En cuanto Deva llegó al hotel, corrió a su habitación ya que se le había hecho algo tarde y no quería hacer esperar a sus invitados de aquella noche.
-Estaba por llamarte, creí que llegarías hace media hora –Dijo Joe en cuanto la vio.
-Sí, lo siento –Respondió ella y comenzó a desvestirse –La falla de Charles requirió más atención de la que creímos, pero al menos logramos detectar todo a tiempo.
-Ya veo, por cierto, llevé de compras a mis padres.
-¿Por qué? –Tomó el vestido que había planeado y siguió arreglándose.
-Creímos que les vendría bien un guardarropa nuevo.
-Juro que a pesar de que hoy es una noche importante, mi orgullo italiano se antepondrá ante todo, no puedo creer lo que hicieron mis abuelos –Terminó de vestirse y se sentó en el tocador para empezar a maquillarse.
-Amor, no puedes enfadarte con tus abuelos, son tu familia.
-Claro que puedo, tus padres pronto también serán mi familia, no les voy a dar la espalda.
Joe se acercó y la abrazó por detrás.
-En serio amo que te preocupes por ellos, pero mis padres también tienen que entender que tienes una cultura y estilo de vida diferente, nuestro compromiso y próximo matrimonio va a unir lo mejor de ambas familias, nadie debe cambiar, solo progresar.
Ella suspiró y dejó las cosas a un lado.
-Estoy nerviosa.
-Yo también estoy nervioso, pero te prometo que todo saldrá bien.
-De acuerdo.
El castaño dejó un beso en su mejilla y luego se alejó, tomó los zapatos que ella usaría y le ayudó a ponérselos.
Tomaron sus abrigos, la bolsa de ella y salieron.
-Ya vamos diez minutos tarde –Comentó Deva preocupaba y Joe apretó su mano buscando darle consuelo.
Se adentraron en la camioneta y quince minutos más tarde, bajaron en el restaurante en dónde ya se encontraban sus familias.
-Lamentamos la demora –Se disculpó Joe en cuanto llegaron a su mesa y le abrió el asiento a su novia.
-Corinne –La reprendió Eloise.
-Lo siento –Respondió ella un tanto apenada.
Los meseros llevaron los platillos que la pareja había reservado y la plática comenzó a fluir en la mesa, iniciando con Chris y la buena temporada que llevaba con el City, siguiendo con Dan quién emocionado explicó que tenía muy buenas esperanzas para el equipo que estaba entrando y poco a poco todos tuvieron su momento para hablar sobre lo que estaban haciendo o sobre sus proyectos.
-Tío Joe, ¿Por qué los abuelos de Deva si pueden viajar mucho y los tuyos no? –Preguntó uno de sus sobrinos.
-Bueno, sus abuelos son un poco más jóvenes, además de que cuidan mucho su salud y por eso aún tienen la energía para viajar.
-Cuando yo sea grande, quiero ser igual que ellos.
-Haz ejercicio y come bien, solo así podrás lograrlo –Le dijo Richard y el niño sonrió.
-Bueno, creo que es hora del postre ¿Qué opinan? –Preguntó Deva y todos asintieron, ella hizo una seña y gracias a los meseros, una caja fue colocada en frente de cada uno –Antes de que la abran, hay algo que queremos decirles –Dijo y se levantó junto a Joe.
El castaño se aclaró la garganta y suspiró.
-Esperamos que disfruten de este momento dulce, tanto como nosotros lo hicimos, por favor, ábranlas.
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Old Money
Hayran KurguDeva Bradbury, una heredera europea atraviesa su primera decepción amorosa, sin embargo, luego de conocer al quarterback estrella de los Bengals, Joe Burrow, su vida comienza a cambiar.