𝑺𝒘𝒆𝒆𝒕 𝑳𝒊𝒆 || ʀᴀᴅɪᴏᴀᴘᴘʟᴇ ||

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 20

El silencio se hizo presente unos segundos, que para ambos fueron eternos.

Lucifer era incapaz de hablar.

Tantas emociones en un solo momento lo dejaban sin palabras.

El silencio alertó a Alastor, quien estaba apunto de hablar nuevamente, sin embargo el soberano se acercó a él y lo abrazó con fuerza, a través de sus lágrimas, sus ojos brillaban con felicidad.

-Si Alastor, acepto a todo contigo..

Alastor tomo su mano con delicadeza, deslizando aquel anillo sobre su dedo.

Ambos unieron sus labios, cerrando sus ojos, dejándose llevar por el momento, siendo acompañados por el sonido del mar de fondo, la luna llena y la promesa de un futuro juntos.

La brisa del aire siendo el complemento del hermoso momento.

Lucifer había imaginado este momento una y otra vez desde que ambos habían empezado con su pequeña historia de amor.

Y ahora estaba aquí, con un anillo de promesa, besando a su ya oficialmente pareja.

Y claramente con la felicidad en su corazón.

Después de un momento ambos se separaron juntando sus frentes disfrutando de la cercanía de ambos.

-Te amo..

Lucifer sonrió al escuchar esa palabra.

Siempre espero volver a escuchar esa frase, cuánto espero para que él se lo dijera.

-Yo también te amo Alastor..

Ambos se miraron a los ojos dándose caricias, envolviéndose en los brazos uno del otro.

Y el resto de la noche fueron llenos de besos, palabras y abrazos.

Tal cual como una pareja.

Oficial.

•••

A la mañana siguiente, todos volvían nuevamente al hotel hazbin.

Todos se encontraban dormidos en los asientos del auto, pues aún era demasiado temprano.

Aproximadamente las cuatro de la mañana.

Todos menos Lucifer quien era abrazado por un adormilado Alastor.

Miraba la ventana pensando en lo que había sucedido la noche anterior.

Si, tenía una sonrisa pintada en su rostro.

Miro el anillo nuevo que ya hacia en su dedo anular de su mano derecha, no evito el sentirse emocionado, si no estaría en el auto, apostaría que estuviera dando vueltas por toda su cama.

Pero, no todo es felicidad.

Su anillo de compromiso era el problema.

Sabía que estaba mal el aún extrañar a Lilith, no quería utilizar a Alastor para poder olvidarla.

Si, lo amaba, pero muy en el fondo, todavía lo hacía con ella.

Suspiro tratando de ignorar tales pensamientos, lo estaba haciendo bien.

Estaba mejorando, estaba siendo feliz.