Freen platicaba animadamente con Heng en el auto, mientras se dirigían a una cafetería.
Una vez allí, hicieron su pedido, apartaron un lugar para estar cómodos y esperaron mientas Heng le platicaba cómo fue su vida en el extranjero
Heng: Si, fue difícil el cambio, pero pude adaptarme con el tiempo.
En Australia tuve la oportunidad de expandir mis conocimientos al ver y compartir una cultura distinta.
Hay animales con un tamaño que te sorprenderías y te asustarías seguramente. Pero en lugares específicos.
El mito de que puedes encontrarte una serpiente gigante dentro de casa o apartamento no es cierto.
Freen: Lo importante, es que te divertiste y aprendiste mucho, Heng.
No volví a saber nada de ti a tan solo días de haberte marchado.
Heng: Lo sé.
Los cambios de horario son muy fuertes y descontroló mi ciclo de sueño.
Salir a buscar una universidad, muebles y cosas necesarias para la casa.
Todo pasó muy rápido. (Suspiró al decir la última frase)
Freen el desánimo en él, cambiando su rostro a uno más intrigante al ver a su amigo cabizbajo de un momento a otro
Freen: ¿Qué ocurrió Heng?
Cambiaste tu estado de ánimo repentinamente
Heng: Conocí a una chica increíble en la universidad. (Suspira con una sonrisa irónica)
Todo parecía marchar bien.
Pero al cabo de unos meses, comencé a sentirme incómodo en la universidad.
Las personas me veían y murmuraban. Yo no entendía.
Y más complicado se tornó, cuando Chloe, así se llama, también cambió conmigo.
Creí que eran cosas mías y de mi cabeza, pero no.
Algunos compañeros cercanos, con quienes compartí mi estadía allí, me dijeron múltiples veces que ella me engañaba con el líder del equipo de Rugby.
Discutí estúpidamente con ellos para evitar ver lo que, en el fondo de mí, sentía que era así.
Y así fue
Uno de mis compañeros los vio entrar a los camerinos tomados de la mano, corrió a mí para decírmelo nuevamente. Que si no quería creerle, que fuera a ese lugar y lo comprobara por sí mismo. (Fueron interrumpidos por el camarero con sus pedidos, y luego continuó)
Al llegar ahí, estaba realmente nervioso de entrar. No quería hacerlo. Estaba muy asustado de que resultara ser cierto. Pero fue entonces que escuché su risa.
No sé cómo pude tener el valor de hacerlo y entré.
Sentí dar vueltas todo mi mundo en ese momento, al verla con su falta en su cintura y las piernas abiertas completamente entregada a ese chico.
Trató de decirme algo al irse detrás de mí, pero no se lo permití.
No la insulté siquiera, solo la miré con tristeza, le dije se acabó y me marché.
Me costó superar lo ocurrido, pero lo logré. Me siento bien ahora y más seguro.
Freen: Lo siento, amigo.
De verdad no creí que hayas pasado por una traición así.
Admiro que tuvieras la fuerza para superarlo. No todas las personas lo logran. (Cabizbaja, suspiró ante lo dicho al final)
Heng: ¿Y tú, pequeña?
Para Freen, el escuchar pequeña, le regresó a su mente a aquella persona que la dañó tan cruelmente.
Freen: Son muchas cosas, Heng.
Ya tendremos tiempo para platicarlo.
Quizás cuando sienta que pueda hacerlo, o cuando busque ayuda para eso.
Su amigo, no pudo evitar preocuparse al escuchar las palabras de ella, pero prefirió guardar silencio al respecto.
Al finalizar du plática con su amigo, le pidió llevarla a un técnico para arreglar su teléfono y así sucedió.
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Freen no sentía fuerzas para ir a la universidad.
Todas sus noches se han basado en insomnio, llantos, mareos y mucha ansiedad.
-Siento que me volveré loca con todo esto. (Se decía así misma)
Pero, aun así, debía ir.
Comenzarían sus primeros proyectos y no podía permitirse bajar sus calificaciones.
Se duchó, vistió, tomó sus pertenencias, dirigiéndose a al comedor para desayunar.
Su tranquilidad se vio afectada al ver a sus padres en la mesa. Sabía que podían arruinar su día. Por lo tanto, prefirió comer en la cocina con su nana.
Este hecho, no le agradó a su padre que fue hasta ellas
Sr. Sarocha: ¿Qué haces desayunando aquí, Freen?
Debes comer en la mesa con tus padres. No con la sirvienta.
Nana: Disculpe señor.
Lo mismo le dije. Ella ya iba al comedor con ustedes.
¿Verdad, señorita Freen? (Dándole un suave golpe con su codo)
Freen: No te disculpes Christine. (Regresa su mirada a su padre)
No quiero discutir otra vez. Yo comeré con ella aquí.
Así que puede continuar tu desayuno con mamá en la mesa, e irse a sus trabajos como siempre.
Sr. Sarocha: No volveré a repetirlo, Freen.
Vas a comer con nosotros a la mesa.
Freen: ¿Si no, qué?
No lo voy a hacer. Y tú, no me vas a obligar, papá.

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GOTTA BE YOU
RomanceFreen, una chica amorosa que solo quería y necesitaba a sus padres. Comenzó a tomar actos rebeldes para obtener un poco de la atención de estos. Actos, que trajo consigo el atravesar por un suceso que terminó de frustrar y marcar su vida por un larg...