Capítulo 33.

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La paciencia de Bang ___, no era grade, aunque tampoco para el coronel Min, la mayoría que permanecía dentro del palacio conocían el temperamento de esas dos personas. Aunque también mostraban un esfuerzo enfrente de la futura monarca, ante todas las ordenes apropósito de ambos, llego un punto en el que ___ tenia la decisión de mejor huir, siendo el momento en el que no sintió los ojos de la princesa Sohee encima suyos para salir corriendo hasta llegar a la cocina, buscando refugio a un lado de Seok Jin.

Estaba atenta a la puerta, aun cuando la princesa estaba segura de mencionar que nunca dispondría en entrar en un lugar tan sucio como la cocina. Jin miraba la menor asustada, justo como lo vio con el coronel quien habían gastado su paciencia.

−Eres una niña muy buena, ___ −Toma Jin una porción de caramelo para dárselo en la mano a ___ como recompensa−. Se que estás haciendo un gran esfuerzo con la princesa Sohee.

−No lo hago con mero gusto, sino por sobrevivencia. −Dice ella comiendo del caramelo− Si sigue así, no voy a aguantar. Jin. ¿Tengo que seguir en este castillo? ¿Por qué no salimos de viaje y volvemos cuando se vaya?

−En estás circunstancias en las que se encuentra un miembro de la familia real, no tenemos opción. Menos el día de hoy, el coronel ha ordenado dar una fiesta de bienvenida para la princesa.

− ¿Lo ordeno el coronel o la princesa? Aun tengo la esperanza que pierda la cabeza el coronel, antes que yo haga algo al respecto. −Con unos ojos suplicantes ve al joven que cocina− Jin, no me hagas ir a esa fiesta. No me obligues, por favor...

Jimin niega tal situación con una sonrisa, tomando asiento para ver las suplicas por lo que Jin piensa varias situaciones, por lo que se compadece de la menor acariciando sus mejillas.

−Te escusare, pero no salgas de tu alcoba. ¿Está bien?

− ¡Gracias! ¡Mi Jin el más piadoso! ¿Qué haría sin ti? −Celebra ella abrazando al de hombros anchos seguido a Jimin quien ríe− También Jimin. ¿Si me porto bien llevaras galletas y jugo?

−He preparado ya tu canasta, no tienes que insistirme.

−Jejeje, estoy muy feliz. ¡Ya me voy!

Solo tomando su canasto lleno de dulzura es ella quien decide subir a su alcoba, mientras tanto Yoongi iba al mismo lugar llevando con él el pequeño detalle que preparo su prometida y por lo que envió a uno de los vampiros por dicho encargo, un bonito anillo qué pensaría que luciría bien en el dedo anular de ___, pero eso decide guardar por el momento.

Llamando a la alcoba recibe una buena respuesta, con lo que esperaba Yoongi era a la humana alistada para bajar a la fiesta, pero la ve con la misma ropa poniéndose su sombrero y capa para salir, no sin antes alimentar su mandrágora.

− ¿No vas a bajar a la fiesta? ¿Dónde está el vestido que te di?

−Tranquilo el vestido esta guardado en el armario, y no, no voy a asistir a la fiesta. −Responde contenta, preparando por último un gran mantel dentro de su canasto− Y se que no necesito escusar a su alteza, cuando mi presencia para ella es de poca relevancia, así que no notara mi escapada.

− ¿Es por nuestra visita lo que te tiene así?

−Cual sea la razón, da igual. No quiero estar en esa fiesta, tengo pensando escapar.

− ¿Así? ¿Puedo preguntar a donde piensas ir?

−Donde sea, menos aquí. ¿Vienes o te quedas a sufrir?

− ¿Cómo?

Yoongi estaba sorprendido, no por la sinvergüenza proposición, sino que la mayor optara por invitarle pasar el rato. Estando ahora ___ alistada abriendo a la puerta, al no recibir una respuesta optimista de su parte, es quien se ofende.

Álamo [🌹] Yoongi y tú. ¡COMPLETO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora