El octágono de la MMA es un hervidero de energía y emoción. Las luces brillantes iluminan, y la multitud se agita en sus asientos, la excitación es palpable. En el centro, el suelo de lona se asemeja a un tablero de ajedrez gigante, listo para el juego de estrategia y fuerza que está a punto de desarrollarse.
En un rincón, se encuentra Park Jaebeom, el luchador más fuerte de Corea. Su cuerpo es delgado pero musculoso, cada músculo esculpido y definido. Su piel está cubierta de tatuajes, cada uno contando una historia de luchas pasadas y victorias ganadas. Tiene un semblante de chico malo, su mirada es pesada y desafiante, y su presencia en el octágono es imponente.
En el otro rincón, está Jeon Jungkook, el campeón de Japón. Es apuesto, con una sonrisa segura y ojos llenos de determinación. Su cuerpo es atlético, cada músculo está tonificado y listo para la acción. Un brazo está adornado con tatuajes, un testamento de su viaje como luchador. Su presencia es igualmente dominante, una fuerza a tener en cuenta.
El ambiente es eléctrico, la tensión es alta. Los espectadores contienen la respiración mientras los dos oponentes se miran, cada uno evaluando al otro. A pesar de su apariencia, ambos luchadores tienen un respeto mutuo, conscientes de la habilidad y la fuerza del otro.
La campana suena, y la multitud estalla en vítores. La pelea está a punto de comenzar. Cada luchador se prepara, listo para darlo todo.
Jimin se coló entre la multitud, buscando un lugar cómodo donde pudiera ver mejor.
Habían pasado varios días desde la última vez que vió a Jungkook y aunque quería alejarse, lo echaba mucho de menos. Por eso, aunque no planeaba seguir con su relación, al menos estaría ahí para apoyarlo.
La gente comienza a murmurar, tal parece la pelea estaba por comenzar. Los nervios se apoderaron de su cuerpo. Nunca había estado en un evento así...
La multitud retumbó en el estadio y la anticipación era palpable. Observó como dos personas le daban agua a Jeon y lo motivaban. En el octágono de la MMA, los dos hombres se prepararon para la batalla.
El árbitro da la señal y la primera ronda de comienza. Jaebeom toma la iniciativa, lanzando una serie de golpes rápidos y potentes que Jungkook apenas logra bloquear. Jaebeom es rápido, su estilo de lucha es agresivo y está claramente decidido a ganar.
Para el rubio, ver eso le causaba vértigo. Sabía que el pelinegro era fuerte pero temía que le dieran un mal golpe.
Los cinco minutos terminaron en un empate, la pelea constaría de tres rondas y el que el cayera a la última perdería.
Jaebeom estaba decidido a ganar, pero Jungkook no se quedaba atrás. A pesar de la embestida inicial, se mantuvo firme, esquivando y bloqueando los golpes con una precisión y agilidad impresionante. Respondió con una serie de patadas altas que sorprendieron a Jaebeom, obligándolo a retroceder.
La pelea es una danza de golpes, patadas y gruñidos. Jaebeom lanza un golpe que Jungkook logra esquivar, pero Jaebeom aprovecha y lo agarra en una llave de brazo. Jimin grita y se cubre los ojos, aterrado.
Por un momento, parece que Jungkook podría ceder. Pero con un esfuerzo sobrehumano, se libera y lanza a Jaebeom al suelo, logrando que la multitud enloquezca — ¡Vamos Jungkook! — el pequeño celebra, y le hace porras, ganándose su mirada.
Ahora Jeon lleva la delantera. Con Jaebeom en el suelo, lanza una combo de golpes que el otro luchador apenas logra bloquear. Pero Jaebeom no se rinde fácilmente. Con un rugido, se levanta y contraataca, golpeando a Jungkook en el estómago.
— ¡No! — el rubio estaba volviéndose loco, quería entrar y pelear con ese hombre.
Terminó la segunda ronda.

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PRECOP - KOOKMIN
FanfictionEn los últimos días, ha surgido una nueva aplicación de citas virtuales que ha capturado la atención de los jóvenes de forma masiva. Los amigos de Jimin, conscientes de su timidez e inseguridad, decidieron tomar cartas en el asunto y crearon un perf...