MAS QUE UN JUEGO || FREENBECKY (G!P)

32. Proyecto de arte

Maratón 3/3

BECKY

:- ¿Qué dijiste? - exclamó, sorprendido.

La sala quedó en silencio por un momento, y luego Freen rompió a reír.

:- Papá, es broma. Es solo una vitamina - dijo, aún riendo.

El señor Sarocha limpió la mesa con una toalla, todavía con los ojos muy abiertos.

:- Dios mío, Freen, me asustaste. Pero me alegra ver que estás tan feliz - dijo, finalmente relajándose un poco.

Sonreí tímidamente, tomando otro sorbo de mi café mientras Freen se acercaba a mí, colocando su mano sobre la mía.

:- Lo siento por la broma, papá. Pero de verdad, Becky me hace muy feliz - dijo, mirándome con amor.

El señor Sarocha nos miró a ambas y asintió, con una sonrisa.

:- Eso es lo único que importa. Que seas feliz, cariño-

Salimos de la casa de Freen y nos dirigimos a la universidad en su coche, la música suave llenando el aire mientras el paisaje pasaba rápidamente a nuestro alrededor. No podía evitar mirarla de reojo, admirando su perfil perfecto mientras conducía, concentrada pero relajada.

El trayecto fue tranquilo, y aunque no hablábamos mucho, el silencio entre nosotras se sentía cómodo. De vez en cuando, Freen me lanzaba una sonrisa y yo le devolvía el gesto, sintiéndome más conectada con ella que nunca. Estaba segura de que mis sentimientos por ella solo crecían cada día más, y estar aquí a su lado, camino a apoyarla en su presentación, solo reforzaba lo que ya sabía: la amaba, mucho.

Cuando llegamos a la universidad, el bullicio habitual nos envolvió. Caminamos por los pasillos, entre estudiantes que se movían apresurados de un lado a otro, y no pude evitar notar cómo algunas miradas se posaban en nosotras. Tal vez era porque estábamos tomadas de la mano, algo que yo rara vez hacía en público, pero con Freen todo parecía natural.

Fue entonces cuando nos encontramos con Friend, quien no perdió la oportunidad de empezar a molestarme.

:- ¡Vaya, Becky! Estás muy cariñosa hoy- dijo, alzando una ceja y sonriendo con picardía.

Sentí cómo mis mejillas se calentaban al instante.

:- ¡Cállate, Friend!- le respondí, intentando sonar firme, pero no pude evitar que mi voz temblara un poco, lo cual solo hizo que Freen y Friend se rieran más.

:- ¿Y esa cámara que llevas colgada en el cuello?- preguntó Friend, curiosa.

:- Es de Freen- le contesté, tocando la cámara que colgaba de mi cuello con cuidado. - Le voy a tomar unas fotos-

Friend me miró sorprendida, levantando las cejas.

:- ¿Qué? ¿Y desde cuándo eres fotógrafa?- preguntó

Rodé los ojos, suspirando.

:- Tonta, Freen tiene que presentar un proyecto con Nam y con... con ese mendigo- murmuré, casi sin querer decir el nombre de ese en voz alta.

Friend no pudo evitar reírse.

:- ¿Mendigo? ¿Quién es ese?-

:- Se refiere a Mario- intervino Freen con una sonrisa, sin mostrar ningún rastro de molestia. Parecía disfrutar del hecho de que estaba celosa.

Friend asintió, todavía riendo.

:- ¡Ah, ya entiendo! ¿Puedo ver las fotos que tomes?- preguntó Friend, con una expresión curiosa.