ROBOTS, ABEJAS Y GATOS.

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Estábamos escapando de un robot el cual era un poco más grande que nosotros, tenía dos espadas en cada mano, listas y afiladas para cortar nuestros cuellos.

Ni el gato, y mucho menos yo, nos dejaríamos atrapar por esa maldita cosa.
Mientras el felino corría lo más rápido que podía, yo volaba.

La vida y las especies en la tierra habían cambiado demasiado desde que los humanos tuvieron la gran idea de mutar animales para intentar hacerle frente a su propia creación.

Después de un tiempo logramos perder de vista al robot, nos escondimos en un callejón cerrado y empezamos a jadear debido al cansancio, mire al gato el cual tenía un pelaje de color blanco con algunas manchas grises, tenía tres ojos, dos de color verde brillante y uno en el medio de color amarillo, así como también tenía dos pares de orejas.

-¿Estás bien? -Miré a aquel felino de ojos verdes-.

-Afortunadamente sí, gracias por ayudarme...

-No agradezcas, es lo menos que puedo hacer -me recosté de espaldas a la pared-.

-Jamás pensé que una abeja me salvaría.

-Si bueno las cosas hoy en día no tienen mucho sentido que digamos.

-Tienes razón, al menos -suspiro- los humanos ya no están.

-Un problema menos ¿Quieres venir conmigo?

-¿A dónde? -El felino parecía tener curiosidad-.

-Al refugio, hay muchas especies de animales allí.

-Está bien, cualquier lugar es mejor que las calles.

-Bien.

Camine con cuidado hasta la esquina de aquel oscuro callejón, me asome para asegurarme de que no había ningún robot cerca.

-Ven, tenemos que llegar antes de que llegue otro.

El felino camino quedando detrás de mí, me aliste para empezar a volar y él corría detrás de mí.

¿Qué tanto habrá sufrido por culpa de los experimentos humanos?
Quizás lo mismo que yo, ambos eramos más grandes de lo normal aunque él al menos aún andaba a cuatro patas. Quizás los humanos no tuvieron tiempo para mutarlo tanto, a diferencia de mí...

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Hola, espero que tú personita del mundo esté bien, en donde sea y cuando sea, tal vez nos volvamos a encontrar con otra historia y, con otras palabras.

Este es un relato bastante especial ya que fue hecho con tres palabras totalmente al azar, dadas por una persona la cual participó en una dinámica que hice en instragram.

Si les gustó no olviden dejar su voto positivo ya que eso me ayuda demasiado, en serio, muchas gracias por leer. Sin más que decir, no vemos pronto...

 Sin más que decir, no vemos pronto

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