34.

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Las olas azotaron el cuerpo del menor cuando este cayo en seco en ella, la joven tuvo el mismo destino segundos después y fueron arrastrados por la violencia del agua hacia abajo. Lyra logró salir a flote tosiendo y escupiendo agua mientras observaba a su alrededor desesperada buscando a su hermano.

- ¡Luke!. - Grito agitada girando su cabeza buscandolo. - ¡Luke!.

La desesperación y miedo se apoderó de ella cuando observo como la dragona Vhagar, metía su única pata al agua agarrando el cadáver del Stwind para lanzarlo al castillo de Slashdot y este se rompía creando una cortina de polvo.

- Stwind...

No tuvo ni para llorar una ola golpeo su espalda, haciéndola rodar hacia abajo y provocando que se asustara. Salió a la superficie donde llegó a la orilla, desde ahí empezó a buscar a Lucerys con la esperanza de verlo en la orilla.

Escucho la voz de Hayley no tan lejos, se giro su mirada quedó en Lucerys arrodillado en la arena mientras la menor levantaba una espada y el polvo del castillo aún seguía, creando una nube de humo que dejaba ver apenas.

- ¡NO! ¡NO ESPERA NO!. - Suplico desesperada levantándose de la arena y corriendo en su dirección. - ¡LUCERYS!.

El niño al escuchar la voz de su hermana giro su cabeza, lo último que vieron los ojos del joven Velaryon fue a la mujer que el consideraba la perfección en persona, amorosa y alegre con un olor a margaritas si se lo preguntaban a el. Los ojos de Lyra vieron como Hayley levantaba la espada y sin asco cortaba la cabeza de Lucerys.

Luke no murió sintiendo miedo, murió con felicidad al ver a Lyra aunque también preocupado por que no sabía que iba a suceder con su hermana mayor. El amor de su vida, aunque no de manera romántica.

Lyra cayó en la arena sintiendo como esta se pegaba en su armadura y cara, soltó un jadeo entrecortado viendo la cabeza de su querido hermano a unos centimetros de ella. La joven Slashdot sonrió acercándose y pateando la cabeza de Lucerys hacia Lyra, quien la miró incrédula.

- Larga vida al rey Aegon.

Lyra apretando la arena en sus manos estaba por insultarla a ella y Cirio, el grito de Caníbal la alerto y giro su mirada viendo como era atravesado por cuatro flechas. Dirigió su vista a Cirio quien caía junto a su dragón al mar, ahí lo supo su mejor amigo no la había traicionado.

Si no la hermana menor del joven.

Aemond bajo al suelo luego de que Vhagar tocara la arena, camino hasta Lyra quedando a unos centimetros de su ex prometida y sobrina. Dirigió su mirada a la cabeza de Lucerys y sonrió ligeramente con orgullo, miro a la joven Slashdot y también a sus soldados.

Habían creado esta trampa y los tres idiotas habían mordido el anzuelo perfectamente, calleron como moscas a la miel y eso enfureció a la joven que se encontraba en la arena. Aemond se acercó mirándola, repentinamente Lyra se levantó con una daga desenfundada en su mano y no atacó a su tío.

El chorro de sangre golpeo su rostro, la rabia se podía ver en sus ojos y esta soltó un grito hacia Hayley, sacó la daga del cuello de esta y la vio caer al suelo. La castaña miró al platinado quien en un rápido movimiento la noqueo, este sonrió orgulloso.

Miro el cadáver de su sobrino, sonrió sacando una flecha y lanzandola al cielo una señal pata que Sir Criston se acercara, sacó su espada caminando hasta su sobrina y acarició con sus dedos su mejilla.

- Hubieras sido una maravillosa esposa...

Levantó su espada con firmeza y con una duda creciendo en su pecho pensó que debía hacer, tardo unos segundos antes de tomar esa decisión.

Danza De Lazos. | Benjicot Blackwood.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora