Enciende el octavo cigarro dela noche y me mira divertido.
-¿De que hablas?-Dice aguantandose una sonrisa-Los Ramones son más originales,cada canción tiene un ritmo distinto,Los Sex Pistols eran más monótonos.
Río exageradamente.
-Tienes que estar de coňa...las letras de Los Ramones no tienen sentido y las canciones son frases que se repiten durante tres minutos.
Me mira y se queda quieto durante unos segundos.
-Me da igual...ellos son mejores.
-Cállate-digo robandole el cigarro y acostandome junto a él.
Se que me está mirando con una sonrisa de gilipollas.
Cosa que si viniera de otro tío me daría asco y me parecería cursi.
Pero en el,todo es distinto y más complicado.Puede ser que lo que muestra esa sonrisa sea lo contrario a lo que está pensando.
Y eso me frustra demasiado.
El silencio que hay entre los dos es una de las cosas más hermosas que ha pasado entre nosotros desde que vinimos a Seattle.
Seattle.
Joder,hace menos de dos semanas ese nombre solo me traía sueňos a mi cabeza y ahora estoy aquí...fumando,bebiendo junto a un tío que esta aun más perdido que yo.
De repente da un salto,levantándose rápidamente del césped.
Me mira y me tiende la mano.
-Vamos ha hacer algo productivo.
Me levanto sin su ayuda.
-¿Por productivo te refieres a destructivo?
Me dirige una mirada cómplice acompaňada de esas pocas sonrisas que suele regalar el.
-Por supuesto.
Autodestrucción
❤