Una vez más, vuelve conmigo. - MARCULI

2 | 3 ; "Ya está, me olvidó"

• tres meses después. •
Pov's Julieta

Me levanté a las 10:00 am con el sonido de mi alarma. Hoy tenía otra sesión con mi neurólogo cognitivo el cual me ayudaba a ir recordando poco a poco de mi vida antes del accidente que me contaron que tuve.

Hace un mes y medio que me dieron el alta y por fin pude volver a Argentina, no sé muy bien qué hacía en Alemania, mis papás no me quisieron contar, pero el volver me relajó muchísimo internamente, lo necesitaba.

Sinceramente todavía no recuerdo nada concreto, son solo sensaciones a las que reacciona mi cuerpo cada vez me las nombran. Como por ejemplo, cuando me dicen "Gran hermano" se me pone la piel de gallina, y por lo poco que fui averiguando, es porque yo fui parte del programa y casi lo gano, me encantaría poder recordarlo. Mi familia me dice que no lo fuerce, que naturalmente voy a ir recapitulando todo y que confíe en el proceso cognitivo.

— A qué hora es tu turno, hija?.

— A las once, ma.— Le respondí mientras bajaba las escaleras.

— Bueno, entonces te llevo y paso por el súper a comprar unas cosas que me faltan.

— Ma, me podes acercar a mí también? Tengo que juntarme con Juani.— Dijo Lola.

— Quien es Juani?.— Le pregunté.

— Es mi novio, Ju.

Asentí con la cabeza un poco confundida y me senté a desayunar.

Prendí la televisión y en el noticiero estaban recordando una edición de Gran Hermano: "Hoy hace dos años, finalizaba la décima edición de gran hermano que tuvo como finalistas a Nacho, Marcos y Julieta ¡Que recuerdos!. Les dejamos una recopilación de los mejores momentos de esa edición tan memorable para todos los que somos parte de telefe".

Estaba paralizada mientras escuchaba a la periodista hablar de ese programa mientras de fondo estaba una foto mía, con mi novio y otro chico más que no recuerdo aunque siento haberlo visto en algún lado antes. Me acomodé en mi asiento para ver el video recopilatorio pero justo cuando iba a empezar, mi mamá apagó la televisión. Me gire a mirarla y fruncí en ceño.

— Perdóname hija, pero no estás preparada para ver esto.

Suspire un poco abrumada y deje mi desayuno a medias.

— Nunca me voy a acordar si no me dejan ver nada de lo que ya viví, me viven contando detalles mínimos y eso me hace peor.

— El médico nos indicó que respetemos el proceso, que sola te vas a ir acordando de todo, si te forzamos podemos generar hasta lagunas en tu cabeza que nunca más van a irse, te podemos hacer muy mal, perdónanos mi amor.

Me levanté de mi silla y agarré mi teléfono que por supuesto no tenía permiso ni para tener redes sociales, solo tenía contactos aleatorios a los que reconocía solo a dos o tres.

— ¿Qué haces Juli?.— Mi mamá noto que estaba en la parte de contactos y me frenó.

— Nose, llamar a alguien de todas estas personas que quizás en algún momento de mi vida fueron amigos, conocidos, y quizás ellos si me quieran ayudar a recuperar mi vida. — Corrí hasta mi cuarto y me encerré allí, ya no me importaba el turno en el neurólogo, solamente quería más datos de mi vida, no podían privarme de eso.

Busqué en la lista de contactos y el 80% eran nombres desconocidos para mí "Thiago", "Lu estilista", "Daniela", "July Marín", todos me parecían desconocidos pero a la vez en mi corazón percibía cierto conocimiento en cada uno de ellos. Seguí bajando hasta que encontré números sin agendar, y me decidí por llamar a uno de ellos. Cerré mis ojos y comencé a scrollear con mi dedo hasta elegir uno al azar, este tenía una característica distinta a los demás lo cual me pareció raro pero igualmente llamé, con toda la confianza del mundo.