Closer To You

33 - Nada de qué preocuparse

Aquella mañana, Logan llegó a la casa de Aris a primera hora del día, junto a Kyler. Los recibió la señora Baker. Su amigo fue el primero en pasar a verlo a su habitación. Logan se quedó junto a la puerta, viendo cómo Kyler iba directo a recostarse a su lado y Aris lo abrazaba. Su primo se veía lloroso, agotado, pero no dijo una sola palabra.

Cerró la puerta y los dejó solos, no era a él a quien el chico necesitaba en esos momentos, así que optó por ir hasta la cocina. La madre de Aris seguía con su uniforme, agobiada y cansada mientras intentaba preparar algo de café.

—¿Señora Baker? —Ella lo miró, Logan se acercó a la encimera—. ¿Por qué no descansa un poco? Debe estar muy agotada. Kyler está con Aris, yo me quedaré aquí por cualquier cosa. Lo prometo.

Amelia sonrió apenas, había demasiada tristeza en su interior como para ocultarla.

—¿Tus papás saben dónde estás?

—Por supuesto. Mi mamá quería venir, pero le dije que sería mejor esperar a que Aris esté mejor. Es claro que solo quiere estar solo. Es decir, con Kyler.

—¿Dejó que Kyler se quedara con él?

—Sí. Bueno, Kyler le permite estar a su lado en sus momentos más difíciles, supongo que entiende que ahora es su turno de ceder y no apartarlo. Estará bien, Kyler lo cuidará. Y usted debe descansar. ¿Ha comido algo?

—No tengo mucha hambre, pero gracias. Yo... Está bien, iré a descansar un poco ahora que sé que Aris al menos dejó a Kyler estar a su lado. Es probable que tu tío venga más tarde, fue a solucionar unas cosas.

—Okey, vaya. Si surge algo, yo le aviso.

La señora Baker fue a su habitación, Logan se quedó en el comedor de la casa contemplando la nada, en silencio y sin ánimo de muchas cosas. No era usual que él se sintiera así de desanimado, pero siendo honesto, con todas las cosas que ocurrían a su alrededor tenía derecho de estarlo.

Respondió algunos mensajes, primero los de Marlon y Will, para asegurarles que todo estaba tranquilo. No bien, pero tranquilo.

Luego leyó el de Finn.

Finn Byron❤

cómo está todo?

Logan torció una sonrisa resignada.

Finn era alguien que solía decir palabras hermosas, pero no planeadas. Esa era una de las cosas que más le gustaban de él; la espontaneidad. No obstante, también solía ser uno de los seres humanos más fríos sin darse cuenta.

Aún lo llamaba Sinclair, a pesar de que él usaba el Byron como si fuese un nombre especial entre ellos. Pero Finn no lo llamaba de forma especial nunca, ni mandaba mensajes cariñosos de forma inesperada. No terminaba las llamadas como un novio.

No es que eso le doliera, porque lo conocía y sabía que era su forma de ser. No tenía experiencia en salir con nadie. Más bien, no tenía experiencia en involucrarse de manera afectiva con ningún ser humano. Aris decía que, si ellos no contactaban a Finn, ese chico podía perderse días enteros sin dar señales de vida. Como si lo más natural para él fuese el desapego emocional.

Leyó de nuevo el escueto mensaje de su novio y suspiró. No había un "buenos días, mi amor". Posiblemente esos mensajes jamás existirían de su parte. Y sin embargo, tenía en sus recuerdos lo dulce que era al estar a su lado. Los gestos románticos que solían delatar sus sentimientos mejor que cualquier otra cosa.

Finn era un chico peculiar. Cálido entre ratos, pero en otros frío igual que un témpano de hielo.

No respondió su mensaje, en cambio, marcó su número.