Llegada A Los Ángeles

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Narra Duff:

Abrí la puerta y lancé mi mochila hacia el suelo junto al sofá.
-¿Duff?-preguntó un Izzy somnoliento.-Que rápido haz vuelto.-dijo después.
-Estuvo allá Izzy.-le dije.
-¿Cómo lo sabes?-preguntó. Saqué la carta que Jerry me dio y se la tendi. Los demás llegaron e Izzy leyó en voz alta.- "Querido Matt:
Antes que nada, espero que estés bien. No sé si Jerry te lo dijo o no, pero en fin, lo diré de cualquier forma. Estaba en Los Ángeles y he vuelto después de una pelea con Michael o Duff, como lo quieras llamar. Supongo que a eso lo sabes ya que debe de haberme buscado en tu casa también. Además tengo la dificil tarea, con un nudo en el estómago, de decirte que Jerry...está muerto. Lo dijeron por la radio pero no se si lo hayas oído. Cuando llegué de Los Ángeles volví al viejo departamento y luego fui a su casa. Yo fui quien hizo la denuncia anónima, y es anónima por mis problemas con la Policía.
Dile a Michael, ya que sé que él está aquí porque lo vi, que se aleje. No quiero volver a verlo en mi vida, que sea feliz con la banda y que le agradezco el echo de que me haya dado a entender que la jodida amistad se termina. Yo voy a recomenzar mi vida lejos de aquí, lejos de Seattle, lejos de toda esta mierda y sobre todo, lejos de él, no tiene sentido que me siga buscando y que por mí se vaya al infierno, ya no es mi amigo, ya no es mi compañero y ni siquiera es mi hermano o hermanastro. Ojalá ambos sean felices y tal vez nos veamos en el mas allá.
Hasta nunca,
___(tn) Richards."-
-Lo siento amigo.-dijo Steven.
-Ya no queda más que hacer.-dijo Slash.
-Sí, ella no quiere ser encontrada.-agregó Axl.
-No la voy a encontrar. Jamás querrá verme de nuevo y tal vez sea lo mejor.-dije, decidiendo hacer lo mismo que ella, empezar de nuevo a partir de aquí y dejarla atrás.

Geffen nos llamó esa semana para charlar sobre las entrevistas.
-Hola Geff.-saludamos al entrar a su despacho.
-Hola chicos. Tomen asiento.-así lo hicimos.
-Bien, ¿Qué quieres decirnos?-preguntó Axl.
-Sobre las cosas que responderán a las preguntas, sobre todo por su amiga. No deben nombrarla, nadie debe saber de ella. No podemos darle fama a alguien que no tiene nada que ver con ustedes. Si los medios se enteran los etiquetaran como machistas y eso no es bueno para ustedes.-nos dijo. Yo prestaba muy poca atención, tampoco pensaba nombrarla, no tenía sentido hacerlo.
-Está bien.-asintió Axl.
-Bien. Vayan a grabar, empezaremos lo antes posible para que puedan salir de gira.-nos ordenó. Salimos de ahí y nos dirigimos al estudio.

Al principio era divertido pero después de las 12 horas iniciales ya estabamos todos cansados.
Decidimos quedarnos y no irnos hasta acabar, solo para terminar de una maldita vez y no tener que volver de nuevo.
Estuvimos casi 4 días ahí. 4 días grabando sin parar una y otra vez para que cada canción quedara perfecta.
Y lo logramos. Appetite For Destruction saldría a la venta en algunos meses y en ese tiempo podíamos descansar mientras Geffen arreglaba las fechas para salir de gira. Siendo sincero, no me emocionaba el echo de tener que pasar horas y horas sentado en un bus esperando para llegar a otra ciudad, pero eso sólo era un sacrificio para llegar a las otras ciudades, ir de fiesta y tener sexo con muchas mujeres.
Todo tiene un sacrificio y estaba dispuesto a enfrentar este.

