𝐁𝐞𝐧𝐣𝐢𝐜𝐨𝐭.
Benjicot detuvo su vista en tu pecho, desde que habías quedado embarazada estos se habían vuelto más grandes debido a la leche materna que estos almacenaban. Rápidamente volvió la vista a tus hermosos ojos azules, acariciando tu mejilla queriendo disfrutar este momento y el sentimiento fue mutuo.
Sin decir nada unió sus labios en un beso, dejaste que su lengua entrará en tu boca chocando con tu lengua ambas se encontraron en un danza y el beso se intensificó, el llevó una de sus manos a tu cintura desnuda clavando sus dedos en ella. Al separarse del beso dejaste salir un jadeo mirándolo con tus ojos azules llenos de deseo, el sabía lo que provocaba en tu cuerpo.
Sin previo aviso pone su otra mano en su cintura y te empuja a la cama sin usar mucha esfuerza, se sube encima de tu cuerpo comenzando a devorar tus labios en besos salvajes y se quita la capa dejándola en un lado. Rápidamente se descarta su ropa, quedando desnudo y empezó a dejar besos húmedos a lo largo de tu cuello bajando a tu escote.
- Usa tu palabra princesa.
Hablo con la voz algo ronca mientras metía sus dedos en su ropa interior, sintiendo lo mojada que estabas eso hizo que sonriera mientras besaba tus pechos y esperaba que dijeras esa palabra.
Mientras sentías que no podías pronunciar una palabra, habías olvidado lo que Benjicot le provoca a tu cuerpo y el ahora estaba haciéndote sentir y recordar lo que el enciende en tu. Entre un jadeo suplicaste.
- Por favor...
- Buena chica.
Sonrió sacandote la ropa interior y dejándola a un lado, también tu corpiño disfrutando de la vista deborante con la mirada. Deslizo su mano por sus músculos acariciando estos, bajo hasta su vagina en donde abrió sus labios mayores con sus dedos anular y corazón, los mojo con frotando estos.
Los metió sintiendo tus paredes internas apretarlo, ella gimió al sentirlo y sin perder el tiempo comenzó a mover sus dedos dentro tuyo, los metía y los sacaba. El mismo observaba como entraban y salían sus dedos de dentro tuyo.
- Lyra. - La llamo mientras la miraba notando que ella no lo miraba, y se encontraba observando el techo.
Sin detenerse sabiendo que su esposa estaba sintiendo un orgasmo, con su mano derecha la tomó de las mejillas y te obligó a bajar la mirada para que lo vieras.
- Mírame. No dejes de mirarme.
Ordeno aumentando la velocidad y metiendo un tercer dedo, causando que pusieras momentáneamente los ojos en blanco debido al orgasmo que estaban sintiendo, tus gemidos fueron música para sus oídos. Llevo su dedo pulgar hacia tu clitoris y con una sonrisa maliciosa empezó a rozarlo, sentiste un hormigueo creciendo ahí abajo y como un escalofrio subía por tu columna vertebral.
- ¿Así te gusta no?. - Pregunto sabiendo la obvia respuesta y empezó a masajear tu clitoris causandote más placer. - Eres una princesa sucia, ¿que pensaría tu padre?.
- Pre-prefiero no pensar en el ahora. - Tartamudeo Lyra mirándolo mientras intentaba controlar su orgasmo, sabia que estaba por llegar.
Benjicot sonrió ella se encontraba con las piernas abiertas, su frente cubierta de una ligera capa de sudor, su pecho subía y bajaba, todo solo para el. Estabas luchando para mantener a raya tu orgasmo y el lo sabía, dirigió su mirada abajo viendo como entraba y salía de ti con velocidad, mientras acariciaba en forma de circulos tu clitoris.
Sintió como sus paredes se apretaban a sus dedos vio que los músculos de muslos temblaban y respirabas agitada, tus gemidos se convirtieron en jadeos y palabras incoherentes, Benjicot se aseguró que en ningún momento dejaras de mirarlo.
Sacó sus dedos de tu interior y los chupo limpiando su mano, le encantaba la manera en la que sabias. Lyra no pudo evitar sonrojarse y lo tomó de las mejillas acercando sus rostros.
- Eres una princesita sucia... - Hablo este sobre sus labios y sonrió pasando su lengua por estos. - Me encantas. Vivo por ti y moriré por ti.
- Tu eres el culpable, cuando no te conocía ni si quiera pensaba en el sexo y no sentía estas cosas...
Benjicot se río mirando a su esposa, no dijo nada y beso sus labios varias veces. Se recostó a su lado y cerró sus ojos, los abrió al sentir un peso encima de él y observo que estabas encima de él.
- ¿Que haces?. - Pregunto confundido con una sonrisa en su rostro.
- Tu sabes muy bien lo que estoy haciendo...
Benjicot; ama cuando lo montas y eso lo sabes muy bien, al ya estar preparada no pierdes el tiempo y te alineaste a la cabeza de su pene, entró con facilidad gracias a los juegos previos. Las manos de Benji fueron directo a tus caderas apretando estas y dejando sus dedos marcados su vista estaba fija en ti siguiendo tus movimientos.
- Lyra, que linda eres...
Miraba a su esposa con deseo y admiración, recordando cuando ellos estuvieron en los jardines del castillo la suave luz del atardecer, rodeados por la fragancia de las flores y el susurro de las hojas en el viento. Benjicot observaba a Lyra con admiración, maravillado por su belleza y su gracia que parecían resplandecer bajo la luz dorada del sol poniente.
El recordar eso, hizo que la nostalgia golpeara su mente. Mientras tu movias tus caderas en forma de circulos y tus paredes internas apretaban su pene, gemias su nombre en voz baja y notaste como te estaba observando.
- Lyra, cada día que pasa te veo más hermosa. - Murmuró Benjicot con voz suave, sus ojos oscuros brillando con amor y admiración. - Tu elegancia y tu bondad iluminan mi vida de una manera que no puedo describir con palabras.
Lyra desvió la mirada por un instante, sintiendo un rubor cálido subir por sus mejillas al escuchar las palabras de su esposo. Sin poder contener una sonrisa boba, volvió a encontrarse con la mirada de Benjicot, cuyo gesto cariñoso la hizo sentirse querida y apreciada como nunca antes.
- Benjicot, tus palabras son como el más dulce de los elogios... - Respondió Lyra con gratitud, su voz llena de emoción. - Tu amor y tu ternura me hacen la mujer más afortunada de todos los reinos.
Te acercaste a sus labios devorando estos en un intenso beso, sus lenguas bailaban juntas y se separon respirando agitados entonces el dijo sin dejar de mirarte con sus ojos oscuros llenos de amor.
- Te amaré hasta morir.
VIVAAA EL AMORRRRR.
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Danza De Lazos. | Benjicot Blackwood.
Fanfiction"Se que eh tomado muchas malas decisiones, pero su majestad le soy leal en esta guerra." Donde la primer hija mujer de Rhaenyra es utilizada para empezar la guerra. Secretos guardados saldrán a la luz y viejas alianzas, trairan nuevos amores.