quizás esta sería la mejor
venganza de todas...
al menos, probablemente
podría convencerse de ello
si se esforzaba lo suficiente.
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❝ Lute es la bottom má...
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Afortunadamente, el ruido sordo del ascensor, seguido por el pesado paso de dos pasos diferentes, la salvó de hervir en su frustración, pero... algo andaba mal.
Siempre era fácil saber quién venía por el pasillo: los pisotones apagados eran el gato alado, el golpeteo corriendo era la criada, las largas zancadas con tacones altos eran el demonio araña, con tacones pero más cortos era la perra explosiva, y los gentiles y mesurados eran del imbécil de la radio. Los cascos de Charlie hacían un sonido diferente incluso cuando estaba en sus zapatos, mientras que Vaggie era casi imperceptible en comparación. En ese momento, podía escuchar los pasos de Charlie, pesados y desiguales... pero también podía escuchar los de Vaggie, como si el ángel caído estuviera soportando más peso de lo habitual.
Después de demasiado tiempo, la puerta del ático se abrió y el dúo entró arrastrando los pies, aunque les tomaría un poco más de tiempo llegar al dormitorio. Por lo general, venían a ver cómo estaba y luego se retiraban a la habitación principal de la suite para hacer... lo que fuera que hicieran. A veces, Charlie venía e intentaba jugar con Lute, y eso significaba que Vaggie también estaba cerca, siempre cuidando de su perra demoníaca.
No esta noche.
Esta noche, entraron arrastrando los pies, cubiertas de tierra, mugre y sangre roja, sangre de demonio, aunque había vetas doradas en las mejillas de Vaggie.
ーParece que ustedes dos tuvieron un día difícilー, dijo Lute, cruzando una pierna sobre la otra y apoyando su codo en su rodilla, ahuecando su barbilla en su mano. Interrumpirlas seguía siendo lo único que podía hacer y que le daba cierta apariencia de control. ー¿Reunión del club de fans?
ーCállate, Luteー, espetó Vaggie sin siquiera mirarla, con el ojo fijo en el demonio rubio mientras siseaba. El ángel caído claramente estaba soportando una cantidad considerable del peso de la más alta que cojeaba, la chaqueta roja de su esmoquin había sido movida hacia atrás para poder presionar su mano contra su costado.
El otro brazo estaba sobre los hombros de Vaggie y unos ojos rojos desenfocados miraban en dirección a su novia. ーVaggie, sé amableー. Lute sintió que sus labios se torcían y fruncía el ceño. Charlie sonaba… suave. ¿Con falta de aliento? Casi herida. ー¿Disfrutaste… la cena, Lute?
Educada. Conversacional. Amigable.
ーLa comíー, respondió ella, como siempre hacía. Negarle al demonio una respuesta satisfactoria también le divertía.
ーEso es bueno de escuchar…
ーCharlie, necesitas ahorrar energíaー, dijo Vaggie, ayudando al demonio a llegar a la cama y luego acostándola. ーNecesitas descansar.
