Unidos por un bebé (COMPLETA)

Prólogo

POV PEETA

¿Nombre?: Peeta Anthony Mellark.

¿Edad?: 22 años.

¿Profesión?: Futbolista del Club Deportivo "Los Rangers".

¿Qué donde estoy ahora?:

Bueno, se supone que debería estar entrenando para empezar a prepararme física y mentalmente para el mundial, pero me encuentro en la sala del hospital, principalmente en el pasillo de maternidad.

Si, maternidad. ¿Por qué?, porque estoy esperando la llegada de mi primer hijo.

Mi historia es bastante curiosa. Llevaba una vida de soltero, tengo mi casa propia, mis mascotas, tengo contrato por el mejor equipo de fútbol y soy el goleador número uno. Superando al Arsenal, Juventus y cualquier otra liga.

Soy alto, mido 1.75, cabello rubio, ojos azules, buen estado físico, independiente, tengo dos hermanos menores y mis padres. Y por supuesto, a mis amigos del club donde juego.

Vivo solo hace mucho tiempo, desde que cumplí los 18. Vengo de una familia humilde, mis padres se dedicaron por mucho tiempo a la panadería, éramos muy pobres en aquella época, pero con esfuerzo lograron sacarnos adelante.

Yo siempre mostré una habilidad para el fútbol, no fue hasta los 16 años que un club me dio la oportunidad de unirme a un equipo de mi país, "los cruzados". Después de algunos años emigre a otros clubes, llegando a jugar en el "Barcelona" y "real Madrid". Fui ganando mucho dinero, miles y miles de dólares mensuales.

Tengo mi vida propia, vivo en una enorme casa, tengo mi vehículo de marca y último modelo, no tengo mayor compañía además de mis dos fieles perros: Aston y Kaiser. Dos pastores alemanes.

¿Novias?. Sí, he tenido por supuesto pero trato de no ventilar mucho mi vida privada, la farándula se ha aprovechado de más de alguna noticia para vincularme con modelos, actrices o empresarias, junto con el alcohol, el sexo y las fiestas.

Si he tenido mis noches de conquistas, y alguna que otra aventura, soy joven, pero nunca he olvidado mi origen. Viví en un lugar pobre, cada navidad vuelvo a mi ciudad y regalo pelotas de fútbol, barbies, vehículos de juguete o ropa a los niños y adultos que más lo necesitan. Además le compré una casa a mis padres y hermanos, mandé a construir canchas de fútbol cerca de mi ciudad. Yo sé lo que es jugar en canchas de tierra con una botella como pelota.

Como verán mi vida no es muy distinta a la de los demás. A excepción quizás por el dinero, la fama, las noticias, el espectáculo, las mujeres que te llaman y te persiguen a todas horas. El sexo es bueno, eso no lo niego, pero desde que pasó lo que pasó, prefiero evitarlo. O al menos, acordarme de tomar precauciones.

Ahora, tengo que deja todo eso atrás para dedicarme a ser padre de una niña de ojos azules y cabello negro.

¿Cabello negro?, se preguntaran. Si, su madre lo tiene de ese color. Conocí a Katniss en una fiesta. No puedo dar detalles porque lo último que recuerdo es despertarme desnudo con una mujer que no había visto nunca en mi vida a mi lado. Supongo que tome demasiadas copas esa noche, pero estaba emocionado, habíamos sido tricampeones había que festejar.

Producto de eso, nació mi pequeña niña. Soy padre a mis 22 años... ¡¡No puedo creerlo!!. Adiós a mi vida de soltero, adiós a la independencia, adiós a las mujeres y bienvenido el trabajo de cambiar pañales.

- ¿Cómo te encuentras?- Le pregunto a Katniss quien descansa en la cama después de haber traído a su... nuestra hija al mundo.

- Estoy bien- me dice con una sonrisa. Tengo que admitir que se ve linda cuando sonríe así.