Miro a través de la sucia ventanilla del tren,mientras que un aviso suena por todo el vagón.
Kurt,junto a mi,quema parte del reposa brazos mientras sonríe complacidamente.
Queda menos de una hora para llegar a Seattle y cada kilómetro que recorre el tren estoy más y más cerca de ser un poco feliz.
-Es una mierda que no dejen fumar aquí,me aburro demasiado...
La voz de mí acompaňante me despierta del trance al que estaba sometida haciendo que ría al verle dar una fuerte patada al asiento de delante.
-¿Sabes,Caroline?-Empieza a decir después de que el seňor que ocupaba la butaca de delante nos mirara con odio-Somos los mejores de este vagón.
Le sigo con la mirada mientras lleva una cerilla a un hilo suelto de mí camiseta y lo quema hasta consumirse.
Me regala una sonrisa.
-¿Y porque no los mejores del tren entero?-Pregunto quitándole de las manos la pequeňa caja con la que juguetea nervioso.
No tiene ni idea de como va a salir esto,ninguno de los dos lo sabe.
Ninguno de los dos tenemos dinero y no me deja preguntarle sobre su banda,supongo que no les irá bien.
Supongo que me he equivocado al venir con el.
Supongo que me he enamorado de el.-Por que en el tercer vagón hay un niňo con una camiseta de los Melvins-Rie.
Vuelvo a mirar hacia la ventana,que ahora enseňa un pequeňo pueblo perdido.
La sonrisa que se ha creado en mi rostro con sólo mirar a Kurt se va cuando los dos nos quedamos en silencio.
-¿Qué haremos cuando lleguemos a Seattle?
No dice nada.
Solo se oye su respiración que cada vez es más rápida y agobiante.Vuelve a coger la caja de mí regazo y se levanta del asiento.
Mi ser se vuelve algo despreciable hacia mi misma,haciéndome preguntas como "¿Por qué has preguntado eso?" o "¿No te podías quedar calladita?"
Doy otra patada al asiento,haciendo que se queden marcados los dibujos de mis Converses.
Siento como se tira al sillón de nuevo,esta vez molesto.
Agarro su mano izquierda y la estrecho contra la mía dejando la cajita amarilla entre los dos.
Dice sin dejar de minorar de un punto fijo justo delante de sus ojos.
-No tenemos por qué planear nuestra vida como si fuera un ataque terrorista-Posa su iris azul sobre el mio verde y susurra-Todo estará bien al final...ya verás.
❤