Capítulo 35

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Solo llevaba un par de días con Kyle pero tampoco había visto muchos cambios por su parte.

Abigail me había mandado un montón de mensajes que no le respondí y tampoco vino a clase en estos días.

Está vez, decidí llamarla a la hora libre del almuerzo mientras almorzaba con unas chicas de clases.

-Anda, pero mira quién me llama.-dijo Abigail con ironía al recibir mi llamada y yo sonreí un poco al oír su voz, aunque estaba preocupada.-

-Abigail, ¿Que tal? Desde el sábado no te volví a ver y ya estamos a miércoles.-

-Estoy con fiebre pero estoy bien.-respondía con naturalidad y de repente carraspeó su garganta.- Más bien, yo quería preguntarte una cosa.-

-Dime.-

-¿En qué coño estabas pensando cuando te follaste a Kyle en mi puta cama, Dafne?-

Es por este motivo que no quería hablar con ella..

-Abigail, fue Kyle el que insistió.-

-¡Me da igual si él quería o no! ¡Me dejasteis la cama empapada!-

-Oye, Abigail.-

-¿Que coño te pasa, Dafne? ¿Como no has podido respetar mi casa?-

-Lo siento, Abigail, de verdad pero yo me negué en un principio, aunque luego ocurrió.-

-Eres gilipollas, Dafne.-

-Eh, tampoco te pases, ni me insultes.-

-¿Que no te insulte? Me voy a callar lo que opino sobre todo esto.-

-¿Que te vas a callar? No, mejor habla por esa lengua que tienes.-

-No, prefiero que tú te estampes contra la pared cuando te venga lo peor, y la verdad es que me da igual si has vuelto con Kyle pero te advierto de una cosa, no te pienso escuchar si él te vuelve a dañar, por qué está vez será tu culpa.-

-Vete al infierno, Abigail.-

Le colgaba la llamada completamente enfurecida por lo que me dijo y de forma brusca colocaba el móvil sobre la mesa, sin ganas de comer.

Odio a Abigail cuando se pone de manera despiadada.

Nadie le ha pedido su opinión.

Entiendo que esté enfadada por lo de las sábanas pero se ha pasado muchísimo conmigo.

Yo tampoco le dijo lo puto drogadicto que es Joan, me calló y respeto su decisión.

En fin, paso de ella.

<< ... >>

Al salir de clase, miraba mi móvil por curiosidad y Kyle me dijo que fuera a su casa cuando terminara las clases.

Sinceramente, ahora no me apetecía mucho.

Pero.. iré para ver lo que quiere.

Llegaba a su casa al rato largo por el bus.

Kyle me dio un beso en mis labios sonriente y yo se lo devolvía de poco gana.

-La comida está casi lista.-dijo señalando la cocina con emoción y me dejaba en la puerta.-

Cerré la puerta de su casa, frunciendo el ceño y a cada paso que daba, olía a comida recién preparada.

Me quedé en la puerta de cocina, observando cómo estaba cocinando y me cruzaba de brazos.

Kyle desvío su mirada a mí, como si estuviera emocionado.

-Había pensando en recogerte a la universidad pero quería hacer el almuerzo y como es la primera vez que lo hago.. no sé si iba a tardar mucho.-

Fatídico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora