Era un día perfecto en Auradon, con cielos despejados y el sol brillando cálidamente sobre el reino. Mal y Ben habían decidido tomarse un descanso de sus deberes reales y aventurarse hacia un lugar escondido que Ben había descubierto años atrás: el Lago Encantado.
BEN: Te va a encantar, (le prometió Ben mientras caminaban por el bosque) Es un lugar al que solía ir de niño cuando necesitaba alejarme de todo.
MAL: (sonrió) Si es tan tranquilo como dices, suena perfecto para nosotros ahora.Desde que Ben se convirtió en rey, sus vidas habían estado llenas de responsabilidades, reuniones, y problemas que resolver. Aunque ambos amaban Auradon, también extrañaban esos momentos de tranquilidad donde podían ser solo ellos dos, sin presiones ni expectativas.
Después de caminar durante un rato, los árboles comenzaron a abrirse, y finalmente llegaron a una pradera que daba al borde de un lago cristalino. El agua brillaba bajo la luz del sol, reflejando el cielo azul como un espejo. Alrededor del lago, flores silvestres de colores vibrantes crecían en abundancia, y una brisa suave hacía que las hojas de los árboles susurraran suavemente. Mal se quedó boquiabierta.
MAL: Es... increíble.
BEN: (sonrió al ver su expresión) Sabía que te gustaría. Y lo mejor es que casi nadie viene aquí. Es nuestro pequeño refugio.Ambos se quitaron los zapatos y caminaron descalzos hasta el borde del lago, donde el agua era tan clara que podían ver las pequeñas piedras en el fondo. Ben se sentó primero, jalando a Mal hacia él hasta que quedó acurrucada a su lado.
Por un rato, no hicieron más que escuchar el sonido del viento y el agua. La paz del lugar los envolvía, y era como si todo el estrés de las últimas semanas se disolviera en el aire.
MAL: ¿Alguna vez pensaste en escapar? (preguntó Mal de repente, su voz suave).
BEN: (frunció el ceño ligeramente, mirándola). ¿A qué te refieres?
MAL: Escapar de todo esto. De las responsabilidades, de los problemas. Solo... tú y yo, sin que nadie más importe. (Mal bajó la mirada al agua, sus dedos trazando círculos en la superficie) A veces siento que todo es demasiado. ¿Y si simplemente desapareciéramos?Ben la observó en silencio por un momento antes de colocar un brazo alrededor de sus hombros, acercándola más a él.
BEN: He pensado en eso. Pero también sé que no podemos huir de quienes somos, Mal. Somos líderes, y eso significa enfrentar los problemas, no huir de ellos.
Mal suspiró, comprendiendo lo que decía, aunque en su corazón el deseo de escapar aún persistía.
MAL: Es solo que... a veces siento que no pertenezco. A pesar de todo lo que ha pasado, sigo siendo hija de Maléfica.
Ben levantó su mano y la colocó bajo el mentón de Mal, levantándole suavemente la cara para que lo mirara.
BEN: No eres solo la hija de Maléfica. Eres Mal, mi Mal. La chica que decidió hacer lo correcto, la que luchó contra su propio pasado y eligió un camino diferente. Y, lo más importante, eres la persona a la que amo.
Mal lo miró, sus ojos violetas llenos de emociones encontradas. A veces se le hacía difícil aceptar que alguien como Ben pudiera verla de esa manera, sin juzgarla por sus orígenes. Pero él lo hacía, una y otra vez.
Ben sonrió suavemente antes de inclinarse y besarla. El beso fue lento, lleno de cariño y de la promesa de que no importaba cuán difíciles fueran las cosas, siempre se tendrían el uno al otro. Mal cerró los ojos, dejándose llevar por el calor de sus labios, sintiendo cómo todo lo demás se desvanecía.
Cuando se separaron, Ben apoyó su frente contra la de ella, sus respiraciones entrelazadas.
BEN: No tienes que ser perfecta, Mal. Solo tienes que ser tú. Y eso es más que suficiente.
Mal sonrió, sintiendo cómo su corazón se llenaba de calidez.
MAL: Gracias por recordármelo.
El sol comenzaba a ponerse, tiñendo el cielo de tonos anaranjados y rosados. Los reflejos en el lago hacían que el lugar pareciera aún más mágico.
BEN: (se puso de pie y extendió una mano hacia Mal) ¿Te gustaría bailar?
MAL: (lo miró, divertida). ¿Aquí? ¿Ahora?
BEN: (asintió, con una sonrisa encantadora) No hay mejor momento ni lugar.Mal rió suavemente y tomó su mano, dejando que él la guiara hacia el centro de la pradera. Sin música, sin público, solo ellos dos bajo el cielo de colores. Ben la sostuvo con firmeza, y comenzaron a moverse lentamente, dejándose llevar por el momento.
BEN: Bajo las estrellas o bajo el sol, siempre seremos tú y yo (susurró Ben)
Mal sonrió, cerrando los ojos mientras se acurrucaba contra él. "Tú y yo," repitió, sabiendo que, sin importar lo que el futuro les deparara, siempre encontrarían la forma de estar juntos.
Y así, en la tranquilidad del Lago Encantado, Mal y Ben compartieron un momento de pura paz, sabiendo que, al final del día, lo que realmente importaba era su amor.
ESTÁS LEYENDO
One Shots DESCENDIENTES
FanfictionESTÁ HISTORIA ESTÁ MARCADA COMO COMPLETA, PERO, SE SIGUEN AÑADIENDO CAPÍTULOS. Serie de One Shots de las parejas de Descendientes PAREJAS: +Devie +Beal +Jarlos +Jonnie