MAS QUE UN JUEGO || FREENBECKY (G!P)

28. Quiero verte otra vez.

FREEN

El sol comenzó a ponerse, y el parque se llenó de tonos dorados y anaranjados. Todo se sentía perfecto, como si el tiempo se hubiera detenido solo para nosotras. Becky cerró los ojos y suspiró, su mano entrelazada con la mía, y en ese momento supe que no había ningún lugar en el mundo donde preferiría estar.

Mientras nos levantábamos del banco para regresar al auto, vi una figura familiar en la distancia. Mario, con una sonrisa amigable en el rostro, caminaba hacia nosotras, sosteniendo un café en una mano y una bolsa de papel en la otra.

:- Hola, Freen- dijo al acercarse, con su voz animada. No pude evitar sentir una ligera tensión en el aire. Becky se enderezó al escuchar la voz de Mario, aunque su mano permanecía firmemente entrelazada con la mía.

:- Hola, Mario- respondí, tratando de mantener mi tono relajado. Becky, sin embargo, apretó un poco más mi mano, lo cual no pasó desapercibido para él.

:- Becky, lo siento mucho por lo de tu accidente. Espero que te recuperes pronto- dijo Mario, su tono sincero, aunque no pude evitar notar la ligera incomodidad en sus palabras.

:- No necesito que me cojas lastima estoy bien- dijo Becky con el ceño fruncido.

Mario parecía un poco desconcertado, pero sonrió de nuevo, como intentando suavizar la tensión.

:- Bueno, solo quería que supieras que lamento lo que pasó- dijo, antes de girarse hacia mí. - Freen, si necesitas algo, ya sabes dónde encontrarme- el me sonrió

:- Gracias, Mario- respondí, intentando mantener la calma. Pero Becky no estaba dispuesta a dejarlo pasar tan fácilmente.

Cuando Mario se despidió y comenzó a alejarse, Becky soltó mi mano bruscamente y empezó a caminar en la dirección opuesta, aunque claramente no podía ver hacia dónde iba.

:- Becky, espera- dije entre risas, mientras la seguía rápidamente. - Cuidado, amor, podrías tropezar o golpearte con algo- dije

:- ¡Déjame en paz, puedo regresarme sola a demás sabes donde encontrarlo ¿no? !- respondió, con su tono molesto pero claramente mezclado con frustración.

:- Claro que no puedes regresar sola- dije, alcanzándola y deteniéndola suavemente antes de que pudiera caminar hacia un poste. - A menos que quieras volver a casa con un par de moretones nuevos- me reí suavemente.

Becky frunció el ceño, claramente enojada.

:- ¿Por qué siempre tienes que ser tan insoportable?- dijo rodando los ojos.

:- No es mi culpa que te guste mi compañía- dije suavemente, inclinándome para besarla en la mejilla.

:- ¿Y si no me gusta?- respondió, girando su rostro en mi dirección, aunque sus ojos no podían enfocarse en nada.

:- Entonces, ¿por qué estás sonriendo?- repliqué, acercándome más, hasta que nuestros cuerpos casi se tocaban. Becky intentó apartarse, pero la rodeé con mis brazos, sin dejarle opción de escapar.

:-Freen...- comenzó, pero no le di tiempo a protestar. La besé, esta vez con más urgencia, como si quisiera borrar cualquier duda que tuviera en su mente. Becky se resistió por un segundo, pero luego respondió, sus manos encontrando mi rostro y sosteniéndome con fuerza.

El beso se volvió más acalorado, y por un momento me olvidé de dónde estábamos. Cuando finalmente me alejé, ambas estábamos respirando con dificultad.

:- Vamos al auto- dije, tomándola de la mano nuevamente.

:- Deberías aprender a dejarme ganar alguna vez- murmuró Becky.