La pequeña Black| Seth Clearwater

El vestido ideal

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°•°•°•"Estás entre lo que quiero tener y lo que me da miedo tener"•°•°•°

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— ¿Te vas conmigo hoy? — Rachel entro a mi habitación con una tasa de café en la mano.

— Si, ya casi estoy lista— le contesté terminando de acomodar mi cabello ahora completamente marrón.

— Ya no está — se acercó, tomo mi cabello y entendí a lo que se refería — ¿Significa lo que creo?.

— Así es — sabía que Rachel me entendía sin tener que darle tanta explicación y agradezco eso.

— Después de todo es aún mejor chico de lo que pensé — se dejó caer sobre mi cama.

— Estás diciendo que es buen chico porqué terminó conmigo — definitivamente es verdad pero quería saber que diría, la mire atravez del reflejo del espejo — si manchas mis sábanas con café, tu tendrás que lavar esas y las que tengo sucias.

— Estoy diciendo, que es buen chico porque te dejo a pesar de quererte de verdad — tienes razón, fue mi respuesta — a demás, no soy tan torpe como para derramar el café.

— Si tú lo dices — me levanté con una sonrisa y tome mi mochila — vamos.

Rachel se levantó de mi cama y ambas salimos de la habitación, la caminata asia la casa de Emily fue agradable, hablamos, reímos un poco y en unos quince minutos ya estábamos allí.

— Buenos días — mi hermana fue la primera en entrar, es raro saludar con un buenos días como si recién amaneciera cuando en realidad son las diez de la mañana.

— Hola — entre a la casa con una sonrisa y ví a Brady sentado en una silla, lo saludé con la mano y me acerque a Emily — buenos días mamá Emily.

— Buenos días Beth — nos abrazamos y ella por un momento se detuvo a ver mi cabello como si estuviera buscando comprobar algo y cuando lo hizo me dió una sonrisa de lado — hoy viene Claire.

— De verdad — le pregunté feliz y ella asintió — genial, ya tenía ganas de verla — iba a seguir hablando pero fui interrumpida por dos voces.

— Hola — Leah entro a la casa con su habitual cara que decía "no tengo ningún problema con nadie, pero no me hablen".

— Hola, buenos días — saludo Seth tan dulce como siempre, luego me vió mi y al percatarse volteó a ver a Brady para luego regresar su mirada a mi y así un par de veces hasta que se dió cuenta — buenos días Beth.

— Buenos días Seth — le dí una pequeña sonrisa y luego miré a Emily nuevamente — voy a caminar, ¿Podrías avisarme cuan llegué Claire?.

— Claro que sí — me respondió dulcemente — pero ten cuidado por favor, nunca se sabe que te puedes encontrar en el bosque.

Ni me lo digas, pensé al recordar mi encuentro con aquella vampira llamada Charlotte.

Salí de la casa tranquilamente después de decirle a Emily que volvería pronto, caminé mucho tiempo en el bosque.

Me hacía bien estar ahí, sin pensar en nada, ni en Brady, ni en Seth y tampoco en Jacob, simplemente estar ahí caminando.

No sé cuánto caminé pero llegue hasta un pequeño riachuelo muy bonito, me senté en una roca que estaba en la orilla mientras jugaba un poco con el agua.

Estuve ahí en silencio un rato largo hasta que sentí que alguien se sentó a mi lado, posiblemente me hubiera asustado si no fuese porque reconocí su perfume.