Danza De Lazos. | Benjicot Blackwood.

30.

La princesa ya se encontraba lejos de roca dragón y ni si quiera se había molestado en tomar las riendas, solamente miraba el mar que estaba debajo de ella intentando sacar ese pensamiento de su cabeza.

Ve a King's Landing y mata a uno de los hijos de Aegon.

Levantó la mirada viendo las nubes con tristeza, pronto la tristeza se volvió rabia y sin pensar bien lo que hacía tomó las riendas jalando para que Stwind diera la vuelta. Volaron alrededor de unas 10 horas, para cuando estaban a las afueras de King's Landing ya era de noche y Lyra observaba desde lejos.

Sintió el aliento de Stwind detrás de ella y se dio la vuelta estando cara a cara con su dragón, abrió sus brazos y este se acercó recibiendo un abrazo en su osico.

- Todo estará bien Stwind, pero debes quedarte aquí amigo. - Hablo acariciandolo para que estuviera tranquilo.

La castaña se puso su capucha separándose de su dragón, este la miró ir se y se acostó aplastando los árboles debajo suyo. La joven observaba a los aldeanos en la vida nocturna en King's Landing, caminaba con seriedad en su rostro y entonces volvió a ver al perro de antes.

Lo observo unos segundos, pero siguió caminando llegando en un sector donde nunca había guardias y entró tomando la antorcha que había ahí. Se sabía los pasadizos secretos gracias a Ser Harwin Strong, el se los había enseñado y solian jugar a las escondidas en ese lugar.

- 10 pasos rectos...

Murmuró caminando rápido, había dado cientos de giros y vueltas. Lanzó la antorcha a un charco de agua y se agacho sacando el pedazo de pared falsa, la puso a un lado se fijo que no hubiera nadie en el pasillo.

Al salir puso el pedazo de pared falsa en su lugar y subió las escaleras, observó la puerta de la recamara de los hijos de Aegon y la abrió viendo a los dos niños en sus camas.

- Lyra...

Levantó su mirada hacia Helaena quien se encontraba sentada bordando una manta, la joven se metió cerrando la puerta y sacando su espada apuntando a una de las mujeres más importantes de su vida.

- ¿Tu sabias?.

- ¡Guar-

Se acerco rápidamente cubriendo su boca con su mano, Lyra miro fijamente a Helaena a los ojos y cada una vio algo diferente en los de la otra.

- Solo dime que tu no fuiste parte de lo que hizo la perra de Alicent...

- No se de que me estas hablando, Lyra.... - Miro a su sobrina con preocupación. - ¿Que te hicieron? ¿qu-que hizo mi madre?.

Por alguna razón la castaña no terminaba de creerlo y se alejo de ella poniendo el filo de su espada en el pecho del pequeño Jaehaerys, presionando levemente.

- No me mientas.

- Te juro cariño que no se. - Hablo asustada apunto de llorar.

Lyra miro al pequeño viéndolo dormir, pensó que sería muy fácil matarlo con su espada atravesar su pecho y no sabría que había pasado. O cortarle la cabeza rápido, no sufriría.

Hazlo mátalo, mátalo como lo hicieron con tu hijo. Ese pensamiento golpeo su mente y levantó su espada.