25.

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Una tormenta había comenzado poco después de que subieran a Vermax y eso les complicaba un poco, pero aun así el dragón iba rápido lo más rápido que podía. Sentía la preocupación y el miedo de su jinete, mientras Benjicot en su cabeza le rezaba a los dioses pidiendo que todo saliera bien.

- ¡Déjenme sola!.

Lyra se negaba a recibir la ayuda de las parteras, llevaba más de 5 horas sufriendo dolor y sangrando cada que se movía. Aún así caminaba por la habitación, llorando y transpiración frío soltando jadeos ahogados.

- Umng... - Soltó un jadeo mientras ponía una de sus manos en su cintura y la otra en al costado de su cadera.

- Princesa por favor... - Suplico una de las parteras intentando acercarse.

- ¡N-no te acerques!.

Ordeno la castaña poniéndose de rodillas en el suelo, las lágrimas caían de su rostro y tocaban el suelo. Los dos dragones nuevos que Lyra había reclamado estaban inquietos, Stwind soltaba gritos y golpeaba las cadenas que lo mantenían atado queriendo romper estas.

Rhaenyra estaba amamantando a Visenya, Daemon entró mirando a su esposa y a su hija, cerró sus ojos al escuchar los gritos de Lyra y se escuchaba como lanzaba los platos a las parteras.

- Debes ir...

- Daemon... yo pase por eso, si no quiere a nadie cerca deben dejarla sola.

- ¡Nuestra hija se está muriendo!. - Grito enojado mirándola. - ¡Su camisón blanco está empapado en sangre y está palida, no se como sigue gritando!.

La platinada puso a Visenya en los brazos de Daemon, apresurada al escuchar el estado en el que se encontraba Lyra llegó a la recamara y abrió con violencia la puerta. Viendo a Lyra en el suelo de rodillas y como metía sus manos en su zona baja.

- ¡Lyra!.

Se acercó rápido agachandose y mirando a su pequeña quien la miró asustada, Lyra soltó un fuerte grito apretando el camisón.

- Amor debes dejarlo...

- ¡N-no!. - Grito llorando mientras se escuchaba los gritos de Stwind. - S-stwind...

- Cariño mírame. - Pidió sujetando sus mejillas obligando que la mirara. - Ya se fue...

- Mamá tiene razón. - Hablo Luke abriendo la puerta y teniendo lágrimas en sus ojos. - Galletita se fue.

Lyra negó con su cabeza varias veces levantándose y alejándose de su madre, mientras Vermax llegaba al castillo, apenas tocó el suelo Ben apresurado bajo del dragón.

- ¡¿Donde esta?!. - Le grito a Jerad quien señaló hacia la recamara de la princesa y los gritos de Lyra lo alertaron.

Corrió apresurado abriendo la puerta de la recamara viendo una escena que nunca borraría de su memoria, Lyra insultando a su madre y a las parteras mientras Lucerys la ayudaba a mantenerse de pie.

- ¡Lyra!. - La llamo acercándose a ella y acariciando su rostro mientras su corazón se rompía al verla en ese estado.

- Ben... - Murmuró Lyra mirándolo asustada mientras se ponía de rodillas en el suelo y el la imitaba.

- Estoy aquí, estoy aquí te tengo.

Lucerys se apartó mientras los miraba y no podía evitar llorar, entonces Lyra sintió como Ben se ponía detrás de ella y le hablaba diciéndole que todo estaba bien, cuando en realidad nada estaba bien.

- Todo esta bien no es tu culpa. - Hablo alto mientras Lyra gritaba empezando a pujar teniendo sus manos en su parte baja.

- E-es mi culpa...

Danza De Lazos. | Benjicot Blackwood.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora