rubio expresó su satisfacción despues de cada mordisco — ¡Está delicioso!

— Pues gracias a Dios... Imagínate que no te haya gustado.

Sonrieron mutuamente. Se llevaron bien.

  Más tarde, cuando los comensales se habían ido y solo quedaron ellos dos despidiendo al personal; salieron del restaurante.

— ¿Cómo la pasaste?

— Muy bien — asintió.

— Sin embargo... Has estado callado, ¿puedo saber lo que te tiene así?

El rubio levantó la mirada y buscó al rededor — Tengo a la prensa detrás de mí...

Hoseok miró también a los lados — ¿Eres famoso? — habló con humor.

Jimin sonrió y miró sus manos — Tuve una aventura... Con alguien que sí lo es y ahora me acosan a dónde quiera que voy.

— ¿Necesitas que haga algo? — preguntó con preocupación.

Jimin respiró profundamente — ¿Puedes... Darme un abrazo?

— Por supuesto — lo cubrió entre sus brazos, dejando al menor en el medio, brindándole caricias en el cabello — no estás bien, ¿verdad? — negó sin soltarlo — todo mejorará... Te ayudaré.

El más bajo levantó la cabeza para mirarlo — Se mi amigo...

— Ya lo soy — le acomodó el cabello hacia atrás y le regaló una sonrisa mientras le acariciaba la mejilla.

— Gracias...








Buenos días mi gente puerkosa, nunca les he puesto a un Jimin con un yeijop y verdaderamente ellos son picositos juntos. Les adelanto desde ya que no es malo, al contrario, será una ayuda para Jimin ☺️🥰

Vamos a empezar con la versión de Jungkook 🤸

PRECOP  - KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora