- ˗ˋ୨LA OFICINA୧ˊ˗ -

0044 > La cereza del pastel

Juan se recostó por el pecho del pelinegro, jadeando cansado, se sentía como si hubiera corrido un maratón, su pecho subía y bajaba. Las manos cálidas del más alto pasando por su antebrazo, repartiendo besos por su cabeza y sintiéndose mimado nuevamente por este... Hombre, que de alguna vez estuvo perdidamente enamorado.

Eso, fue hace mucho tiempo. Y de los errores se aprende, eso es lo que dicen.

Pero... ¿Que aprendió Juan de enamorarse de nuevo de alguien que anteriormente le había marcado algo doloroso en su vida? Sus constantes abusos, fueron tan desgarradores esos pensamientos que hasta tuvo que cerrar sus ojos para pensar en otra cosa. Su tacto no le daba asco, pero le daba un sentimiento perdido que, a su parecer, no sabía cómo describirlo.

Es como... Un sentimiento de tristeza, enojo y felicidad a la vez. Sus constantes preguntas que siempre habían sido consumidas por las dudas de lo que diría la gente si las hacía. Claro, es como preguntarle a una persona que hace un pez en el agua, y que te responda “nada”. (N/T; XD)

—— ¿Por qué usualmente eres tan amable conmigo? — pregunto el castaño miope más bajo. Recordaba cada una de las ‘versiones’ de Spreen, el pelinegro solía mirarlo con amor, arrastrarse a el como un perro con la cola entre las patas y dedicarle cada una de sus palabras en una poesía de papel y lápiz. Pero, después de todo lo que pasó entre ellos, su expectativa de que Spreen sea alguien lindo pero que le costaba expresar sus sentimientos de cara frente a el, cambio, fue agresivo, se volvió distante y si lo buscaba era solo para tener sexo, eso... Fue un cambio en el cuál Juan no pudo soportar lo horroroso que se sintió cuando casi Spreen abuso de el, mientras... Se bañaba. — si piensas que voy a perdonarte...

—— No lo harás, lo sé. Simplemente estoy siendo amable, quiero verte feliz, aunque sea con alguien más que no sea yo. — dijo, su tono de voz era suave, como una caricia en la piel. Realmente, ¿Decía la verdad o no? ¿Existen las segundas oportunidades después de un intento de abuso? — Solo quiero ser útil.

El oji–miel lo miro, sus ojitos brillaron en un destello de emoción, era su oportunidad de expresar como se sentía ante el cambio que tuvo Spreen antes de que todo esto... Sucediera. La policía los buscaba, y, ofrecían una gran suma de dinero si encontraban a Juan.

Y lo que menos quería, era ser encontrado.

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Cuando se hizo de mañana, decidieron agregar combustible al auto. Juan se encargo de explorar el área solo para vigilar que no hubiera nadie que los viera. En una de sus caminatas cerca de su auto, encontró un periódico, pasando página por página, observando las noticias y publicidades en ellos... Encontró la noticia hablando sobre ellos; “La policía sigue buscando al famoso narco Juan C.
Según los policías está perdido desde hace 3 días junto a uno de los empresarios más grandes de Argentina, Spreen DMC.”

—— Spreen, mira esto. — dijo con una voz firme, sin demostrar su preocupación.

Si el iba a la cárcel, su hija, su hermosa hija estaría huérfana.
No debía dejarla sola, lejos de el, sin poder volver a tocar su suave rostro y su pelo lacio. Odiaba la sensación de ser un padre completamente irresponsable y que no estaba disponible para serlo. ¿Por qué un padre abandonaría a su familia solo por cosas ilegales como es la venta ilegal de armas?
Pero, esa niña ya había visto mucho... No se esperaba que no se entere de la noticia de que lo capturaron.

—— Ofrecen recompensa. — hablo el pelinegro, observando el papel entre las manos de Juan. — ¿Y que con eso? No me afecta mucho.

Hablo con tranquilidad, antes de dejar a un lado el bote de gasolina, tirandolo a la carretera. Juan solo lo observo algo molesto por su actitud indiferente al suceso en las noticias.

—— ¿Sabes lo que pasaría si nos capturan? Iremos a la cárcel y tendremos sentencia de muerte, ¡Y yo no puedo ir a la cárcel, tengo una niña a la cuál cuidar! — miro a Spreen con desesperación.

El pelinegro lo miro, enarcando una ceja. Recostando se por el capo del coche.

—— ¿Una mina, eh? — rió bajo. — ¿Ahora te haces el que sos papá, pedazo de boludo? Si pudieras quedar embarazado, ya hubiéramos tenido cinco hijos acá, en tu autito de mierda.

Juan lo miro enojado, aunque Spreen tuviera razón en lo de que ‘ahora se hacía el padre preocupado’, no le daba el orgullo ni la oportunidad de decir que en eso, tuvo razón. Porque nunca admitirá algo que no le conviene admitir, porque el en su interior sabe que es buen padre y que actúa como tal solo para salvar a su pequeña hija que lo espera en casa junto a Barca.

—— ¡Es mi hija! ¡Obvio que estoy preocupado por ella! — suspiro profundamente. Manteniendo la calma antes de seguir hablando, solo se subió al coche en silencio, del lado del copiloto. — Tu no sabes lo que es ser una persona con una responsabilidad enorme como la de tener una ‘mini tu’.

(N/T; se refiere a tener una versión de el pero en femenina y pequeña, aún.)

—— Se mejor como tratar a una nena más que vos, boludito. — se burlo, arrancando el auto, saliendo a la carretera después de la larga espera de tres días.

—— ¿Lo sabes? A ver, dime, ¿Que marca de pañales debes de usar para un bebé? — comenzó a molestarlo, sin mostrar realmente que lo hacía.

Mientras ponía a prueba a Spreen, comenzó a llover. Prendiendo los parabrisas mientras el ambiente se volvía más frío en todo el lugar, se sentía tan cálido aquí adentro, pero, Juan siempre se sentía cálido cuando Spreen estaba cerca de el. Amaba a este hombre, lo amaba, realmente lo hacía. Pero no podía aceptarlo más en su vida, no quería escucharlo más, no quería verlo, hablarle, sentirlo ni tocarlo como lo hacía el antes.

¿Sería lógico enamorarse de el?

No. Pero lo estaba haciendo, estaba volviendo a sufrir por amor, y está vez no es divertido.

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HOLAAAAAAA!!!
Aquí habla Yuki, un gusto volverlos a ver gente, he estado ocupado, me ando acostumbrado mucho a la secundaria y + a mis problemas personales y mentales JAJAJAJAJA
Sin duda extrañaba escribir, lloro

Venía a avisar como seguiría la historia

Este tema de la búsqueda de esos dos criminales de la ley estaría terminando en el capítulo 71, pero dejarían de ser tan relevantes esos temas en el capítulo 60.
La aparición de “Rubí” (como dije en los anuncios de mi cuenta, estén atentos a ellos porque suelo revelar datitos) estaría pasando por el capítulo 50 hasta que Juan vuelva con su hija que se me olvidó el nombre JAJAJAJAJAJAJA
Yyy, la vuelta de la hermosa amistad de Juan + Quacks volverá, pero no diré cuando porque es sorpresa 🤗

SIN MÁS RODEOS A ESTO

NOS VEMOS!!!!!! 🤍🤍