Narra ___(tn):
Llegué. Por fin llegué a la puñetera ciudad de San Francisco. Era linda y grande. Tendría mucho que descubrir.
Bien, mi primer objetivo, encontrar un departamento que pueda pagar. Seguí conduciendo y me detuve frente a un edificio de unos 15 pisos. Era de departamentos ya que no era hotel y tampoco de oficinas. Tenía paredes grises y se veía bien para mi. No era el más lujoso pero tampoco el más pobre.
Sin pensarlo dos veces entré.
El hombre de unos treinta años que estaba detrás del mostrador me miró detenidamente, fijándose en mi cabello verde manzana.
-Buenos días. ¿Qué necesitas?-preguntó amablemente.
-Quería saber si hay algún departamento que pueda comprar.-le dije sin rodeos.
-Los departamentos desocupados están en los dos últimos pisos. No son los mejores pero puedes ir a mirar.-me informó.
-De acuerdo. Iré a ver.-subí por el ascensor hasta el piso 14. Comencé a ver los departamentos. Eran 5 por piso. Todos eran bastante parecidos. Un baño, una cocina junto al comedor, la sala y dos habitaciones.
Decidí mirar en el piso 15. También 5 y había uno que, si bien tenía las mismas cosas que los demás, era algo más pequeño, por lo tanto ha de costar menos. Me decidí por ese. Bajé por el ascensor y me dirigí al hombre de nombre desconocido.
-¿Haz visto alguno que te gustara?-preguntó.
-Sí. Me gustó el departamento 1505 del piso...-
-15.-terminó él.-Puedes saber en qué piso estás por el primer número del número del departamento. En este caso son dos.-sonrió.-Bien. Está en el precio de 30,000 dólares. Es más pequeño que los demás por eso el precio. Alguno de los otros hubiera estado en 50,000.-me informó mientras sacaba los 30,000 dólares de mi mochila. Agradecí que me sobrara bastante dinero como para llenar el departamento y comprar algunas cosas más. Se los entregué y me hizo firmar algunos papeles.
-Yo soy Jimmy Parker, ___(tn). Siempre que necesites algo puedes llamar.-dijo sonriendo.
-Gracias, Jimmy.-dije subiendo mis cosas hacia el departamento. Tenía el piso sólo para mí.
Llegué y las lancé al suelo de la próximamente sala de estar. Cerré con mi llave y volví a bajar. Saludé con mi mano a Jimmy y salí a buscar una tienda de muebles.

-Bien señorita Richards, sus muebles estarán en su departamento en media hora.-dijo el hombre en el mostrador.
-Gracias.-respondí para luego irme. Subí a mi moto y di una vuelta por la ciudad para conocerla un poco mejor. Recorrí en esa media hora los barrios de alrededor de mi edificio. Tenía todo lo que necesitaba cerca y eso era grandioso. Bares, tiendas, un hospital, policía, restaurantes elegantes y no, todo, todo lo que necesitaba.
Volví al edificio y en ese momento llegaron los de la tienda y empezaron a subir mis cosas.
Siguieron mis órdenes y el departamento quedó justo como lo quería. Aun faltaba un poco para que anocheciera así que me dirigí a la cocina. Se veía grandiosa. La nevera y la cocina eran de un metal oscuro, al igual que la encimera. Tomé las cortinas de color verde manzana con bordes negro y las coloqué en la ventana.
Me giré hacia la mesa. También era negra y tenía cuatro sillas negras, dos a cada lado. Me gustaba como se veía. Caminé hasta la sala y miré el resultado.
De frente tenía la puerta, unos metros a la derecha el televisor, unos metros a mi costado, el sofá negro y grande. Tenía los cojines verdes manzana que habia comprado. Fui hacia el pasillo. El baño seguía igual, sólo habia agregado la cortina de baño, la cesta con toallas y un espejo.
Volví al pasillo y fui a mi habitación. Era perfecta. Cortinas azules oscuras, el armario y la gran cama con sábanas y colchas negras. Fui a la otra habitación. Había una cama, y esta no estaba decorada como el resto del departamento. Habia comprado esa cama sólo por si alguien se quedaba aquí ya que era obvio que conocería gente.
Volví a mi motocicleta, saludando por millonésima vez a Jimmy y me fui a una tienda de música donde necesitaban a alguien.
-¿En qué te puedo ayudar?-preguntó la chica de cabello oscuro con puntas rojas. Era un poco más alta que yo, tenía ojos oscuros, dos piercings en su nariz, uno a un lado y el otro al medio, y uno en su ceja derecha. Sus orejas también tenían algunas perforaciones pero no tanto como las mías.
-Vengo por el trabajo.-le dije. Levantó su vista para verme y sonrió sin mostrar los dientes mientras asentía levemente con aprobación.
-Bien. Mira, esta es la caja registradora, allá están los discos de Pop, Punk, Rock & Roll, Hard Rock, Glam Metal, Disco, etc, etc.-dijo apuntando con su dedo a cada uno.-Allá están los instrumentos, bajos, guitarras, baterías, baquetas, púas, teclados, flautas, panderetas, lo que sea.-dijo apuntando hacia el lado trasero.-Y al fondo está la bodega. Dime tu nombre chica verde, necesito hacer tu identificación.-
-___(tn) Richards.-le dije.-Y...-dije apuntándola con mi dedo para que me dijera el suyo.
-Danielle Novoselic-sonrió.-Pero dime Danil. ¿De dónde eres ___(tn)?-preguntó.
-Soy de Seattle, pero vine para acá.-respondí.
-Seattle...solía ir hacia allá. Mis tíos viven allá junto a mi primo. ¿Y por qué viniste?-preguntó.
-Problemas.-respondí simple.
-¿Algún día me dirás?-preguntó buscando algo bajo el mostrador.
-Tal vez.-respondí. Ella rió.
-Ten.-me entregó un uniforme como el de ella. Era una camiseta roja con bordes negros y una gorra negra. Ambas con el logo de la tienda.-Cámbiate en el baño, aquí atrás. Vas a empezar ahora. Está llegando gente.-dijo. Fui al baño y me cambié. Salí y comenzamos a atender a los clientes que llegaban.

-Bien...es hora de cerrar.-dijo Danil estirando los brazos. Habíamos quedado que mi turno sería todos los días, exceptuando fines de semana, y sería desde las 7pm hasta la hora de cerrar a las 10:30.-¿Dónde te estás quedando, ___(tn)?-preguntó.
-A unas calles de aquí en el edificio Ryder.-le dije.-Vivo en el 1505 si necesitas algo.-le informé.
-Bien. ¿Te vienes conmigo y unos amigos a beber algo?-preguntó. Ella me había caído bien y al parecer yo a ella.
-Claro.-respondí.-¿Quieres que te lleve?-pregunté.
-Si tienes en qué estaría bien.-sonrió amistosa.
-Vamos.-reí y la guíe. Soltó un silbido al ver mi moto.
-Linda.-dijo asintiendo.
-Gracias.-dije montándome.-Dime por dónde.-le pedí y así lo hizo hasta que llegamos a uno de los bares que había visto más temprano. Bajamos y entramos. Dos chicos saludaron a Danil con la mano y ella se acercó haciéndome seguirla.
-Chicos, esta es ___(tn)-dijo presentándome.
-Hola ____(tn) lindo cabello.-dijo el de la izquierda. Era rubio, tenía ojos celestes, alto y vestía de negro. Era bastante guapo.
-Sí, está grandioso.-dijo el de la derecha. Era alto, de ojos oscuros y cabello negro.-Soy Robby.-se presentó. -Yo soy Sid.-dijo el rubio.
-Un gusto chicos.-les dije. Danil y yo nos sentamos junto a ellos y comenzamos a beber y platicar. Cuando ya se hizo algo tarde, me despedí y partí hacia mi departamento.
Me lancé hacia la cama y así me dormí. Había sido un día agotador y divertido.

Después De La Tormenta~Duff McKagan y tú~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora