Te encontraré.

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CAPITULO 28

Pov Tom Kaulitz.

Mi visión estaba borrosa, mi cuerpo estaba débil cuando pude escuchar el sonido de dos disparos, Katy acababa de dispararle al hombre. Grité y traté de levantarme pero no pude, cuando escuché a Bill gritar a continuación.

Odiaba esa sensación de debilidad, mis ojos se cerraban lentamente cuando la vi correr, le dije a Katy que no se fuera pero ella no parecía escucharme. No podía ir tras ella ahora y comencé a sentirme enojado, de repente todo se volvió negro.

(...)

Mis ojos se abrieron lentamente y estaba acostado en una cama de hospital, ya amanecía y todavía me sentía débil. De repente pude ver a un médico entrando a la habitación y acercándose.

--- Señor Kaulitz, el disparo alcanzó su arteria femoral, perdió mucha sangre pero ya le retiramos la bala. Fue un milagro que sobreviviera. --- Dijo el doctor con una mirada seria, luego salió de la habitación y cerró la puerta.

Antes de que pudiera reaccionar, escuché que la puerta del dormitorio se abría de nuevo. Bill entró rápidamente con una banda en el brazo, junto con Gustav y Georg que venían hacia mí.

--- ¡MIERDA! ¿DÓNDE MIERDA ESTÁ ELLA? --- Grité e inmediatamente intenté levantarme.

--- ¡Cálmate! --- Dijo Bill, abrazándome fuerte para que no me levantara de la cama.

--- ¡Te dispararon, hombre! Cálmate un poco. --- Gustav dijo acercándose.

--- ¡NO VOY A MANTENERME CON CALMA! NECESITO SABER DÓNDE ESTÁ KATY AHORA MISMO, ¡DÉJAME SALIR! --- Le grité a Bill, empujándolo e inmediatamente levantándome de la cama.

Dejé escapar un leve gemido de dolor, todavía me dolía la pierna y cojeé un poco, pero logré mantenerme erguido. Georg se acercó rápidamente a mí y puso sus manos sobre mi hombro.

--- Bill dijo que ella se fue, hombre, ambas lo hicieron. --- Dijo Georg con una mirada seria, pareciendo todavía molesto por la pelea de la otra noche.

--- Joder, la encontraré. --- Respondí en voz baja. Bill me miró con una mirada triste, parecía estar molesto porque Vick también se había ido.

Me miraban en ese estado, con mirada de preocupación. Odiaba ese sentimiento, no me gustaba sentirme débil. Katy nunca abandonó mi mente, lo había hecho para salvarme la vida y se fue después. Necesitaba encontrarla y volver a tenerla en mis brazos, comencé a estar ansioso.

--- ¿Qué carajo están mirando? Que alguien me dé un cigarrillo. --- Dije enojado. Bill rápidamente sacó un paquete de su bolsillo, sacó un cigarrillo y un encendedor y me lo entregó en la mano.

Encendí el cigarrillo y comencé a fumar, dirigiéndome hacia una ventana de la habitación del hospital. Sentí ganas de llorar en ese momento, pero inmediatamente contuve las lágrimas. Georg y Gustav se acercaron, poniendo sus manos en mi hombro, intentando calmarme. Toqué ligeramente el brazo de cada uno de ellos, agradeciéndoles por venir.

--- Ya nos vamos. --- Dijo Georg, dirigiéndose hacia la puerta del dormitorio y saliendo con Gustav.

Me di vuelta y pude ver a Bill sentado en la cama con la cabeza gacha, parecía pensativo en algo. Bill rápidamente levantó la cabeza y se echó a reír.

--- Katy está enamorada de ti, Tom, si no le agradaras, no haría lo que hizo. Y obviamente tú también estás enamorado de ella. --- Bill dijo riendo.

--- ¡Deja de decir tonterías! --- Respondí enojado, comenzando a pensar en lo que realmente sentía por ella. Negué ese sentimiento que se estaba intensificando, no lo quería, no podía suceder.

--- Vamos a casa, necesito mi auto y un arma, voy a salir a encargarme de algunas cosas. --- Le dije a Bill, quien me miró arqueando una ceja.

--- ¿Vas a ir tras ella? Quizás yo vaya contigo. --- Bill dijo mirando hacia otro lado. Sabía que tenía sentimientos por Vick, era obvio que él también quería encontrarla pero no lo había admitido.

Le di a Bill una leve sonrisa y me dirigí hacia la puerta del dormitorio, todavía cojeaba un poco. Bill se acercó detrás de mí y me abrazó por la espalda para ayudarme a caminar.

--- ¡Puedo caminar! ¡Déjame! --- Le dije y él se rió de inmediato. Bill sabía que no me gustaba sentirme débil.

--- Vamos, recogí mi auto en el casino, pero el tuyo todavía está allí. Podemos ir en el mío y luego tú puedes conseguir el tuyo. --- Dijo Bill cuando llegamos a la salida del hospital.

Bill subió a su auto y abrí la puerta principal, sentándome con cierta dificultad. Arrancó el vehículo y pisó el acelerador a fondo, dirigiéndose hacia nuestra casa. No podía sacarme a Katy de la cabeza, tenía que encontrarla pronto, antes de que pudiera hacer algo.

Finalmente llegamos a nuestra casa y Bill detuvo el auto. Abrí la puerta y salí del vehículo lentamente, casi cayendo al suelo.

--- ¡CARAJO! --- Grité enojado, todavía me dolía la pierna.

--- Contraté a dos nuevos guardias de seguridad esta mañana, asegúrate de no matarlos, ¿de acuerdo? --- Dijo Bill, riéndose entonces.

Me reí levemente y entramos a la cocina, me dirigí hacia la mesa y me senté en una silla.

--- Necesito una bebida. --- Dije estirando los brazos.

Bill sacó una botella de whisky del armario y dos vasos y los colocó sobre la mesa. Tomé la botella y serví los vasos, entregándole uno a Bill. Tomé un solo sorbo de mi bebida, vacié el vaso y luego lo volví a llenar.

--- Necesito hacer algunas llamadas. --- Dije tratando de encontrar mi celular en mi bolsillo. --- ¡MIERDA! Acabo de recordar que rompí mi teléfono celular, necesito tuyo Bill. --- Dije a continuación.

Bill se rió y luego tomó un sorbo de su bebida. Sacó su celular del bolsillo de su pantalón ajustado y me lo entregó, mirándome con una mirada curiosa.

--- ¿Qué vas a hacer Tom? --- Preguntó Bill, arqueando una ceja.

--- Tengo los contactos adecuados, cuando ella menos lo espere estaré a su lado. --- Respondí, con el celular en mis manos. --- Prepárate Katy, te encontraré. --- Dije con una sonrisa de reojo, luego me reí.

Mi Pesadilla Más Oscura - Tom Kaulitz.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora