Sabe muchas cosas

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*llamada entrante "Vivi 💊"*

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*llamada perdida "Vivi 💊" (4)*

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[Vivi 💊]

kiki por favor contéstame

denna ha hablado con bea

ya sé que quiere natalia de ti...

kiki?

kiki por favor dime dónde estás

mándame ubicación

kiki por dios me estoy preocupando

Hola, 'Vivi'


joder kiki menos mal...

tu kiki no puede hablar en este momento :)


NATALIA DÉJALA EN PAZ


*minutos antes*

Chiara comenzó a caminar en dirección a su apartamento con un ritmo alegre pero tranquilo. La incertidumbre de cuál sería la sorpresa de Violeta hacía que sintiera cierto hormigueo en su estómago, aunque después de todo lo que habían hablado no tenía que ser excesivamente creativa para imaginarlo. En su interior solo cabía la paz y el amor al darse cuenta de que por fin estaban haciendo las cosas bien. Ya no había una línea difusa entre lo que eran y lo que no, entre lo que estaba bien que hicieran y lo que todavía no podían hacer. Ahora eran novias, una pareja. Y eso dejaba pocas dudas con respecto a cómo comportarse con la otra. Cualquier ápice de miedo quedó completamente borrado aquella noche frente a ese atardecer, al menos hasta que giró en la esquina de su calle.

- Bonita moto, Kiki.

La pelinegra se topó de frente con una alta y esbelta figura que la empujó contra uno de los callejones. En un primer momento no fue capaz de reconocerla puesto que llevaba una gorra negra y gafas de sol, pero la arrogancia en su voz la delató. Era Natalia.

- ¿¡Qué coño haces aquí!?- le increpó la de Menorca empujándola de vuelta.

- Creo que lo sabes perfectamente.

La pamplonesa avanzó con un paso intimidante hasta que acorraló a la inglesa entre las paredes del callejón. Apoyó con fuerza su puño en el muro y bajó su cabeza lo justo para quedar a escasos centímetros de la de Chiara. Su sonrisa cargada de maldad provocó que el corazón de la chica se acelerara.

- Solo he venido a que me devuelvas lo que es mío... no es tan difícil de entender.

- ¿Cómo que tuyo?- la encaró tratando de sacar algo de valor, pero no sabía si le tembabla más la voz o las piernas. Natalia simplemente se rió y se separó un poco haciendo que la morena pudiera respirar.

- Eres muy mona, Kiki.

- Deja de llamarme así.

- ¿Prefieres que te llame "Chichi"?

Los ojos de la británica se abrieron de golpe al escuchar aquel apodo, nadie la llamaba así excepto... su padre. Como por acto reflejo su corazón comenzó a palpitar con más fuerza aún, por momentos parecía que se fuera a salir de su pecho. La respiración se volvió mucho más superficial y en pocos segundos, Chiara notó cómo el exceso de aire empezaba a marearla.

- ¿Có-Cómo sabes...? Es imposible...

- Yo sé muchas cosas...- vaciló.- y solo te pido una. Deja a Violeta.

Valium | KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora