La Casa de Jerry

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Narra ___:
Guié a los chicos hacia la casa de Jerry. Estaba bastante arruinada por fuera, pero eso no era importante.
Volví a guiarlos hacia el patio trasero y los hice entrar por detrás, lo cuál me sorprendió hasta a mí porque pensé que la puerta estaría cerrada o con la cinta amarilla de la policía.
Cuando entré, me encontré con la sorpresa de que todo estaba limpio. La basura de la fiesta no estaba y todo estaba bastante ordenado.
Seguí paseándome con los chicos por la casa, que estaban callados ya que les dije que hicieran silencio porque tenía mis sospechas de que la casa estuviera siendo ocupada por alguien más.
Llegamos a la sala y comencé a ver las fotos de Jerry sobre la chimenea.
-¡¿Quiénes son ustedes?!-preguntó alguien a nuestro lado apuntándonos con su pistola.
-¡¡¡AHHH!!!-Gritamos todos asustados.
Era un chico rubio, con unos ojos azules impresionantes. Era de estatura media y tez blanca. Usaba unos pantalones rasgados y parecía asustado, pero decidido a disparar.
-¡¿Qué hacen aquí?!-preguntó. El chico se me hacía conocido.
-¡Por favor no nos mates!-rogó Danil al borde del llanto.
-¡Sólo queríamos ver la casa del amigo de ____(tn)!-dijo Sid.
-¿El amigo de...?-estaba diciendo hasta que lo interrumpí.
-Tu eres su primo ¿No es así? Tu eres el primo más pequeño de Jerry, eres Kurt Cobain.-le dije segura.
-¿Tú quién eres?-preguntó con los ojos como platos-¿De dónde conoces a mi primo?-
-Escucha Kurt, yo era su amiga, tocaba con él en Tommy Llorón. No nos mates, no venimos para robar es sólo que estoy ofreciendo un tour a mis compañeros de banda por mi cuidad natal, sólo eso, no sabíamos que estabas viviendo aquí. Me llamo ___(tn), no se si lo sepas.-le conté. Kurt soltó aire, cosa que no sabía desde cuando estaba haciendo.
-Mierda.-soltó la pistola, dejándola caer en el suelo.-Casi te mato ___(tn), odio estas cosas.-pateó la pistola.-Un gusto.-les tendió la mano a mis amigos.-Bien, ___(tn), la próxima vez usa la puerta delantera.-dijo dejándose caer en el sofá.
-Está bien, Kurt. Gracias por no matarnos.-le agradecí.
-Sobre todo eso.-dijo Robby.
Nos despedimos de Kurt y salimos de ahí.
Mientras caminábamos, rápidamente les conté la historia de Jerry, o sea, la historia de su muerte y como lo encontré.

-¿Qué haremos la noche de Halloween?-preguntó Sid. La noche de Halloween era uno de mis días preferidos del año.
-Creo que tenemos un concierto.-dijo Robby.
-Podemos subir a tocar disfrazados o pintados.-sugerí.
-Es una buena idea.-dijo Danil.-¡Pido ser un zombie!-dijo emocionada.
-Yo me pintaré como miembro de Misfits.-dije.
-Yo como la muerte.-dijo Sid.
-Y yo como prostituta.-dijo Robby seriamente a lo que nosotros respondimos con una carcajada.
-Eso no da miedo.-dijo Danil.
-No es para dar miedo, es para divertirnos.-dijo alegre.
-Yo azotare a esa puta.-dije divertida. Robby se puso delante de mi y se inclinó, meneando su culo delante de mi. Le di una fuerte palmada y él soltó un gemido de puta.
-¡Dame más, bebé!¡Me encanta!-dijo con voz de puta mientras nosotros reíamos a carcajadas y la gente nos miraba.
-¡Hey!¡Son Sweet Revenge!-gritó alguien, dándonos la señal para darnos a la fuga.
Comenzamos a correr a toda velocidad por las calles.
Sid iba delante y en algún momento se giró para vernos y chocó con un basurero, cayendo al suelo.
Danil empezó a partirse de la risa y tropezó poco después.
Robby saltaba los cestos de basura, hasta que de uno salió un gato, asustándolo y provocando que saltara hacia el otro lado, terminando sobre otro cesto.
Y yo, bueno yo terminé sobre un auto cuando terminaba de cruzar el callejón. No me atropellaron, yo salté y terminé sobre el auto.
Los demás me alcanzaron justo cuando el conductor estaba bajando molesto. Así que salté para bajar de ahí y corrimos por el parque hasta donde se suponía debía estar el bus, esquivando gente, perros, discos, basureros y más gente.
-Miren lo que hago.-dijo Sid corriendo y saltó a un perro que orinaba junto a un cesto de basura.
-Yo puedo hacerlo mejor.-le reproché y corrí, saltando a gente que estaba sentada en una banca.
-Abran paso al rey.-dijo Robby y saltó a una mujer sentada con un coche de bebé.
-Robby es el ganador, ya, ya, apúrense.-dijo Danil aún corriendo.

Llegamos al bus y entramos rápidamente.
Michael estaba en el sofá con los pantalones abajo y una puta entre ellas.
-¡Mis ojos!-chilló Danil.
-Oye si, que suculento.-dijo pervertido Sid.
-Voy a vomitar.-dije asqueada.
-Dale todo, Michael.-lo alentó Robby.
Todas estas frases al mismo tiempo. Michael las oyó y empujó a la puta lejos mientras el brincaba hacia atrás.
Todos soltamos una carcajada al ver la cara roja de Michael y a la puta correr lejos.

Esa noche, después del concierto, mientras viajamos hacia la próxima ciudad, festejábamos con alcohol y drogas.
-Oye Danil, vamos, hazme lo que le hacía esa puta a Michael.-dijo Sid fuera de sí.
-No jodas Sid, házmelo tu.-respondió Danil.
-Pero tú no tienes manguera.-dijo decepcionado. Solté una carcajada.-___(tn), házmelo tu.-pidió Sid.
-Pero tú no tienes manguera.-imité.
-Si, si tengo. Fíjate.-intentó desabotonar su pantalón, pero no pudo.-Ow, no puedo.-dijo triste.-Robby, ayúdame.-pidió.
Robby se levantó, pero tropezó y terminó con la cara en las bolas de Sid y ahí se durmió. Aproveché para tomar algunas fotos y luego Danil y yo nos quedamos dormidas.

-¡¡AHHH!!¡PELOTAS EN MI CARA!-se quejó gritando Robby mientras se levantaba.
-¡No grites!-le gritó Danil, lanzándole un vaso.
-¡No grites!-pidió Sid y pateó descalzo a Danil.
-No me pegues.-dijo ella, devolviéndole la patada.
-Tu no me pegues.-dijo más fuerte Sid.
Tomé una botella y lancé contra la pared, rompiéndola.
-¡Cállense!-les grité y todos seguimos durmiendo.
Era una buena estrategia para hacer callar a la gente.
Lo único que puedo sacar de enseñanza de esto es que jamás dejes que tu novio duerma en las pelotas de su amigo. Puede terminar mal para ti también.

Después De La Tormenta~Duff McKagan y tú~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora