Me escaparé antes de ser tuya. [En proceso].

Capítulo 42.

Gabrielle

Llegamos a la mansión y bajamos del auto, entramos, a la mansión.

—Gracias Dean por dejarme asistir a la recaudación de fondos—dice Alice.

—A la que le debes de agradecer es a Gabrielle.

—Es verdad gracias Gabrielle—dice y me abraza.

—No es nada—dijo.

—Estoy cansada, los dejo, me voy a dormir
—dice Alice.

—Que descanses—dije.

Dean se acerca a su hermana y le da un abrazo.

—Te veías hermosa hermanita te quiero y descansa—le dice Dean a Alice.

—Hasta mañana hermano—se despide Alice.

Alice se va y nos deja solos, Dean se acerca y me toma de la cintura y me da un beso con desesperación.

—Estaba tan desesperado por besar esos lindos labios—dice.

—Yo también moría por besarte—dije y le doy un beso hambriento.

Dean sube su mano por mi muslo hasta llegar a mi coño, donde no traía ropa interior.

—¿Por qué no te pusiste bragas—dice enojado.

—Las olvidé—dije con tono seductor.

—Te castigaré por andar con el coño descubierto—dice y palmea mi coño y suelto un gemido.

Dean empieza a frotar sus dedos en mi coño, de pronto siento como entra uno de sus dedos de una sola estocada y me pongo la mano en la boca para no gemir.

—Dean vamos a la habitación, nos pueden  ver una de tus hermanas o tus hombres—dije.

—Ellas se encuentran dormidas no bajarán y mis hombres no tienen permitido entrar mientras yo no se los autorice—dice mientras introduce otro de sus dedos dentro de mi coño muerdo mis labios para no soltar un gemido y que todos me escuchen.

—No te detengas gime mi nombre, mi hermoso durazno, quiero escucharte—dice.

—No quiero que nos escuchen—dije.

—Eso no debe de importarte, es mejor que te escuchen para que sepan que eres solo mía—dice mientras mueve sus dedos rápidamente en mi coño.

—Dean—gimo y le clavó las uñas en su mano.

—Grita mi nombre más fuerte—dice y mueve más rápidamente sus dedos en mi coño.

—Oh Dean, me voy a venir—dije.

—Hazlo mi hermoso durazno—dice y sacó sus dedos de mi coño y me vengo,.

—Deliciso—dice y chupa cada uno de sus dedos como si fuera su comida favorita.

Me toma de la nuca y me besa, con deseo, pega su mi cuerpo al suyo y siento su enorme erección, me voltea y pongo mis manos en el sillón, Dean pone su mano en mi espalda para ponerme en cuatro y frota su erección en mi trasero.

—Mira como me pones hermoso durazno—dice frotando su erección en mi trasero.

Dean alza mi vestido y se quita el cinturón de su pantalón y deja caer el primer golpe en mis nalgas y muerdo mis labios para no gemir.

—No te detengas hermosa gime para tu hombre—dice y suelta otro cinturonazo en mi trasero y no me contengo y gimo.

—Oh Dean—dije super excitada.

De lo excitada que estaba, está muy húmeda, que quería que Dean me follara ya.

—Estas tan mojada—dice tocando mi coño.