ESTOCOLMO. [Itachi x Ino]

XXXVII

Estocolmo.

Capítulo 37

|De vuelta|

"Mi anterior vida parecía extraña, me hacías falta para cualquier azaña."

- Pero que misión tan larga, estoy hecho polvo -. Una voz masculina en medio de la noche helada de konoha se alzaba a eso de la madrugada estando a punto de amanecer, de hecho pequeños rayos estaban recién saliendo, eso hizo que quien habla suelte un bostezo de cansancio -, cuando llegue a casa dormiré como un oso ¿A qué sí, Akamaru?

El ladrido al terminar su voz fue la respuesta de su compañero mientras se escuchaba una pequeña risita, Kurenai se divertía con el entusiasmo de su alumno Kiba mientras el camino de vuelta a casa era cada vez más corto, pasaron la entrada de la aldea con total calma cuando amanecía por fin siendo claro el camino del sol.

El viento dio un soplo helado, está estación era un problema a veces, incluso el viento hizo temblar a Hinata quien soltó un pequeño temblor abrazándose así misma a pesar de tener un abrigo bastante útil en momentos de invierno.

- ¡Que frío! -. Susurró Hinata con su dulce voz, seguidamente soltó un estornudo.

Shino caminaba al frente probablemente para llegar lo más pronto a casa o para evitar las tonterías de sus quejumbrosos compañeros, solo sabía que avanzaba con las manos en los bolsillos completamente escéptico del ambiente que lo rodea.

De pronto el Aburame se detuvo de golpe causando la atención de sus compañeros, Akamaru soltó un ladrido al verlo plasmado mirando fijamente una zona en específico con la boca bien abierta.

- ¿Qué te suceden, Shino? -. Preguntó Kiba con sus semejantes ojeras mirando a su compañero quien apenas despegó los labios para hablar mientras el castaño se acercaba.

- Ino -. Fue lo que soltó cautivando la atención del Inuzuka quien alzó una ceja mientras las dos mujeres quienes estaban más atrás se acercaban curiosas al sitio.

- ¿Ino? -, dijo extrañado pues todos sabían que ella estaba desaparecida y al recordarlo abrió los ojos como platos y finalmente soltó la mirada de Shino volteando hacia donde él veía...

Allí estaba, sus ojos cerrados pero de lejos se veía que respiraba, tenía una chaqueta gruesa que cubría a la chica y su cabello largo y rubio suelto por todas partes de la banca donde estaba inconsciente.

- ¡Ino! -. Gritó Kiba acercándose a ella, ese grito despertó la atención de las dos mujeres quienes salieron corriendo a esa dirección, Shino se quedó ahí donde mismo se había quedado de pie, analizando ¿Cómo era que había llegado ahí? No había explicación lógica porque no conocían donde estaba, pero aparece así, era muy extraño - ¡Diablos! ¿Cómo llegó aquí?

Kurenai había llegado donde la chica, ella delicadamente inspeccionó su estado de una manera rápida deduciendo que no tenía heridas físicas pero si estaba en un genjutsu de tan alto nivel que no podía liberar.

- ¡Esta en un genjutsu! ¡Tenemos que llevarla al hospital, rápido! -. Con Severidad Kurenai miró a sus alumnos quienes asintieron pero Kiba soltó un bufido, él solo quería descansar más sabiendo las circunstancias tenía claro que era una completa emergencia así que no se quejó -, este genjutsu es igual al de... pero no es posible, si es un genjutsu de el... ¿Cómo está viva está niña? Esto es muy raro.

- Es preferible mientras la llevamos al hospital, informar a la Hokage - Shino habló con paciencia desde su lugar -, si es un genjutsu de alto calibre solo ella podría curarlo, además es su discipula quien está desparecida de hace meses, debe reportarse de inmediato después de la gran cantidad de misiones de rescate que se han implementado para buscarla.