Vengo con la esperanza de...

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Alyssa.

Deje a Stella con la palabra en la boca y me marche, a mis espaldas se escuchó...

Pronto te arrepentirás de esto, primita.

Decidí buscar a David, lo busque en todos lados pero no lo encontraba. Divisé a mi padre a lo lejos y me dirigí hacia él.

- Papá, has visto a David , lo he buscado pero no lo encuentro- le dije

- Cariño, seguro está en la cocina, se presentó un inconveniente y él fue a ver qué pasaba- respondió.

- Gracias, iré a verlo- le dije y me dirigí hacia allá.

Cuando llegue a la cocina, los sirvientes me felicitaron, pero me dijeron que David acaba de salir con una chica hacia los jardines por la puerta trasera. Estaban muy apurados y preocupados también.

Me encontraba en mi propio hotel, pero para mí era algo desconocido. Cuando Salí hacia los jardines, me encontré con un pequeñito camino de piedras, lo seguí hasta llegar al principal. Increíble era lo que le describía a este hotel.

Había una gran piscina muy grande con dos piletas pequeñas adentro, a sus costados había reposeras. Al lado izquierdo había una cúpula, había más caminitos de piedra y grandes palmeras, todo era verde. A ambos lados al fondo, casi donde terminaba la piscina estaban los edificios donde estaban las habitaciones. A mi derecha se encontraba la entrada al gran salón. Camine hasta la piscina, y me senté en una reposera; el lugar donde me encontraba era una esquina y prácticamente me tapaban las plantas. Cerré los ojos, el sonido del mar a lo lejos se escuchaba claro y me relajaba. Me estaba quedando dormida, cuando escuche pasos, me incorpore pero fue demasiado tarde porque el extraño me tapo la boca y me arrastro hasta donde había más plantas, quedando así mas escondidos.

- Te soltare pero no grites –dijo esa conocida voz, asentí. Me libero lentamente y gire a verlo.

- Zahid, casi he muerto del susto!-le dije dándole un pequeño golpe en el hombro.

- La conciencia sucia?- preguntó

- No, mi conciencia está tranquila – le respondí algo molesta.

- Tranquila muñeca, vine a darte esto- saco una cajita de su bolsillo- ábrelo.

Lo tome de sus manos y lo abrí. Dentro encontré un colar con la letra de mi nombre con incrustaciones de piedras preciosos, también me encontré una papelito. Guarde el collar y leí el papel.

Vengo con la esperanza de que sea yo a quien quieres. Vengo con la esperanza de que podamos crear un futuro, juntos. Vengo con la esperanza de que seas mía para siempre. Vengo con la esperanza de que te escapes conmigo. Vengo con la esperanza de que si me rechazas, algún día me pueda olvidar de ti porque hoy te confieso que sin querer me he enamorado de ti.

Mi corazón dolió, me acerque hacia él y lo abrace, el correspondió mi abrazo. Ahí en sus brazos llore, tenía miedo y me dolía hacerle daño a las personas y me dolía por Zahid, él no se lo merecía.

- Gracias Zahid pero...Lo siento –susurre- yo... yo... lo elijo a él.- le dije. Sentí como él se tensó y me abrazo más fuerte, llore más.

- Vengo con la esperanza de que me des un último beso – susurro e mi oído.

Levante mi cara de su pecho y lo mire a esos hermosos ojos que desde la primera vez me gustaron, hoy le decía adiós porque no es justo para David y lo último es que él también salga lastimado por mí.

 Me acerque y lo besé.

Adiós Zahid Boittano, es momento de que nuestros caminos se separen para siempre.

Eso era lo que pensaba en ese momento, pero como cambiaría las cosas en mi futuro.

El me recibió con ansias, me dio todo en ese beso. Fue dulce al principio pero se tornó algo más pasional, el mordió mi labio, nuestras lenguas jugaban impacientes.

 Nos separamos por falta de aire.

- Adiós Alyssa Kendrick-dijo dándome una última mirada.

Me quede sentada un rato más, luego me dirigí hacia los servicios para arreglar lo que quedaba de maquillaje.

David:

Salí a buscarla, me dijeron que había estado preguntando por mí y que se dirigió a los jardines. Supuse que estaba paseando por los alrededores, el lugar es impresionante y muy grande. Estaba a punto de dirigirme a las estatuas que se encontraban por el camino que estaba atrás de la piscina, seguro Alyssa estará por ahí, pero escuche sonidos que provenían de un lugar muy cercano , las abundantes plantas no me dejaban divisar quien estaba allí. Con mucho cuidado rodee el camino y lo que me encontré fue shockeante.

Alyssa se estaba besando apasionadamente con Zahid Boittano, parecía que la vida se les iba en ese beso. Mis dudas volvieron, recordé el mensaje que leí en su celular; decidí creer en ella y no hacer problemas, pero esto solo confirma que ese día pasaron el día juntos y no fue con una amiga como ella me dijo.

Tuve que sentarme en un rinconcito a procesar lo que había visto, un amor tan apasionado con el de ellos... yo ... simplemente no puedo competir con eso.

Me sentía realmente devastado, decidí creer en ella con la esperanza de que nada fuese cierto.

Me mentí a mi mismo.

Lo siento Alyssa, por no ser lo suficientemente bueno como para cumplir con tus expectativas.

Lo siento por fallarte.

Lo siento porque hayas tenido que recurrir a otro, para que ser feliz.

Furioso llame a la única persona que me podía ayudar en este momento, Stella.

No quiero perderte, amor mio.

- Ha ocurrido lo peor, necesito verte ahora- le dije preocupado, yo no la perdería.

- David? Qué ha sucedido? Estoy en una suite, sube es la Queens.- respondió.

- Llego en 5 minutos-corte.

Le pregunte a algunos empleados la ubicación de la habitación y la encontré en seguida, cuando llegue toque y salió Stella en bata.

- Ella tiene otro- solté , Stella agrando los ojos

- ¿Qué? No te lo puedo creer- dijo sentándose en el borde de la cama

- Dime tu plan , yo necesito recuperarla- le dije

- Tranquilo David – se paró dirigiéndose hasta una pequeña mesita donde había dos copas y un vino- toma esto, te vendría bien-me entrego la copa con vino. 

La tome de un solo.

- Gracias , que haré?- pregunte

- Nada, yo lo arreglare todo- dijo, sentí los parpados pesados y luego caí dormido.

Todo se volvió oscuridad, este es el principio del fin.

Atrévete a Mirarme [ COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora