A Un Paso De La Luna - Juan Pablo Villamil {morat} (Sin Editar)

Capitulo 42

Justo en ese momento, cuando Abril estaba a punto de concluir la canción, sus palabras se detuvieron, y pude ver en su rostro una expresión de angustia y dolor. Sus ojos se encontraron con los de Gabriela, y en ese momento, su voz se quebró.

— Lo siento, no puedo... —murmuró Abril, antes de salir rápidamente hacia el camerino.

Me quedé paralizado por un momento, sin saber si seguirla o enfrentar la presencia incómoda de Gabriela y preguntarle que hacia aqui. Sin embargo, Martin rompió la tensión al pedirnos que lo acompañáramos.

— Chicos, acompañenme por favor —dijo Martin, y su mirada me instó a seguirlo.

Al llegar al camerino, encontramos a Abril sentada en un rincón, con la mirada perdida y una expresión de angustia en su rostro. Martin se acercó rápidamente a ella y le preguntó con tono comprensivo qué había pasado mientras todos observabamos. Sin embargo, Abril solo negaba con su mirada y extrañamente me miraba solo a mi.

Después de la intensa escena en el camerino, cuando creí que no podía hacer mucho más en ese momento, decidí que lo mejor era hablar con Gabriela para entender qué estaba haciendo aquí si se supone que ya me iba a dejar de fastidiar. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de salir, escuché la voz de Abril detrás de mí, diciendo con desesperación:

— Por favor, no lo hagas, no vayas.

Me detuve en seco y me giré para mirar a Abril, confundido al igual que los demás. Su rostro reflejaba miedo y angustia. Me pidió con urgencia que me quedara allí.

— Abril, ¿qué estás diciendo? —pregunté, tratando de comprender la situación. 

Ella inhaló profundamente, tratando de controlar sus emociones antes de hablar de nuevo.

— No vayas a ver a Gabriela, sin antes escuchar lo que tengo para decirte —dijo Abril, con la voz entrecortada por la emoción.

— Nosotros creemos que mejor los dejamos solos — Isaza interrumpe y a la vez tomando del brazo de simón y a Martin una seña para retirarse. Parecía que todos estaban dispuestos a salir del camerino para darnos privacidad, pero Abril los detuvo en seco.

— No, por favor, quédense. Ya no quiero que esto sea como la primera vez que ocultamos algo tan importante a todos ustedes —dijo con determinación, haciendo referencia a nuestra relación pasada.

Ante su firmeza, Simon, Martin e Isaza se quedaron, aunque no sin cierta emoción y curiosidad por lo que estaba por suceder. Entonces Abril, comenzó a decirme cosas que me tomaron por sorpresa.

— Jamás creí que alguien podía llegar a sentirse tan miserable cuando no se esta con la persona que amas 

¿Me está diciendo miserable? 

— Durante todo este tiempo, he intentado convencerme de que lo que pasó entre nosotros fue algo pasajero, que debíamos seguir adelante y olvidarnos. Pero cada día que pasaba, me daba cuenta de que era imposible. Te juro que ignorar lo que siento por ti se ha vuelto imposible, No puedo dejar de lado los sentimientos que tengo por ti, los mismos que se supone creí haber superado, pero hoy más que nunca han vuelto con más fuerza. —sus ojos brillaban con lágrimas contenidas, reflejando el peso de sus palabras. 

Se detuvo por un momento, como si estuviera recopilando fuerzas para seguir.

— He intentado negarlo, distraerme, incluso alejarme de ti, pero todo es en vano. Me he dado cuenta de que lo que siento por ti no desaparecerá fácilmente. Ni el viaje que planeaba hacer me iba ayudar a olvidarte. Todo esto solo me ha hecho sentirme más infeliz, más vacía.