Te castigaré.

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CAPÍTULO 5

Mis ojos se abrieron lentamente. Estaba en una habitación diferente cuando recordé lo que había sucedido horas antes y Tom me había llevado a la habitación al final del pasillo. Estaba muy asustada, esperando que él no estuviera aquí para poder esconderme.

Gemí suavemente tratando de mover mi cuerpo dolorido, pero mis brazos y piernas estaban atadas, estaba acostada en una cama y pronto me desesperé. Lo bueno es que era mucho mejor que la silla en la que estaba, pero estaba allí, atrapada de nuevo, el maldito Tom Kaulitz me había atrapado de nuevo. No sabía por qué sentía un ligero sentimiento de culpa después de lastimarle la mano, es un maldito psicópata. Todo esto pasó en menos de un día, me estaba agotando.

Levanté un poco la cabeza, miré a mi alrededor y vi a alguien sentado en un banco en un rincón de la habitación, fumando un cigarrillo.

--- Maldita sea, te tomó un tiempo despertarte, ¿eh? Te golpearé menos fuerte la próxima vez. --- Dijo con una ligera risa.

--- ¿Tom? --- Dije con voz temblorosa.

Se acercó y pude confirmar que era él. Tom parecía travieso y pude ver que tenía una venda en la mano.

--- ¿Qué está pasando? --- Pregunté con voz llorando.

--- Te lo advertí Katy, no me obedeciste y ahora te voy a castigar. --- Dijo Tom, acercándose a mí.

Mis ojos comenzaron a lagrimear y solo quería salir de su vista en ese momento, lo había desobedecido con mi fallido plan. Estaba desesperada y sentí una sensación de ira porque todo esto estaba sucediendo.

--- ¡NO TIENES DERECHO A HACER ESTAS COSAS! ¡ESTÁS ENFERMO! ¡LIBERAME! --- Le grité, estaba llorando, pero parecía que a Tom no le importaban mis gritos.

--- Serás mía lo quieras o no y simplemente porque yo lo quiero así, no tienes otra opción. --- Tom dijo con una expresión de placer en su rostro.

--- ‎¡Ustedes son unos inútiles! Apuesto a que pasan su tiempo destruyendo la vida de las chicas tal como lo están haciendo conmigo y con Vick. --- Le dije con una expresión de disgusto en mi cara.

--- ¿CÓMO ME LLAMASTE? ¿SABES CUÁNTAS PERSONAS HE MATADO? NO SERÍA DIVERTIDO SI FUERAS TÚ.

Gritó Tom, acercándose a mi cara, mirándome con esa mirada mortal. No podía moverme, ¿a cuántas personas había matado? Cerré los ojos y las lágrimas cayeron por mi rostro.

--- Hijo de puta. --- Accidentalmente dejé escapar mis pensamientos. Tom rápidamente me abofeteó con fuerza y ​​comenzó a arrancarme la ropa con ira.

Estaba tratando de procesar todo lo que estaba pasando, estaba exhausta y casi me desmayo nuevamente. Vi a Tom encima de mí rasgando mi ropa como loco, no quería imaginar lo que estaba a punto de hacer, solo quería morir.

--- Sé que quieres esto, no te resistas. --- Tom susurró en mi oído, dejándome entumecida, ya no sabía dónde estaba, mi deseo era que ese miedo terminara.

Me había roto la blusa, las medias y me había quitado la falda. Estaba en ropa interior cuando se levantó un poco y sacó el arma de su cintura.

--- ¡NO! --- Grité fuerte, tratando de liberarme de inmediato, el miedo se apoderó de todo mi cuerpo ahora. Tom rápidamente puso su mano sobre mi boca.

--- ¡Cállate o te vuelo la cabeza!  --- Me gritó y suavemente apartó su mano de mi boca.

Me quedé paralizada, no podía hacer ningún ruido, ya tenía los ojos empapados. Tom se subió encima de mí con el arma en la mano y comenzó a pasarla por mi cuerpo. Empecé a sentir escalofríos de miedo, me estaba debilitando, en cualquier momento me iba a desmayar.

Lo sentí frotar su miembro contra mi muslo, que ya estaba duro dentro de sus pantalones. Tom estaba haciendo todo esto con una sonrisa traviesa en su rostro. Me miró con agonía y sonrió, como si lo estuviera disfrutando. Tom deslizó suavemente el arma por mi vientre hasta llegar a mi zona íntima, no podía moverme, cuando dejé escapar un gemido de miedo y comencé a llorar mucho al poco tiempo.

--- ¿Vas a obedecerme ahora Katy? ¿O quieres un poco más? --- Me susurró al oído, lo único que pude hacer fue asentir con la cabeza, esperando que toda esta tortura terminara. --- Entonces hemos terminado. --- Dijo Tom, simplemente bajándose de mí y soltándome poco después.

Rápidamente me acurruqué en la cama y dejé escapar un profundo suspiro. Lo vi ir a encender un cigarrillo con los ojos húmedos, pensando en que él no se sentía culpable por lo que hizo, Tom Kaulitz es un monstruo.

--- Esto es para que te vistas, saldremos esta noche. Y si no quieres que esto o algo peor vuelva a suceder, escúchame, será mejor que te portes bien.

Dijo Tom, tirando algo de ropa y una toalla sobre la cama. Poco después de dar una larga calada a su cigarrillo, sonrió de reojo, se giró y se dirigió hacia la puerta, saliendo de la habitación para que yo pudiera ducharme y prepararme.

Mi Pesadilla Más Oscura - Tom Kaulitz.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora