Valentina estaba en la habitación de JJ, terminando de maquillarse frente al espejo. Llevaba un top ajustado que destacaba su figura y unos shorts negros de tiro bajo que acentuaban su cintura y su abdomen perfectamente tonificado. Unas botas texanas completaban su look, dándole ese toque rebelde y encantador que tanto le gustaba a JJ.
Mientras ella se daba los últimos retoques, JJ, ya un poco animado después de beber con John B y Pope en el living, decidió subir para ver cómo iba. Al abrir la puerta, la vio y se quedó un segundo sin palabras, mirándola de arriba abajo con una sonrisa encantada.
—¡Diablos, nena! —exclamó JJ mientras la abrazaba desde atrás, rodeando su cintura con los brazos y dejando un beso en su cuello—. Definitivamente eres una modelo.
Valentina soltó una risa mientras intentaba terminar de delinearse los ojos, aunque el reflejo de JJ en el espejo la hacía sonreír.
—Basta, idiota —dijo ella, divertida, dándole un pequeño codazo, pero sin que se rompiera el momento. Ambos rieron y se miraron en el espejo, cómplices, disfrutando de esos segundos juntos.
—¿Vamos? —preguntó JJ después de un rato—. Kiara ya nos está esperando con la camioneta. Vamos a ir a la fiesta en la casa de Barry.
Valentina terminó de guardar su maquillaje en el bolso, revisó una última vez su look en el espejo y asintió. Con una sonrisa llena de entusiasmo, tomó la mano de JJ y ambos bajaron las escaleras para reunirse con sus amigos. John B y Pope los recibieron con miradas cómplices, como si supieran que el par de novios había tenido un momento especial allá arriba.
Al salir de la casa, Valentina se acomodó en la camioneta junto a JJ, mientras Kiara arrancaba y se dirigían hacia la fiesta.
La camioneta avanzaba por las calles mientras todos iban hablando y riendo en el camino. Kiara manejaba con una sonrisa divertida, Pope iba de copiloto haciendo bromas y John B y JJ estaban en la parte de atrás con Valentina, abrazándola mientras compartían cervezas y canciones a todo volumen. La emoción crecía con cada kilómetro, y Valentina se sentía libre y feliz rodeada de sus amigos y con JJ a su lado.
Cuando finalmente llegaron a la casa de Barry, ya se escuchaba la música a lo lejos y se veía el movimiento de la gente en el patio delantero y alrededor de la piscina. La casa estaba iluminada y repleta de caras conocidas, y el ambiente prometía una noche épica.
—Vamos, chicos, esta noche es nuestra —dijo Kiara, alzando una cerveza en señal de brindis mientras todos bajaban de la camioneta.
JJ entrelazó su mano con la de Valentina, y juntos se dirigieron hacia el interior de la casa, donde la música retumbaba y los amigos los recibían con entusiasmo. Algunos chicos del grupo ya estaban armando una fogata en el patio trasero, y el ambiente era perfecto para una noche de fiesta.
Mientras avanzaban entre la multitud, JJ no soltaba a Valentina ni un segundo. Ambos bailaron, reían y se perdían en la música, aprovechando cada instante. Pope y Kiara se unieron a ellos en la pista improvisada, y pronto todos estaban sumergidos en el ritmo de la fiesta. Valentina, llena de energía, se movía con gracia y atracción, siendo el centro de atención de algunas miradas, aunque ella solo tenía ojos para JJ.
En medio de la fiesta, JJ notó a Barry acercándose. Barry, como siempre, tenía una mirada desafiante y un poco burlona. Se acercó con una sonrisa torcida, dirigiéndose a JJ.
—Bueno, JJ, parece que te estás divirtiendo con la nueva chica más linda del pueblo, ¿eh? —dijo Barry, mirándolos a ambos de una manera que hacía que JJ se pusiera en guardia.
JJ sintió un pequeño impulso de tensión, pero mantuvo la calma. Apretó la mano de Valentina, dándole un beso en la frente como respuesta a la provocación de Barry.
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Verano en Outer banks
RomanceLa prima de Sarah Cameron llega a outerbanks, gracias a que sus padres no la pueden tolerar mas. De castigo la mandan a esa isla y conoce a nuevas personas.