Te estuve esperando L(G)TB

Aprendí de ti #36

Capítulo 36

Aprendí de ti

Freddy

«Colgar.»

«Colgar.»

«Apagar.»

No me dejaba dormir con sus llamaditas cada cinco minutos, el muy animal. A las tres de la madrugada recordé que la solución estaba en apagar mi teléfono celular, después de todo a mí no me llamaba nadie y si seguíamos así no iba a parar. Mi churri no estaba diciendo, no me importa, le pueden salir ojeras de oso panda, se lo merece.

Yo tampoco podía dormir ¡Maldición! Se supone que no debía sufrir porque después de todo, si yo estaba aquí en mi habitación y no en su cama, era por su culpa, por traídos y mentiroso.

Yo también era un mentiroso..., bueno, eso era un tema aparte que no teníamos por qué tocarlo ahora. Su mentira era más grave, lo sé yo, lo sabes tú y lo sabemos todo. Él no dañó solo mi orgullo, rompió, pisoteo y escupió a mi pobre corazón.

Brandon era mi primer novio y nadie me dijo que esto podía doler tanto, me ha dolido mucho.

De nada servía seguir con este drama, tenía que solucionar los problemas uno a uno. Salí de la cama justo a la salida del sol. Tenía un plan...

¿Tenía un plan? Quizás mi idea de la situación era un tanto..., sencilla. Cómo entrar y salir de una habitación, solo un paso, pero lo cierto es que mi corazón no dejaba de latir.

La primera tarea era decirle a mi padre que era bisexual, aunque ahora tenga problemas con Brandon, eso no significa que lo dejara, aún no llegamos a un acuerdo.

La segunda tarea era..., se supone que debería hacer algo con respecto a Brandon, aún no tenía claro si perdonarlo porque al final de cuentas yo también le he ocultado cosas, castigarlo o mándalo a la mierda. Estaba entre las dos últimas y la idea de ambas me dejaban sin aire.

Me vestí, tome las llaves y salí del apartamento con una sonrisa en el rostro y los ánimos en el suelo.

—Caramelito...

Me giré al escucharlo a mi lado —¿Qué haces aquí?

Su aspecto daba pena, al menos yo sabía fingir. Él se veía desaliñado, la camisa tenía arrugas, sus ojos cansados, una barba ligera en su rostro y el cabello revuelto. Se seguía viendo caliente..., tengo que cambiar mi enfoque si quería hacerlo rogar por perdón.

—Tu teléfono celular está apagado —me informó.

Me cruce de brazos —Estoy consciente de eso Brandon, yo lo apague.

Le di la espalda y caminé hacia mi moto, lo dejaría con las palabras en la boda. Ahora mismo no quería escucharlo, eso era la segunda tarea y aún no estoy del todo seguro de cómo hacerlo.

—Necesitamos hablar Freddy, no puedes mantenerme lejos siempre —hablo él, siguiéndome—. Tenemos una relación.

—No perro, ya vi que soy tu amante —me subí a la moto—. Lo superaré, ahora largo...

—¡Freddy!

Encendí la moto y no arrancaba. En las películas esto salía bien, uno se iba con estilo de situación como estás, pero yo estaba intentando hacer que esto arrancará con un tonto.

—¿Te llevo? —se ofreció él—. Traje mi coche y a esta hora hay muchísimo tránsito, te será difícil tomar un taxi.

Me reí —Maldición, ya vámonos.

¿Qué opciones tenía? Seguramente muchas, podría pedirle la moto a Eros, pero estaba tan enamorado que en el fondo, muy en el fondo de mi corazoncito destruido, yo quería está con él. Al parecer era un poco masoquista.