𝗰𝗵𝗶𝗲𝗳

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Volver a tener un trabajo significaba una rutina, y las rutinas calmaban los nervios de Lute

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Volver a tener un trabajo significaba una rutina, y las rutinas calmaban los nervios de Lute.

Comenzaba cada día con un breve ejercicio en su habitación, lo suficiente para que la sangre fluyera, y luego se duchaba, se ponía el uniforme y comenzaba sus patrullas.

El hotel en sí tenía un horario más flexible, por lo que comenzó en el vestíbulo, asegurándose de que no hubiera ocurrido nada durante la noche que demandara su atención, y luego salió en espiral. Le mantenía fuera de la vista de los huéspedes y del personal mientras realizaban cualquier actividad que Charlie había programado para el día y que funcionaba para Lute.

También significaba que era más probable que encontrara a uno de los Egg Boiz corriendo por ahí haciendo algo sin supervisión, y había aprendido que “sin supervisión” era absolutamente lo último que necesitaban estos idiotas. Cherri mantuvo a la mayoría de ellos a raya, pero Lute juró que de alguna manera se estaban multiplicando porque todavía tenía que contar bien a los pequeños bastardos.

Para el mediodía, había completado su barrido inicial del edificio y se dirigiría a uno de los balcones que daban al frente del hotel, para estar más atenta a cualquier amenaza entrante mientras, lentamente, se ocupaba en arreglar sus alas.

La cita para colocarle el brazo estaba programada para dentro de un mes; Charlie le había explicado que, comprensiblemente, todo en el círculo de la Pereza se movía lentamente, pero que Belphegor había priorizado la operación como una cortesía.

No le molestaba demasiado, ya que podía realizar la mayoría de las tareas con su brazo dominante. Además, los pocos casos en los que tuvo que hacer su trabajo no habían sido tan agotadores como para hacerle desear que el procedimiento ya hubiera pasado. Si bien Charlie había sido sincera acerca de provocar a los Vees, no había mencionado que sus intentos de represalias serían tan... patéticos.

Sin embargo, también existía la tradición de que quienquiera que enviaran los Vees se convirtiera en el huésped más nuevo del hotel, por lo que no los mató por respeto a las reglas establecidas por Charlie. Pero sí se encontró observándolos porque no confiaba en ellos. La única otra persona que compartía su desconfianza tácita parecía ser Vaggie y se sentía... bien que estuvieran de acuerdo en algo.

Por supuesto, todavía no había hablado directamente con Vaggie, pero había, como los describió Angel, vibraciones de que estaban en la misma página.

Eso era suficiente por ahora.

⁠ー¿Teniente?

La voz, así como el uso de su título formal, la sacaron de su vano acicalamiento y miró para ver a una de las caídas flotando a unos metros de distancia. Al igual que las demás, había cambiado su uniforme de exorcista por algo más propio de una empleada de hotel... en los colores adecuados, por supuesto. Pantalones rojos como los de Charlie combinados con una camisa formal roja como la de Vaggie, halo cambiado por un sombrerito tonto como el de Husk sujeto con alfileres en su cabello (criticaría la elección de moda si de alguna manera no se viera bien) y detalles en blanco para completar el conjunto.

❛ 𝗯𝗿𝗮𝘁𝘁𝘆 bottom ❜  𝓒𝓱𝓪𝓰𝓰𝓲𝓮𝓵𝓾𝓽𝓮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora