JACAERYS
CON EL PASAR DE LOS DÍAS, LA PRESENCIA DE AMERYAN SE TRANSFORMÓ EN un martirio. Con solo pensar que tendría que resistir más lunas en compañía de ese audaz y presuntuoso doncel un incómodo escozor se apoderaba de la piel de Jacaerys. La incomodidad de su cuerpo era evidencia de lo mucho que aborrecía tener que compartir su tiempo con Ameryan, pero más le molestaba lo bueno que era el doncel manipulando a los demás. Bastaron un par de prácticas de pelea más para que sus compañeros guardias preguntaran por Ameryan.
—¿Vendrá a vernos hoy? —le había preguntado uno.
—Viene a ver al príncipe Jacaerys, no a tí, Mondrak —le dijo otro.
—¿Creen que nos traiga más pasteles de azúcar? —inquirió uno de los más jóvenes.
—¿No creen que es una buena tarde para que el doncel de Altojardín cante para nosotros? —preguntó otro.
Y así pasaban todos los entrenamientos. Las conversaciones con Jacaerys pasaron de ser sobre las prácticas y las armas a ser sobre Ameryan. Los guardias le preguntaban cuándo sería la boda, cuántos hijos esperaba tener y no dudaban en recalcar la suerte que tenía por estar comprometido a un doncel tan agradable.
No por eso dejaría de jugar a lo que sea que Ameryan estaba jugando. Ya ni siquiera estaba seguro de cuál era el bendito juego, sólo quería ganar y alejar al doncel. ¿De qué otra forma podría hacerle ver a Ameryan que pasar la vida junto a él sería un dolor de cabeza? Jacaerys hizo su parte, movió sus piezas lo mejor que pudo cuando le tocó hacerlo. Fastidió las reuniones de Ameryan con Rhaenyra y Daemon, mostraba una clara falta de interés a sus historias y se mantenía en silencio.
Si su atención era lo único que mantenía allí a Ameryan, entonces Jacaerys no se la daría. De eso se trataba su plan, ese que tanto estudió y practicó. Mismo plan que se veía cada vez menos exitoso.
Lo ignoraría, tan simple como eso.
—No me gusta la expresión en tu rostro —dijo Helaena, sin apartar la mirada de su bordado.
—Ni siquiera me has visto —sonrió Jacaerys.
Helaena bufó.
—No necesito verte para saber qué es lo que hay en tu mirada —refutó—. Hiciste una travesura más, ¿cuándo te cansarás de atormentar a ese pobre chico?
—Cuando se de cuenta que estará mejor en Altojardín —musitó—. Y la de hoy no es una simple travesura.
Helaena dejó a un lado la tela.
—Jacaerys, sabes lo que dicen de mí por los pasillos. —No fue una pregunta, Helaena se lo estaba recordando—. Mis dolores de cabeza me muestran cosas. Pueden ser imágenes claras o simples ideas, pero lo veo. Todo lo que he visto en mis sueños es felicidad para ti, por eso debes detenerte ahora.
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LACUNA, Jacaerys Velaryon.
Fanfiction࿐ ࿔*:・𝐋𝐀𝐂𝐔𝐍𝐀 | JACAERYS VELARYON no esperaba encontrar en un matrimonio arreglado lo que faltaba para llenar el espacio en su alma. • JACAERYS VELARYON X MALE OC! [PERSONAJE MASCULINO] • ⚠️ TENER EN CUENTA: • por favor, lean las etiquetas y...