7. Cercanía

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BECKY

La sorpresa me invadió al ver a Bam frente a mí en la puerta. Ella parecía enfadada y confundida, mientras yo intentaba mantener la compostura.

:- ¿Por qué no me contestas las llamadas? - exigió Bam, con los brazos cruzados y una mirada inquisitiva.

:- He estado ocupada con estudios y... otros proyectos - respondí.

:- ¿Podemos hablar en un lugar más privado? - dijo Bam, señalando hacia el segundo piso.

:- No creo que sea una buena idea - dije rápidamente- Tengo mucho que estudiar y prefiero hacerlo sin interrupciones- dije

:- Siempre estás ocupada, Becky - Bam replicó, frunciendo el ceño - ¿Qué está pasando contigo?-

:- Nada, solo estoy concentrada en mis estudios. Ven en otro momento, ¿de acuerdo? - insistí, esperando que aceptara mi respuesta.

:- Está bien, pero hablamos luego - dijo Bam con un tono de resignación, antes de girarse y marcharse.

Cerré la puerta y me dirigí a la cocina, donde mi madre estaba preparando algo delicioso.

:- No me gusta Bam, nunca me ha gustado - dijo mi madre sin rodeos.

:- Mamá, no es el momento para esto - respondí, sintiéndome un poco avergonzada.

:- Solo digo lo que pienso, cariño. Ahora, ve a despertar a Freen - me dijo, con una sonrisa comprensiva.

Asentí y subí a mi habitación. Al entrar, no vi a Freen en la cama, pero luego la vi salir de mi baño con el cabello mojado, vistiendo mi ropa. Llevaba una camiseta gris de cuello redondo y unos shorts negros, claramente de mi estilo.

:- ¿Por qué llevas mi ropa? - pregunté, frunciendo el ceño y tratando de controlar los latidos de mi corazón.

:- Porque la mía está sucia. No esperas que pase el día con ella también - respondió Freen con una sonrisa.

:- ¿El día? - pregunté, confundida.

:- Sí, tenemos que seguir con el proyecto hoy - dijo Freen, con una mirada divertida.

:- Solo encontré bóxer  de chicos en tu armario. ¿No te molesta que haya tomado uno prestado? - dijo Freen, levantando una ceja.

Sentí que me sonrojaba al imaginar a Freen con mis bóxer puestos. Me quedé sin palabras por un momento, tratando de evitar su mirada.

:- Como sea - dije finalmente, mirando hacia otro lado.

Bajamos a la sala y mi madre nos recibió con una sonrisa amplia.

:- Wao, primera vez que veo que eres así de amable con una amiga. Ni siquiera a Friend le prestas tu ropa cuando se queda a dormir - dijo mi madre, haciéndome sonrojar aún más.

:- Yo no se la presté, ella la tomó sin mi permiso - dije, tratando de defenderme.

:- ¿Y no hiciste nada al respecto? - preguntó mi madre, levantando una ceja.

:- Mamá, ya por favor - dije, sintiendo que el calor en mis mejillas aumentaba.

:- Si quieres, puedo quitármela - dijo Freen con una sonrisa traviesa.

:- ¡Que no! - dije rápidamente, sintiendo que mi rostro se volvía aún más rojo.

Mi madre y Freen me miraron con una sonrisa, y yo deseé encontrar un lugar donde esconderme.

:- Ya vuelvo - dije, subiendo rápidamente a mi habitación.

Me encerré en mi habitación por unos minutos, tratando de calmarme. Freen tenía una manera de ponerme nerviosa como nadie más. Finalmente, respiré hondo y bajé de nuevo.

MAS QUE UN JUEGO || FREENBECKY (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora