Como Prostituta

~CAPÍTULO 43~ Solo mía

-No puedo—lo escuchó sollozar—No me importa si sigues siendo una prostituta estando conmigo. No puedo dejarte ir después de haberte buscado tanto. Solo tienes que estar a mi lado (TN). Te amo tanto —Se aferró más a (TN) sin dejar de sollozar. Había tomado una decisión: No podía vivir sin ella, la amaba y aún tenía la esperanza de que algún día ella dejara de ser una prostituta, y cuando suceda, él seguiría a su lado.

Ella sintió el corazón dándose vuelcos, acelerando su ritmo y sintiendo mayor dolor. Lo amaba, lo amaba tanto—

-Donghae—susurró de nuevo llevando los brazos hasta su nuca para abrazarlo y tratar de consolarlo. Miró a todas partes asegurándose de que Kyuhyun no la estuviera observando, y luego solo lo tomó de la mano y lo jaló con ella hacia el interior de la casa. Cerró la puerta con llave y nuevamente sintió los brazos de Donghae en su cintura—

-¿Te vendrás conmigo?—Lo oyó preguntar. Se encogió de hombros y respiró con profundidad. Hubiese sido más fácil que él se hubiese se hubiese dado por vencido ayer y no hubiese regresado. Así ya no le hubiese hecho más daño... y tampoco se lo hubiese seguido haciendo ella misma sabiendo que está alejando y lastimando tanto al hombre que ama. El padre de su hija. Su amado DongHae.

-¿De verdad serás capaz de soportar que siga siendo una prostituta estado a tu lado? ¿Soportarás saber que alguien más me toca y me hace suya?—

-Eres solo mía—Habló sujetándola de los hombros y haciéndola girara, haciendo que se encontrara con aquellos ojos marrones entristecidos. Aquellos ojos que en su hija lucían felices—No importa con quien estés. No importa si... si tengo que soportar que otros hombres te toquen. No puedo tenerte lejos. Te he buscado tanto como para estar dispuesto a dejarte ir. No puedo vivir sin ti (TN). Ya lo he hecho demasiado tiempo y mi vida ha sido un fiasco—Se volvió a quebrar su voz—Te amo mi (TN)—La volvió a abrazar empezando llorar de nuevo. ¿Qué era peor, saber que estaba con otros hombres que no era él o tenerla lejos y no volverla a ver jamás? Definitivamente para él iba a ser una tortura no volverla a tener en sus brazos, a pesar de que esté con otros también.

-Está bien—Habló ella tratando de apartarlo al sentir que en cualquier momento terminaría rompiendo en llanto y contándole todo. No podía hacer eso, solo pondría en riesgo la vida de él. Le vasta y le sobra con tener que soportar que su hija corre peligro—Iré contigo. Recógeme en la tarde—

-No—negó con rapidez—Temo que si me voy planearás alguna otra excusa para no irte conmigo. Tú dijiste que te irías contigo si permitía que sigas siendo una prostituta. Lo he hecho, ahora te toca venir conmigo—Habló con voz firme pero triste. Ella lo miró. Sus ojos estaban hinchados. No había podido dormir y debe haber llorado mucho. ¿Cómo decirle que lo amaba y que moría por escapar con él para estar a su lado para siempre? No se podía. Kyuhyun los encontraría sea como sea. Lo conoce muy bien. Él no descansaría hasta dar con ellos y terminaría, quizás, matándolos.

-Ok. Espérame entonces. Tengo que arreglar algunos asuntos—Le habló alejándose. Estaba poniéndose nerviosa. Ella no había contado con que él decidiría tenerla siendo prostituta, y eso complicaba las cosas. Lo hacía más difícil porque a ella también le costaba trabajo estar a su lado y no poder decirle que lo amaba.

Camino de prisa hasta llegar a su habitación, en donde cerró la puerta con llave y enseguida sacó su teléfono celular para marcar el número de Kyuhyun—

-¿Aló?—

-Kyuhyun. Donghae ha aceptado estar conmigo siendo yo prostituta—Le clavó de golpe su preocupación y agobiamiento—

-¡¿Qué?! ¿Qué coños le pasa? ¡Maldito imbécil! ¿Pretende que le dé un tiro en la cabeza para que se quede quieto?

-No le hagas nada Kyuhyun. No te atrevas—Gritó alterada ante la sola idea de que se atreviera a matarlo—