Álamo [🌹] Yoongi y tú. ¡COMPLETO!

Capítulo 53.

La felicidad se sentía en el castillo Min, mientras algunos se alistaban para los preparativos, eran los más jóvenes de la casa quienes actuaban tan natural, sabiendo de la timidez de ambos eran quienes buscaban cualquier momento para demostrar el amor entre ambos, entre las pequeñas pausas que ameritaba ir al jardín, la oficina o la alcoba, se habían vuelto tan repetitivas que comenzaban a levantar sospechas.

En uno de sus lugares favoritos en el jardín donde tuvieron su primera cita cerca del risco, ambos estaban recostados en una sábana, dejando los pastelillos, las galletas y el juego a un lado, mientras disfrutaban la tarde.

− ¿Qué pasa? ¿Quieres mimos?

−No soy niño, princesa.

−Oh, bueno. ¿Entonces no quieres?

Ella estaba acariciando los cabellos oscuros. Yoongi, aunque se negara ahora estaba recostado a un lado de ella, hasta inclinar su cabeza cerca de su pecho, sintiendo las suaves caricias también los pequeños besos en la frente que le daba ___.

−Quien debería estar mimándote y colmándote con mi cariño, debería ser tu conde.

−Bueno, este día seré yo.

Siendo de nuevo la escusa de Yoongi de querer alimentado, antes de recibir la sangre ___ espera el beso en su brazo, para ser un beso en los labios de ella, Yoongi se comportaba como todo un extrovertido, siendo el primero en besarla, a pesar de la abstinencia desde la primera vez que vio a su lazo.

Ofreciendo después su mano para que lo muerde, es quien lo espera, acerca su otra mano para acariciar los cabellos oscuros, Yoongi deja de ver para dejar varios besitos en la diminuta herida, el pensamiento de ___ entre los libros ahora estaba en la inseguridad de su profesor de comercio.

− ¿Sabes? La ultima vez que hable con el conde Jackson, me dijo que si me comprometía tendría que tener otras responsabilidades, tendría que dejar mi tienda para actuar como una dama de sociedad.

− ¿Quién lo dice? ¿El conde Jackson?

−No solamente él, creo que las clases en las que asisto con Jin lo hacen, no por algo se llama la escuela de esposas. También los libros que leo lo hacen... Si me comprometo contigo.

−No, ___. Si aceptaras ser mi esposa, estoy bien tal cual como estamos ahora. Tienes tu trabajo y yo tengo el mío, si hay algo que cambie es solamente el título de prometidos, quizás de esposos.

−Pero estoy seguro que quieres una esposa...

−Es lo que más deseo, igual que tu felicidad. Nunca me negaría en tus metas. ¿Tu piensas que intervendría en algo así?

−No, perdóname por dudar.

−No deseo que vuelves a dudar que te apoyare en lo que este en mis manos, nunca evitare que hagas algo que tu le muestras mucho empeño y que amas. Si ese es tu sueño, lo aceptare, como el resto en convertirte en una dama de los negocios.

Las palabras de Yoongi la había hecho sonreír de nuevo, ___ toma el rostro pálido demostrando su alegría robándole un pequeño beso, Yoongi no podría estar más encantado.

Terminando la tarde ellos recogen cada una de las cosas de su picnic, siendo Yoongi quien cargue la canasta d picnic, mientras de la otra mano lleva a su princesa, ambos siguen camino de retorno al castillo, mientras ___ piensa en algo.

− ¿Qué somos? Ni si quiera te he pedido que si quieres ser mi novio.

−Creo que no necesitamos las palabras, las acciones parece que nos limitaron saber que ya somos amantes.

− ¿Amantes? Se escucha algo romántico, aun así, a pesar de las acciones. Min Yoongi. ¿Quisieras ser mi novio?

−Sí, señorita... Bang ___. ¿Quieres desde ahora ser mi amante? Aquella con la que colme mi felicidad y atribuya como mi único lazo y amor.