Capítulo 36

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 Dos años atrás en san Calafia

– Adiós – sonrió Luna – gracias por el entrenamiento.

Una vez fuera de la casa, y fuera de la vista de Koba, tomó a Tony por el cuello de la camisa y lo sacudió violentamente.

– Escucha pedazo de pelirrojo será mejor que me digas cuál es tu maldito plan porque no estoy aprendiendo nada ¡Nada! Además, estoy harta de ese tipo, es un egocéntrico que cree saberlo todo.

Dejó que Tony se recuperara de la sacudida, mientras ella ponía sus manos en las caderas.

– Bien, está bien, admito que este plan se alargó más de la cuenta, pero te juro que ya casi viene el desenlace.

– ¿Y cuál es el desenlace si se puede saber?

– No, aun no puedes... – Se agachó porque Luna lo quería golpear – ¡lo siento! pero te juro que te beneficiara mucho.

– Más te vale, porque ya estoy empezando a cansarme del tal Koba.

Regresaron a la casa donde Kai, como era costumbre esos días, estaba fuera de la casa esperándolos.

– Hola – sonrió Luna algo cansada mentalmente – voy a ducharme, adiós Anthony.

Lekai frunció el ceño ante la escena, porque normalmente a Luna le gustaba quedarse a charlar un poco con Tony

– ¿Estuvo pesado el entrenamiento de hoy? – Le preguntó cuándo la pequeña elfa salió de su vista.

– Podría decirse, estos días Luna hace un gran esfuerzo, pero Koba la ayuda pacientemente, ya sabes, es un gran maestro.

Lekai volvió a fruncir el ceño – no debería exigirse tanto, aún le falta mucho para entrar al concurso

– Vamos Lekai, Luna quiere aprender todo lo que pueda, y como le gusta mucho la forma de entrenar de Koba. Dice que no le gustaría decepcionarlo.

Lekai se quedó en silencio un tiempo asimilando lo que el pelirrojo le decía. No fue hasta pasado un rato que hizo la pregunta que realmente quería hacer desde hacía un tiempo.

– ¿Realmente es tan buen maestro ese idiota?

– Oye no le digas idiota ¡ni siquiera lo conoces! – dijo Tony ofendido, omitiendo el hecho de que el tipo era realmente un idiota – es un gran maestro, Luna lo adora, incluso le dijo que le prepararía un almuerzo adecuado uno de estos días ¿Por qué no vas mañana al entrenamiento con nosotros? podrás ver de primera mano lo bueno que es.

Tony solo quería molestar a Lekai un poco, empezar a trabajar más en su plan, pero nunca conto con que Lekai aceptaría

– De acuerdo, iré. Quiero saber porque ustedes dos están tan fascinados por ese idiota.

Tony se quedó con la boca abierta ¡Maldición lo había arruinado! ¿Y ahora qué haría? Jamás creyó que el realmente quisiera ir ¿Por qué de repente estaba interesado? Había calculado muy mal sus progresos.

– ¡Espera! No... ¿No tienes que trabajar mañana en el mercado?

– Sí, pero puedo ir saliendo de ahí. No es un problema.

Tony quería llorar de alegría ¡Una salida! De pronto sintió que debía agradecerles a las deidades que tanto mencionaba Luna.

Gracias dioses de los que hablan demás.

Mentalmente comenzó a hacer cuentas, para la hora que Lekai saldría del mercado ya casi habrían terminado el entrenamiento, podrían decir que Koba tenía algo que hacer y por eso la clase se canceló...

Legionarios: El Nacer Del Fénix (Libro 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora