𝑺𝒘𝒆𝒆𝒕 𝑳𝒊𝒆 || ʀᴀᴅɪᴏᴀᴘᴘʟᴇ ||

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 15

Alastor comenzó tocando el piano comenzando a resonar con acordes suaves, como el susurro de un río en calma. Las notas ascendían y descendían, creando una atmósfera de ensueño.

Segundos después, Lucifer se unió con las notas del violín, su sonido cálido y vibrante entrelazándose con el piano. Juntos, crearon una sinfonía perfecta.

Lucifer sentía que sus almas se entrelazaban en la melodía.

Alastor tocaba el piano de manera de que las notas sonarán de una manera profunda y resonante, mientras que Lucifer hacia que la música del violín se escuchará con aquella dulzura y pasión.

Y el bosque vibraba  con la hermosa melodía que ambos emitían.

Lucifer cerro sus ojos, dejándose llevar por aquella corriente musical. Sus movimientos son gráciles y precisos, como si estuviera acariciando el alma misma del violín.

Oh realmente lo hacía.

Cada nota que extrae del instrumento es una expresión de amor y anhelo.

Lo que él sentía.

El sonido se eleva y cae, era como las olas de un mar tranquilo en una noche estrellada.

Alastor por su parte, miraba a Lucifer con amor. Sus dedos parecían danzar sobre las teclas, creando arpegios y acordes que complementan la melodía del violín.

Ambos sentían que el tiempo se detenia a su alrededor.

No hay nadie. Solo son los dos y la música que fluye entre ellos.

Se sentía tan mágico.

En un momento dado, los dos unen un último acordé, el sonido se desvanece lentamente, dando fin a tan hermosa melodía.

El lugar se quedó en silencio, el sonido del aire y la laguna siendo el único ruido que podía escucharse.

Alastor se levantó de su lugar acercandose a Lucifer, lo tomo de su cintura apegandolo a él.

Y oh Lucifer se sentía morir en esos momentos.

Ambos acercaron sus rostros, Alastor admirando la belleza del soberano.

Subió una de sus manos para poder acariciar su mejilla con dulzura.

Y aquella distancia se perdió en el momento que ambos unieron sus labios.

En el que Lucifer sentía que unían sus corazones.

Fue un beso lento que duro por un largo tiempo, tiempo el cual fue lo suficiente para que ambos disfrutarán de aquel tacto, de aquellas caricias.

Lucifer tenía un pequeño rubor en sus mejillas.

Se sentía nervioso, pero tan ilusionado.

-Siempre voy a amar ese sonrojó en usted, majestad.

Lucifer sonrió abrazándolo y así se quedaron ambos, disfrutando de aquella cercania, sintiendo el calor uno del otro.

Era un lastima que todo fuera planeado.

Oh Lucifer ¿Él es realmente el correcto?

Pero Alastor, tu falsedad es dolorosa.

•••

Al día siguiente durante la tarde.

-Vaggie estaba pensando.. en salir a otros lugares, llevar a los demas. -Dice Charlie mientras escribía en el pequeño escritorio de su oficina-