Capitulo 44

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JJ y Valentina estaban sentados alrededor de la fogata, envueltos en una frazada, disfrutando de la noche al aire libre.

Valentina, sonriendo, le dijo: "Entonces te tengo que dar 17 besos, por la fecha de nuestro aniversario. Elige dónde los quieres."

JJ, con una sonrisa pícara, respondió: "¿Dónde yo quiera?"

"Donde quieras," afirmó Valentina, con una mirada traviesa.

Él se acomodó mejor en su asiento, tomando la mano de Valentina y posándola en su entrepierna.

"Típico de JJ Maybank," dijo Valentina, riendo levemente.

"Pero tú dijiste dónde yo quiera..." replicó JJ, con un guiño de complicidad.

Valentina, aceptando el desafío, tiró su cabello hacia atrás y se inclinó hacia el botón de la bermuda de JJ. Con movimientos delicados, masajeó su miembro y lo besó, creando una atmósfera cargada de complicidad y deseo.
Valentina sintió la tensión en el aire mientras sus labios rozaban la piel de JJ. La fogata crepitaba suavemente, iluminando sus rostros en una danza de sombras y luces cálidas.

JJ, conteniendo la respiración, acarició el cabello de Valentina, disfrutando cada momento. "Eres increíble," murmuró, su voz apenas un susurro.

Ella sonrió mientras continuaba, sintiendo que cada beso y toque estaban llenos de significado. La conexión que compartían había crecido con el tiempo, y esa noche, bajo el manto estrellado, todo parecía perfecto.

bajó de nuevo su cabeza hacia el miembro de JJ. Con las manos, lo acarició suavemente, sintiendo cómo la tensión aumentaba entre ellos.

"Me muero de la vergüenza si los demás ven lo que estamos haciendo," confesó Valentina, con un toque de nerviosismo en su voz.

JJ, con una sonrisa descarada, respondió: "Tranquila, te tapo con la frazada."

Valentina se sintió aliviada al escuchar esto, y su sonrisa regresó con fuerza. Con un movimiento sutil, bajó nuevamente la cabeza, preparándose para explorar más. Comenzó a acariciar y besar el miembro de JJ con delicadeza, disfrutando del momento íntimo que compartían.

La fogata crepitaba en el fondo, creando un ambiente acogedor y secreto. JJ se sumió en la sensación, sintiendo que todo lo demás se desvanecía mientras se concentraba en Valentina y su conexión. Cada beso y toque era una mezcla perfecta de ternura y deseo, mientras el mundo exterior se desvanecía poco a poco.

JJ se encontraba inmerso en una ola de emociones mientras observaba a Valentina. Cada instante que compartían, especialmente en esa atmósfera íntima alrededor de la fogata, era electrizante. Sus miradas se entrelazaban, y él sentía cómo su corazón latía más rápido.

El calor de la fogata contrastaba con la frescura de la noche, creando un entorno íntimo y cómodo donde todo se sentía posible. Al ver a Valentina, su risa, su confianza, y esa chispa en sus ojos, JJ no podía evitar sentirse afortunado. Era un momento de conexión auténtica, donde el mundo exterior parecía desvanecerse.

Al mismo tiempo, había una mezcla de nerviosismo y emoción. Sabía que lo que compartían era algo especial, un vínculo que iba más allá de lo físico. La cercanía con Valentina lo hacía sentir querido y vulnerable a la vez, pero también increiblemente vivo. Se dio cuenta de que cada gesto, cada susurro, reforzaba su conexión.

En su mente, JJ sabía que este tipo de momentos eran raros y valiosos. Con cada sonrisa y cada mirada, se prometió atesorar esa noche, porque era un reflejo de su amor y de la chispa que compartían. La fogata crepitaba, iluminando sus rostros y sellando en su memoria una experiencia que siempre recordaría con cariño.

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