Sobre la Piel de mi Verdugo

CAPÍTULO 31

Enero, 2016

​​​​​​​CAMILLE

-¡Camille! – Sophia aparecía con Will a la mitad del patio - ¿Para dónde vas? Hemos tardado porque al señor Will se le ocurrió bañarse cuatro minutos antes de salir de casa.

-Sophia – la corto – Alice – la expresión de los dos cambia, pero no veo rastro de sorpresa - ¿Lo sabías? – miro a su pequeño hermano – ¿Lo sabían?

-Camille

-¡¿Lo sabías?! – agacha la cabeza y eso me dice todo – Lo sabías – confirmo.

-Escúchame, recién nos hemos enterado.

-¿Hemos? ¿Gabrielle y Demian? – asiente – todos lo sabían – miro a Will, este mira hacia otro lado, ninguno me da la cara – ¿por qué?

-Llegué de América y me enteré, quise visitarla y no había rastro de ella.

-¿Por qué no me avisaste?

-Porque estábamos tratando de averiguar que había sucedido, hay muchas irregularidades – no la dejo terminar, la aparto de mi camino y me dirijo a la oficina de Howxland, él debería darme respuestas – escúchame, dejanos terminar de averiguar.

-Parker si no quieres que esto termine mal, solo aléjate y déjame hacer las cosas a mí.

-No, ya estamos investigando y no puedes alterarte, tu salud.

-¡Y un carajo! ¿Qué tanto investigan? ¿Fue negligencia?

-Al parecer, ella regresó los fondos y fue a parar a beneficencia, no sabemos lo que ha pasado con el dinero.

Giro intempestivamente - ¿Esto es por dinero? ¿Les importa mas el dinero que encontrar a sus papás? – guarda silencio - ¿Dime? ¿Vale más saber que ha sucedido con el dinero que saber el estado de Maren y Louis?

No obtuve respuestas de Sophia, ni de Howxland y ahora que tenía a mis padres frente a mi ellos no sabían que decir, solo que no lo dijeron para que no recaiga, que ellos buscaban darme la información completa en el momento indicado, pero con todo lo que había pasado pensaron que no era lo mejor. Junto a ellos estaba Sebastián con la mano enyesada y mostrándose sorprendido por lo que estaba sucediendo.

-Sabían lo importante que era Alice, sabían lo que representa sus papás para mí y su movimiento más acertado de todos fue reclamar los fondos y lo peor de todo que no me pueden decir nada.

-Cariño, la noticia nos agarró de sorpresa, nadie lo imaginaba.

-Disculpa Gabrielle, pero Camille tiene toda la razón. Ustedes han jugado con sus sentimientos, le han puesto un peso alto al dinero insignificante que se donaba y eso no es lo importante. Alice siempre lo fue – mi padre con fastidio lo miró.

-Cielo, por favor... obviamente el dinero no es importante, pero siempre uno debe saber lo que ha sucedido.

-No me importa, solo quiero saber – respiro hondo para contener los sentimientos – ¿Fue un deceso tranquilo? – mi respiración empieza a fallar y los ojos a escocer - ¿Sufrió? ¿Necesitó algo? ¿Estuvo acompañada?

-No tenemos los detalles – papá trató de acercarse haciendo que yo de un paso hacia atrás – cielo, ella ya está descansando.

-¡Mientes!

-Camille, tu padre dice la verdad. Han tratado de averiguar todo, incluido los fondos.

-¡Los malditos fondos! – me exalta el tema - ¡¿Por qué es importante el dinero?!