Álamo [🌹] Yoongi y tú. ¡COMPLETO!

Capítulo 25.

La comodidad que podía otorgarle el castillo Min, era exorbitante cuando uno de los miembros de dicha familia se encontraba con algún malestar, siendo una lastima de vampiros de clase media y baja quienes reciben la clara denegación de la prometida del vampiro menor, lo que propicio otra decisión y Yoongi no podía estar más de acuerdo, tratándose de su mayor tesoro.

Solo las personas más allegadas a dicha pareja eran quien le permitía a Yoongi dichos cuidados, contando las manos de Jin y Jimin, como la madre de su prometido. En su recuperación ___, disfruto de que los esposos menores cocinaran sus comidas favoritas y la extraña atención de la señora Min.

−Este ungüento no dejara marcas, también he comprado algunas cosas en su ausencia. −Pronuncia la pelinegra de larga cabelleras, mientras se encarga de las curaciones en los brazos− Cuando te recuperes mañana estarás como nueva, como si nada te hubiera pasado.

−Gracias, me siendo mas atendida de lo que estaría. −Responde ella, mientras la mujer comienza con los vendajes− También, me siento avergonzada de ocupar de su tiempo, a puesto que tendrá mejores cosas que hacer.

−Ninguna tan importante por ahora, el resto de esposas se encargan de atender a mi esposo. No tienes que sentirte nada avergonzada, soy tu suegra. ¿Por qué no te ayudaría?

La señora Min ahora que la conocía durante aquella semana, solo se había comportado como todo un amor con ella. Era quien se encargaba de sus vendajes cuando Yoongi tenia que atender algunas cosas de su trabajo, le llevaba algunos regalos y caramelos, y le hablaba de lo bonito del día, siempre tan atenta.

Llegando esta vez en una de las visitas era Hwasa, siendo también de compañía tomando asiento en la cama, recitando con timidez algunos poemas y algunos materiales como libros y para bordar para pasar el tiempo.

−Cuando escuche que Yeri y tú iban al reino de Olivo, me dio mucho miedo. −Comenta ella con cierta timidez− Escuche que hay criaturas que no les gustan los humanos.

−Deberías ir Hwasa, hay contradicciones en este reino que tiene algunos humanos temerosos en ese lugar. Y no hay nada que preocuparte siendo vampiro, querida. −Comenta la señora Min a Yeri y pasa ahora a ___−. Apuesto que tu viaje fue una gran experiencia. ¿No es así, ___?

−Lo fue, sin contar lo que me sucedió, me gusto.

−Que adorables, cuando escuche que insistente por acompañar a mi hijo me llevo de ilusión, lastima que no lo disfrutaran como deseaban...

Ilusionada la señora Min imaginando dulces escenarios de su hija con la mayor, ___ no comenta nada al caso, aunque no quería desilusionar a la mujer. Llamando la puerta es Yoongi quien entra, con un gran ramo de rosas que ha logrado rescatar del jardín, su mirada concluye con las tres señoritas en su alcoba aún.

−Señorita Hwasa, querida madre. Disculpen la intromisión.

−No hay ninguna intromisión, entra cariño.

−Este día no puede estar más bello que su presencia.

La forma que se refiere a su madre era tan genuina, que la vampira más mayor se pone de pie terminando con las curaciones. Es la señora Min quien se acerca a abrazar a su hijo con sumo cario que regresa Yoongi ofreciendo una parte del ramo de rosas, la cual la mayor inhala percibiendo el dulce aroma, Yoongi también se acerca a Hwasa, dibujando una sonrisa a la segunda mayor al tener también un pequeño ramo y por último ___, un ramo de rosas rojas.