RED TEARS (Calum, Luke y Tú)

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Nota de la autora: SE ACERCA EL FINAL DE LA NOVELA, la canción no tiene que ver con el capítulo pero más adelante veréis el porque...si la seguís. Siento haber tardado tanto en publicar. 

¿Os gusta la nueva portada?

Escuchad la música, supongo que muchas ya la conoceréis. Gracias a las personas que la hayan seguido hasta aquí, me ha encantado cada voto y comentario en la novela. Estoy muy agradecida ;)

Dedicado a: daemlu. Gracias por seguirme y leer esta novela. Espero tus comentarios y votos como siempre digo, ah, y que te guste. Muchas gracias de verdad.

-Luke...- nada más salió de mis labios.

-______...- dijo de la misma forma. Contuve la respiración. 

Por alguna extraña razón, estaba nerviosa. Jamás su presencia me había causado mal estar y menos de la forma de lo que lo estaba haciendo. Eché la vista de nuevo hacia atrás, Calum no estaba donde lo vi antes y en su lugar, estaba cruzando la pista. Coloqué un mechón de cabello detrás de mi oreja derecha, carraspeé indecisa y agarré la muñeca del rubio llevándolo entre la gente que bailaba a ritmo de la música. Vi que fruncía el ceño extrañado, pero la verdad, no quería que Calum me viera con Luke aquí. Sabía que si él sabía de su presencia, no pasaría nada bueno, así que opté por salir de local antes de que se montara un buena -con el sarcasmo incluido en la misma expresión-. Enseñé el sello que te ponían conforme eres cliente de la discoteca, así puedes entrar de nuevo.  Le llevé a un lugar apartado, lejos de la entrada y donde nadie nos pudiera molestar. Le miré un la vez más. 

-Sé que me estás siguiendo ¿Estás jugando conmigo? ¿Acaso nuestra conversación en Hawaii no sirvió para nada?- le pregunté disgustada- joder tío, yo te sigo queriendo mucho Luke y me duele que tengamos que estar así...no tendría que pasar-.

-Pues si me quieres tanto, hazlo por mi y deja a Calum- me agarró de los hombros, me miró a los ojos y sentía un escalofrío que llegó de la nuca hasta el final de la columna.

Su rostro estaba muy cerca. Luke había cambiado, yo no era para nada aquél chico de mamá. Tenía un aspecto más varonil, con esa barba de dos días y esas repentinas ojeras más marcadas. Tenía el cabello algo más oscuro, recortado y peinado. Parecía dolido, triste y sobretodo parecía estar solo. Echaba de menos estar con él, nuestras conversaciones tan largas por la noche y tomar té helado en la terraza trasera de la casa. En definitiva, le echo de menos. 

-No voy a dejarle porque tú lo digas, acabamos de empezar y además...¿Qué te importa?- le miraba desconcertada, algo alterada y con los ojos húmedos. Tenía ganas de llorar.

-¡Me importas tú _____! ¡Tú! ¿¡Es que no lo entiendes o qué!?- apretó sus manos.

-Claro que lo entiendo, lo sé, pero no se puede decidir en el corazón- se fue acercando cada vez más, hasta que sus labios rozaron ligeramente los míos. 

Esta situación me recordaba a mi vida anterior, a como era yo antes y sin querer la _____ del pasado dió señales de vida en ese preciso instante. Pude ver como en la cara de Luke se dibujaba una señal de esperanza, esperanza en recuperarme y volver a lo de antes. Sin embargo, había otra parte de mi que se aferraba a Calum de una forma extraordinaria. Tanto, que ni miles de palabras del rubio podrían hacerme cambiar de opinión. En contra de mis expectativas, todas mis barreras y mi amor por el chico Hood quedaron en un segundo plano. Tener a Luke tan cerca de mí, me hace flaquear y sentir de nuevo aquellas mariposas. Iba a apartarle cuando él me dijo algo que me dejó quieta en el lugar: